El Cupo vasco es inconstitucional
El Concierto est¨¢ recogido en la Constituci¨®n, pero esta proh¨ªbe que las diferencias entre comunidades aut¨®nomas impliquen privilegios econ¨®micos o sociales como los que en la pr¨¢ctica otorga el opaco c¨¢lculo de la compensaci¨®n anual
Me van a permitir que comience mi exposici¨®n con dos brochazos de trazo grueso. El primero, las Leyes Quinquenales de Metodolog¨ªa para la determinaci¨®n del cupo contienen, en forma de anexo,una grosera cifra global del importe de las competencias asumidas por el Pa¨ªs Vasco y de las compensaciones a aplicar por otros conceptos, de las cuales resulta el cupo l¨ªquido a abonar. Pues bien, nadie ha sido nunca capaz de explicar de d¨®nde salen esas cifras, es decir, c¨®mo y por qu¨¦ se han valorado as¨ª las competencias (no se dice ni cu¨¢les son) y no en otra cifra diversa. Es un c¨¢lculo que todos los expertos definen como totalmente opaco. Resulta as¨ª que el Congreso aprueba mansamente cada cinco a?os un c¨¢lculo que no lo es tal, unas cifras que no est¨¢n explicadas y menos justificadas, que s¨®lo los Gobiernos de Vitoria y Madrid saben de d¨®nde han salido. Sorprendente, ?no?
Otros art¨ªculos del autor
Pero, segundo apunte, resulta adem¨¢s que estas Leyes del Cupo se aprueban por un procedimiento de lectura ¨²nica que no permite discutirlas ni enmendarlas sino s¨®lo votarlas s¨ª o no. Recordar¨¢ el lector que ese procedimiento es el que la mayor¨ªa del Parlament de Catalunya decidi¨® aplicar en septiembre pasado a las leyes de desconexi¨®n y refer¨¦ndum, siendo acusado por ello de haber violado los derechos de la minor¨ªa al examen y discusi¨®n reposada de los proyectos de ley. Pues eso mismo es lo que se hace en Madrid con las Leyes del Cupo, aunque una minor¨ªa se oponga. Tramitar sin explicaci¨®n ni debate una norma basada en un c¨¢lculo que nadie entiende. M¨¢s sorprendente a¨²n, ?no?
Dado que la forma en que ha sido calculado es opaca e impenetrable para los propios expertos, parece claro que la ¨²nica manera de valorar si el Cupo es correcto o no desde un punto de vista econ¨®mico y fiscal es la de fijarse en los resultados emp¨ªricos que produce. Tales resultados son al final el ¨²nico ¨ªndice que permite deducir si la cantidad que el Pa¨ªs Vasco abona anualmente al Estado como pago de las competencias comunes no asumidas que este le presta (en eso consiste el meollo del Concierto) es correcto. O, lo que es lo mismo, si la parte de impuestos recaudados en y por Euskadi que esta comunidad se queda para financiar las competencias asumidas (polic¨ªa, educaci¨®n, sanidad, etc) es la correcta. ?Correcta desde qu¨¦ par¨¢metro, preguntar¨¢ el lector? Pues desde el de igualdad de trato, es decir, el que establece que, a igual esfuerzo fiscal de sus poblaciones y a igual nivel de competencias a financiar, todas las comunidades espa?olas deber¨ªan disponer de una financiaci¨®n per capita similar: la justicia como imparcialidad.
La financiaci¨®n p¨²blica por habitante de las instituciones vascas m¨¢s que duplica a la media
Pues bien, estos c¨¢lculos s¨ª est¨¢n hechos, discutidos y contrastados por los expertos en la materia (me refiero, por citar a algunos, a Ignacio Zubiri, Carlos Monasterio o ?ngel de la Fuente, o a la Fundaci¨®n BBVA, o al Sistema de Cuentas P¨²blicas Territorializadas). Aqu¨ª s¨ª que luce la claridad, en contraste con la penosa fraseolog¨ªa huera de precisi¨®n de los pol¨ªticos de turno. Y tales datos dicen que las instituciones vascas disfrutan hoy de m¨¢s del doble de financiaci¨®n p¨²blica por habitante que la media de las comunidades de r¨¦gimen com¨²n. Y que adem¨¢s el importe de esa sobrefinanciaci¨®n no cesa de crecer: 165% (2002), 177% (2007), 235% (2009). Y crecer¨¢ m¨¢s con el nuevo minicupo.
Visto desde otro ¨¢ngulo, la ventaja vasca en financiaci¨®n se prueba tambi¨¦n en el hecho de que esta comunidad no contribuye al esfuerzo de igualaci¨®n entre comunidades mediante la redistribuci¨®n a trav¨¦s de los fondos de suficiencia. Siendo como es una regi¨®n cuya riqueza es muy superior a la media espa?ola deber¨ªa presentar un saldo fiscal negativo (como sucede con las otras ¡°ricas¡± como Madrid, Catalu?a o Baleares), es decir, deber¨ªa ser aportadora neta de fondos a la solidaridad en un importe de alrededor del 8% de su propio PIB. Pues bien, los n¨²meros demuestran que por el contrario Euskadi es receptora neta de financiaci¨®n del resto de Espa?a, una situaci¨®n incomprensible e inimaginable en cualquier sistema federal comparado.
?ltimamente, y para intentar justificar lo injustificable, se arguye por los defensores del Cupo que esta sustancial ventaja est¨¢ justificada por la asunci¨®n de un riesgo unilateral. La idea ser¨ªa que Euskadi estar¨ªa asumiendo el riesgo de que, si en alg¨²n momento la recaudaci¨®n fiscal en la comunidad vasca se desplomase y pasara a ser una regi¨®n ¡°pobre¡±, entonces no podr¨ªa reclamar la solidaridad del resto del Estado sino que tendr¨ªa que apechugar ella sola con su pobreza. Los 7.000 millones que se ahorra ahora no ser¨ªan, as¨ª, sino la prima por correr con un riesgo. El argumento no se tiene de pie, puesto que se tratar¨ªa de un riesgo inexistente: Euskadi siempre ha sido m¨¢s rica que la media, y precisamente su ventaja v¨ªa Cupo hace que se vuelva m¨¢s y m¨¢s rica comparativamente con las dem¨¢s regiones. Nunca en la historia ha sucedido ese espantoso caso cuya te¨®rica posibilidad cobran tan alto los vascos.
Se argumenta el riesgo, inexistente, de asumir la recaudaci¨®n en caso de empobrecimiento
Carece igualmente de cualquier fundamento emp¨ªrico contrastado, igual que de cualquier c¨¢lculo ajustado, el argumento de que la ventaja vasca se debe en realidad a una mayor eficacia de su gesti¨®n de los tributos, a una Hacienda foral de rigor superior a la espa?ola que sacar¨ªa dinero donde otros no lo encuentran. Un argumento de corte supremacista carente de cualquier estudio ad hoc que lo soporte.
Por ¨²ltimo, no es cierto que los vascos paguen m¨¢s impuestos y por eso tengan m¨¢s recursos (Montoro dixit). Lo cierto es que todos los impuestos concertados son m¨¢s bajos en el Pa¨ªs Vasco que en el territorio com¨²n, lo que sucede es que debido a su mayor riqueza y a la progresividad del sistema tributario la presi¨®n fiscal media es un 3% superior. Igual que sucede en otras comunidades ricas, claro, la diferencia est¨¢ en que Euskadi retiene ¨ªntegramente para s¨ª el exceso de recaudaci¨®n mientras que Catalu?a o Madrid lo aportan a la solidaridad.
Ultimo y aparentemente definitivo argumento: el sistema de Concierto est¨¢ recogido en la Constituci¨®n (DA 1?), luego c¨¢llense los cr¨ªticos que esto no hay quien lo toque. ?Correcto? No: lo que la Constituci¨®n amparaba eran los ¡°derechos hist¨®ricos de los territorios forales¡± pero (incluso suponiendo ¡ªque ya es mucho¡ª que el Concierto Econ¨®mico caiga dentro de ese vago concepto), a?ad¨ªa que su actualizaci¨®n debe llevarse a cabo dentro del marco de la Constituci¨®n. Y ese marco constitucional expresamente proh¨ªbe (art¨ªculo 138) que las diferencias entre las comunidades aut¨®nomas puedan implicar en ning¨²n caso privilegios econ¨®micos o sociales. O sea, Concierto s¨ª, pero desarrollado en la pr¨¢ctica de manera que no genere diferencias de contribuci¨®n o financiaci¨®n tan potentes como para ser calificables de ¡°privilegio¡±. Y si un Cupo que garantiza a los vascos disponer del doble de financiaci¨®n para servicios p¨²blicos que los dem¨¢s espa?oles (insisto, a iguales servicios y a igual esfuerzo fiscal) no es un privilegio de los que repugnaba y repel¨ªa el art¨ªculo 138, que baje Dios y lo vea.
Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz Soroa es abogado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Opini¨®n
- Cupo vasco
- Concierto econ¨®mico
- Constituci¨®n
- Gobierno Vasco
- Financiaci¨®n auton¨®mica
- Gobierno de Espa?a
- Actividad legislativa
- Pa¨ªs Vasco
- Parlamento
- Gobierno auton¨®mico
- Gobierno
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Comunidades aut¨®nomas
- Finanzas p¨²blicas
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Administraci¨®n Estado
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Espa?a
- Finanzas