Los esc¨¢ndalos de acoso sexual llegan a la m¨²sica alternativa
Una banda indie inglesa, unos heavies polacos y el publicista de un rockero estadounidense, los ¨²ltimos en ser acusados de abusos
Est¨¢ claro que las denuncias por acoso sexual en la cultura y el mundo del espect¨¢culo ya no se limitan al cine. En la industria de la m¨²sica empiezan a acumularse los casos. Como ya inform¨® TENTACIONES, primero fueron las revelaciones de Bj?rk sobre su extra?a relaci¨®n con Lars Von Trier; le siguieron declaraciones de Crystal Castles, Pussycat Dolls y otros artistas. Ahora la pol¨¦mica ha salpicado tambi¨¦n al rock y la m¨²sica alternativa.
Nothing But Thieves es una prometedora banda inglesa con dos ¨¢lbumes publicados; han sido teloneros de Muse, y su primer ¨¢lbum hom¨®nimo lleg¨® al n¨²mero siete en la lista de ventas brit¨¢nica y al uno en la lista de vinilos. Pues bien, hace pocos d¨ªas en las redes sociales aparecieron mensajes que les recriminaban haber tenido conductas inapropiadas con algunas de sus fans.
Varias admiradoras les han acusado a comportarse de forma inapropiada con ellas en los camerinos. Otra ha subido una conversaci¨®n de Whatsapp en la que el bater¨ªa, James Price, le pide un intercambio de fotos expl¨ªcitas. Ella ten¨ªa entonces 17 a?os, asegura. ¡°?Te gustar¨ªa ver lo que te est¨¢ esperando?¡±, escribi¨® supuestamente el m¨²sico. ¡°Porque yo quiero ver lo que me espera a m¨ª. Lo que te espera a ti est¨¢ bonito y duro en este momento¡±.
Kid Rock ha emitido un comunicado en el que explica que el despido no es porque el publicista sea gay (la tendencia ultraconservadora de Kid Rock es de sobra conocida), sino porque las acusaciones de abusos sexuales ¡°se las toma en serio a muerte¡±
Este 15 de noviembre, la banda publicaba un comunicado en el que negaba ¡°al 100%¡± las acusaciones, que ya han tenido consecuencias. La revista New Musical Express, que hab¨ªa organizado un concierto de Nothing But Thieves, ha suspendido la actuaci¨®n. Los teloneros de su gira, July Talk, han preferido bajarse del barco y declinar abrir sus pr¨®ximos conciertos.
A principios de noviembre, el rockero Kid Rock fulminaba a su agente de prensa, Kirt Webster, despu¨¦s de que el cantante de country Austin Rick desvelara que hace unos a?os, en una fiesta en casa de Webster, este le toc¨® los genitales mientras estaban en un jacuzzi con otra gente y que, tras tomar unas copas, despert¨® en la cama de su anfitri¨®n. Kid Rock ha emitido un comunicado en el que explica que el despido no es porque el publicista sea gay (la tendencia ultraconservadora de Kid Rock es de sobra conocida), sino porque las acusaciones de abusos sexuales ¡°se las toma en serio a muerte¡±. Webster es muy conocido en el ¨¢mbito de la m¨²sica country, y ha trabajado con Dolly Parton, Billy Ray Cyrus o Randy Travis. ¡°Espero que las acusaciones no sean ciertas¡±, ha dicho la compositora de I will always love you.
En septiembre, una fan de la banda de metal polaca Decapitated denunci¨® que sus componentes la hab¨ªan secuestrado y violado en el autob¨²s de la gira tras un concierto en el estado de Washington (EE UU). El informe de la polic¨ªa detect¨® abrasiones y heridas en mu?ecas y brazos de la mujer. Los miembros del grupo fueron encarcelados a la espera de juicio. En su comunicado, Decapitated se defend¨ªa as¨ª: ¡°No somos perfectos, pero no somos secuestradores ni violadores¡±. En su declaraci¨®n ante el juez, el 24 de octubre, se declararon ¡°no culpables¡±.
Incre¨ªblemente, algunos fans de Nothing But Thieves defienden que son cosas que pasan despu¨¦s de los conciertos. Como si aqu¨ª pudiera adaptarse el viejo eslogan de Las Vegas: ¡°Lo que pasa en los camerinos se queda en los camerinos¡±. Pero acercarse al backstage a conocer a sus ¨ªdolos no convierte autom¨¢ticamente a una fan en una groupie. Lo que ocurre en la trastienda del rock empieza a salir a la luz.
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