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Particip¨¦ en un concurso de belleza gatuna en un hotel de Alcorc¨®n Un jurado examina a los felinos de forma muy seria, intentando disimular que en realidad est¨¢ jugando con ellos, para elegir al mejor. A los gatos les da igual ganar, porque son gatos Decir que Internet es una herramienta que sirve b¨¢sicamente para ver pornograf¨ªa y v¨ªdeos de gatos cayendo, haciendo cosas de humanos o simplemente no haciendo nada (vamos, haciendo de gatos) es un t¨®pico. Pero es un t¨®pico demasiado real. La fascinaci¨®n por los felinos va de alguna manera unida a la popularizaci¨®n YouTube. Tener la intenci¨®n de hacer algo ¨²til y acabar viendo tres horas de v¨ªdeos de gatetes: el celing cat, el keyboard cat, stalking cat y hasta el gato volador¡ SILVIA VARELA No tengo la respuesta al por qu¨¦ de esta fascinaci¨®n. Si vemos a un ni?o estornudar increpamos a sus padres:¡°t¨¢penle la boca que est¨¢ llenando todo de g¨¦rmenes¡±; pero es ver a cualquier gato haciendo una maldad y nos saldr¨¢ un ¡°oyoyoyoy¡± con voz de absoluto imb¨¦cil: ¡°Ay bonico, bonico, chiquinino, ay, ay". SILVIA VARELA Tirarnos por el suelo, abrazarlo, cogerlo, darle besos e incluso dejarte lamer, siendo plenamente consciente de que lo ¨²ltimo que han tenido en sus lenguas han sido sus propias pelotas. Pero no existe ning¨²n escr¨²pulo con los gatos; son animales que se autolimpian, se autoacarician e incluso se autogestionan. No tienen ninguna necesidad de nosotros. Solo para comer y el 60% del resto del tiempo lo pasan durmiendo o haciendo v¨ªdeos para Youtube. SILVIA VARELA Pero bueno, vayamos a lo importante. Hablemos de c¨®mo es por dentro un concurso de belleza gatuna, en un hotel de Alcorc¨®n, a casi cero grados en el exterior. Ese lugar en el que puedes tocar, coger y acariciar a casi trescientos gatos gracias a un pase de prensa. Por fin entiendo para qu¨¦ sirve esto de escribir: ?buffet libre de gatos! SILVIA VARELA Nada m¨¢s entrar en el sal¨®n vemos de golpe unas doscientas jaulas. No lo digo en plan despectivo, he dormido en casas con menos comodidades que las jaulas de algunos de estos gatos. Las hay incluso de dos plantas y espacios independientes. La mayor¨ªa de Airbnb tienen menos espacio y son m¨¢s caros que los hogares port¨¢tiles de estos animales. SILVIA VARELA Muchos de estos gatos est¨¢n dormidos -pr¨¢cticamente todos-, pero no necesitan hacer nada para fascinarnos porque son gatos. ¡°Oh, mira, este ha abierto un ojo¡±, ¡°?Mira este como bebe agua!¡±... Nunca hab¨ªamos estado tan hiper estimulados con tan poco est¨ªmulo. SILVIA VARELA Esta exhibici¨®n o concurso forma parte de las miles de exhibiciones o concursos que se hacen por el mundo. En el mundo hay un ranking de gato, al estilo de los de tenis, y cuanto m¨¢s concursos gane tu minino m¨¢s alto estar¨¢ en el ranking. Y, claro, m¨¢s orgulloso estar¨¢s t¨² de ser la mascota de tu gato o al rev¨¦s, seg¨²n se mire. Sus due?os, como padres de artistas, los llevan por toda Espa?a. SILVIA VARELA SILVIA VARELA ?Qu¨¦ tiene que hacer tu gato para ser Miss o M¨ªster gato? Un grupo de expertos internacionales, filtrados por diferentes jerarqu¨ªas tras superar varias pruebas y ex¨¢menes (realmente no me imagino como tienen que ser) juzgan con cara de saber bien lo que hacen y eligen el mejor de su categor¨ªa. SILVIA VARELA Este es el momento bizarro. Hay unos comisarios con bata de cient¨ªficos que son los ¨²nicos con permiso para lucir a los gatos candidatos. Como art¨ªculos de lujo que son, los ponen en mesas donde los jueces, con su cara de jueces, empiezan a manipular a los gatos de forma extra?a. Intentan no sonre¨ªr, para disimular que en realidad, est¨¢n jugando con gatos. SILVIA VARELA Creo que ese es el talento de los jueces. No ser impresionables ante gatos que est¨¢n haciendo de gatos. No s¨¦ muy bien lo que miden antes de anunciar el ganador, el m¨¢s gato, para que el comisario de turno lo eleve por los aires como un trofeo. SILVIA VARELA Se ven hasta l¨¢grimas pero no de gato. A los gatos, como todo en la vida, se la suda. Ese es el poder de los gatos modelo, el de no mostrarte ninguna emoci¨®n. SILVIA VARELA Confesar¨¦ que mi relaci¨®n amorosa m¨¢s intensa fue con mi ¨²ltimo gato, Herpes II. Dorm¨ªamos juntos, com¨ªamos juntos... el ¨²nico ser al que le he permitido mirarme mientras hago caca. Ese nivel de intimidad. SILVIA VARELA Confieso tambi¨¦n que sent¨ªa celos cuando le ve¨ªa ronronear a otro antes que a m¨ª. Eso hacen los gatos, sacan lo mejor y lo peor de cada uno. SILVIA VARELA Supongo que tener un gato con ranking alto da como ¡°pedigree¡±, aparte del orgullo de ser la mascota de un gato top model (no est¨¢ puesto al rev¨¦s, ya me entend¨¦is). Le a?ade cierto valor a su camada, cosa que por cierto no entiendo muy bien. ?Si mi madre canta bien yo cantar¨¦ bien? ?Si mi padre tiene un 47 de pie tendr¨¦ yo un 47? Solo conozco el caso de la familia de Roc¨ªo Durcal que parece que se han reproducido por esquejes como los geranios en el que toda la familia sea tan id¨¦nticamente parecido. SILVIA VARELA El caso es que se crea un ranking de gatos con titulo nobiliario, que es tambi¨¦n hereditario. Pero mira, no necesito que ning¨²n gato me certifique con un t¨ªtulo que es un gato para sacarme mi lado mas ?o?o. SILVIA VARELA Lo que quiero decir es que no necesitas que tu gato est¨¦ en un ranking para ser un gato. Cualquier gato pasar¨¢ de ti, te tapar¨¢ la tele, te romper¨¢ los cables, las cortinas y tus camisas favoritas sin que tenga ning¨²n premio. Quiere a tu gato no s¨®lo por modelo, sino por gato; hay miles de gatos que necesitan un siervo esper¨¢ndote, gatos que realmente necesitan un hogar y cuidados. SILVIA VARELA Puedes adoptar y ayudar a gatos que realmente lo necesitan. Por ejemplo, en Mirada Felina, Mirada Animal, Apagar, Las Nieves, Rivanimal y un largu¨ªsimo etc¨¦tera. Demasiado largo. Y es que, aunque te parezca otro t¨®pico, es demasiado decir que un animal no es un juguete, no es un entretenimiento para un rato. SILVIA VARELA Puedo hacer mil bromas f¨¢ciles sobre gatos, pero no trates a las mascotas como una broma. Si vas a adoptar un gato, s¨¦ responsable. Y ya podr¨¢s pertenecer al selecto club de personas que van con manos y brazos despedazados a cortes y ara?azos, y que tienen que explicar que no son emos pasando una mala racha, sino que simplemente tienen gato. SILVIA VARELA