?A qu¨¦ se dedica el ni?o de ¡°Hola, soy Edu, feliz Navidad?

A Enrique Espinosa le cambiaron el nombre a los siete a?os. No fueron sus padres, sino los creativos de la agencia Casadevall Pedre?o PRG, que, en 1997, idearon la campa?a para Airtel ¡ªhoy Vodafone¡ª protagonizada por Espinosa que populariz¨® aquella frase de "Hola, soy Edu, feliz Navidad". Los espa?oles adoptamos al rebautizado Edu y su saludito con mucho entusiasmo. Los transe¨²ntes lo paraban gritando para pedirle que soltara su frase, al estilo de Bart Simpson y su "yo no he sido". Para Enrique aquello era un juego, para Airtel uno de sus anuncios m¨¢s conocidos. Dos d¨¦cadas despu¨¦s, aquel sencillo saludo sigue inoculado en la memoria de muchos espa?oles.

Aquel ni?o de gafas, parlanch¨ªn y simp¨¢tico, se ha convertido en un emprendedor de 27 a?os que dirige su propia compa?¨ªa de marketing online y desarrollo web. Parec¨ªa inevitable que ¨¦l, protagonista de un fen¨®meno viral, antes de que Internet llegase a todas las casas, se dedicara a algo as¨ª. ¡°Llevo muchos a?os desentra?ando los porqu¨¦s del ¨¦xito de la campa?a que protagonic¨¦ que, curiosamente, tuvo un impacto gigantesco, pero que no logr¨® el objetivo principal, que el p¨²blico lo asociara con una marca. Muchos no recuerdan para qu¨¦ compa?¨ªa era¡±, afirma este barcelon¨¦s, en conversaci¨®n telef¨®nica, que desde su empresa, Agencia Ninja, en la que cuenta con un equipo de cinco profesionales, ofrece asesor¨ªa digital a pymes y grandes compa?¨ªas.

"A m¨ª estos impactos publicitarios me fascinan, me gusta provocar reacciones en la gente¡±, a?ade. Esa era una de sus especialidades de peque?o cuando recorr¨ªa los plat¨®s de televisi¨®n ¡ªCr¨®nicas Marcianas y Esta noche cruzamos el Mississippi, entre ellos¡ª charlando con mucho desparpajo con los presentadores. Tambi¨¦n cuando le saludaban por la calle. ¡°Se formaban tumultos, la gente se arremolinaba en torno a m¨ª en Las Ramblas y me cantaban, pero siempre era en positivo¡±, asegura. ?l solo iba a divertirse, como a los castings. Para el de Airtel, los organizadores le pidieron que simulara una conversaci¨®n tomando un tel¨¦fono m¨®vil. "Yo me imagin¨¦ que hablaba con mi padre, que por trabajo pasaba mucho tiempo lejos de casa. Lo hac¨ªa de manera tan convincente, con sus pausas e inflexiones, que preguntaron si el aparato ten¨ªa l¨ªnea realmente¡±, as¨ª que tuvieron claro que yo ten¨ªa que hacerlo", recuerda. No era su primera vez, ya hab¨ªa aparecido en otros anuncios para Chupachups, el diario deportivo Sport, Aviaco o Prenata. Este, sin embargo, ser¨ªa el m¨¢s importante. Tanto que repiti¨® las siguientes dos Navidades.

A los 10 a?os desapareci¨® para volver a ser un ni?o normal. ¡°Lo ¨²ltimo que hice creo que fue un cap¨ªtulo de Barrio S¨¦samo [el m¨ªtico programa infantil tuvo una ¨²ltima resurrecci¨®n entre 1996 y 2000]¡±. Su sue?o no era ser actor, aunque no reniega de su pasado. ?l mismo subi¨® el v¨ªdeo de su anuncio a YouTube. ¡°Me compr¨¦ una convertidora de VHS a digital y lo publiqu¨¦¡±, apunta. Asegura que no le importar¨ªa volver a hacer el anuncio, pero como algo extraordinario, no quiere dedicarse a la publicidad. ¡°Nunca me cre¨ª famoso, me divert¨ªa estar con otros ni?os en los castings, solo tuve suerte¡±, se sincera.