10 fotos9 cosas sobre el postparto que nadie me cont¨® y me hubiese gustado saberDuelen y desconciertan, como cuando los ¨®rganos se recolocan (s¨ª, eso sucede)Sarah Palanques Tost25 oct 2018 - 18:08CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceCuando me qued¨¦ embarazada de mi hijo me tom¨¦ esa nueva etapa a modo de m¨¢ster universitario. Compr¨¦ los cl¨¢sicos Qu¨¦ puedes esperar cuando est¨¢s esperando, de Heidi Murkoff, la trilog¨ªa del pediatra Carlos Gonz¨¢lez, realic¨¦ un curso estupendo de preparaci¨®n al parto, me un¨ª a todos los foros de futuras mam¨¢s y me tragu¨¦ cientos de v¨ªdeos de Youtube sobre el embarazo. Ah, se me olvidaba, tambi¨¦n me baj¨¦ una app que es un contador de contracciones para el gran d¨ªa. Vamos, nada que ninguna primeriza no haya hecho. Mi ni?o lleg¨® tal y como la literatura explicaba que un parto vaginal normal deb¨ªa ser: una experiencia fabulosa. Hasta ah¨ª todo de sue?o y una suerte impresionante, ?no? La ca¨ªda en picado que me sobrevino a las 48 horas de tener a mi beb¨¦ en brazos fue tan brutal que tard¨¦ un a?o en recuperarme por completo. Tanto libro y tanta historia y se me olvid¨® prepararme para una de las partes m¨¢s importantes de una reci¨¦n estrenada maternidad: el puerperio. El puerperio o postparto es una etapa de la salud femenina muy silenciada cuya visibilizaci¨®n es de importancia capital. La idealizaci¨®n de la maternidad y la presi¨®n sobre nuestra recuperaci¨®n gracias a una narrativa social que presenta a la supermujer perfectamente en forma, divina, reincorporada al trabajo, con un tipo estupendo y un beb¨¦ delicioso poco tiene que ver con la realidad. En el lado bueno de las cosas he de decir que, por suerte, se sale del t¨²nel. Tanto es as¨ª que no solo consegu¨ª salir del t¨²nel sino que se me olvid¨® todo lo malo, lo suficiente como para volver a repetir. Acabo de volver a convertirme en mam¨¢ y esta vez, aunque iba much¨ªsimo m¨¢s preparada para los oscuros d¨ªas postparturientes, nuevos s¨ªntomas y desconciertos me han acompa?ado. Por ello he hecho una compilaci¨®n de todas aquellas cosas que me han sucedido durante el postparto que no vi llegar y me pillaron de lo m¨¢s desprevenida.Antes que nada dejemos las cosas claras, si bien es cierto que desde un punto de vista cl¨ªnico el puerperio tiene una duraci¨®n aproximada de 40-45 d¨ªas, la recuperaci¨®n total lleva much¨ªsimo m¨¢s tiempo. Esta fue una de las primeras grandes sorpresas con las que me encontr¨¦. Mis expectativas de estar a full a los 40 d¨ªas se vieron completamente frustradas cuando el dolor, los cambios emocionales y hormonales me situaron muy lejos de una medio decente recuperaci¨®n. Las primeras dos semanas no hubo cojines mulliditos ni flotadores suficientes en los que sentarme. "Para copar con el dolor de un desgarro o episiotom¨ªa se recomienda tomar ibuprofeno y para desinflamar es conveniente recurrir a la aplicaci¨®n de un gel local o agua de Burow", explica la doctora M. Veciana, especialista en ginecolog¨ªa y obstetricia, quien tambi¨¦n aconseja la aplicaci¨®n de "una crema con centella asi¨¢tica para ayudar a cicatrizar la herida". Personalmente volv¨ª a sentirme normal de nuevo al a?o de dar a luz a mi primer hijo, aunque hay mujeres que lo consiguen mucho antes y otras que necesitan m¨¢s tiempo. Y al parecer no soy la ¨²nica a la que le llev¨® un a?o recuperarse. Seg¨²n un estudio realizado por la doctora Julie Wray de la Univerisdad de Salford, en Reino Unido, en el que entrevist¨® a mujeres de dos a tres semanas, tres meses y seis a siete meses de postparto, las seis semanas estipuladas para la recuperaci¨®n postnatal "son una total fantas¨ªa". Es m¨¢s, en base a los datos recogidos, Wray marc¨® como tiempo de recuperaci¨®n total exactamente 12 meses.Efectivamente, las contracciones con mi segundo beb¨¦ me duraron unos siete d¨ªas tras dar a luz. Esto es algo que no me sucedi¨® con mi primer hijo y que me cogi¨® fuera de juego en esta segunda ocasi¨®n. Mar¨ªa Fe Est¨¦banez matrona en el Centro de Educaci¨®n Materna Llevadonas cuenta que lo que me ha sucedido es de lo m¨¢s normal. Se trata de los famosos entuertos que no son m¨¢s que contracciones uterinas "necesarias para la involuci¨®n del ¨²tero y recuperaci¨®n del parto. Durante el postparto del primer hijo podemos percibir estos entuertos sin apenas notar molestia. En cambio, son m¨¢s perceptibles y dolorosos a medida que se tienen m¨¢s hijos". La matrona tambi¨¦n confirma otro de los goles que se ha marcado la naturaleza en mi segunda experiencia puerperal "cuando estamos dando el pecho, los entuertos son m¨¢s dolorosos porque la contractilidad es mayor". ?Y vamos si lo son! En cualquier caso los entuertos son algo "totalmente normal e inevitable ya que forman parte del proceso del parto. Para aliviar estos s¨ªntomas se puede tomar alg¨²n f¨¢rmaco analg¨¦sico", a?ade Est¨¦banez. No es lo ¨²nico que se recoloca: "todos los intestinos han de recolocarse tambi¨¦n", advierte la doctora Veciana, y aunque ¨¦sta recolocaci¨®n "es un proceso que ha de seguir su curso natural y que en principio no se nota", un cl¨¢sico efecto secundario es el estre?imiento, que llega en un momento muy poco oportuno: debido a la labor de pujas que se realiza en el parto, "se pueden aparecer hemorriodes o agravarse; tambi¨¦n se pueden producir lesiones en el perineo que requieren puntos de sutura", cuenta Marta Andreu Roig, fisioterapeuta especializada en uroginecolog¨ªa y obstetricia en Llevadonas. Para prevenir y mejorar los s¨ªntomas del estre?imiento durante el puerperio es recomendable seguir "una dieta alta en fibra (30g al d¨ªa) y una mayor ingesta de l¨ªquidos", tal y como se indica en una revisi¨®n cient¨ªfica publicada por Cochrane. Tambi¨¦n puede ayudar tomar bebidas calientes al despertarse por la ma?ana.Si una cosa tuve clara durante todo mi embarazo es que quer¨ªa dar el pecho a mi beb¨¦. Pocas im¨¢genes me parecen tan hermosas y empoderantes como la de una mujer amamantando a su hijo. Pues bien, en cuanto me pusieron a mi peque?o al pecho no me sent¨ª ni empoderada ni una diosa de la naturaleza. Todo lo contrario, sent¨ª una mezcla de frustraci¨®n, dolor ¡ªde los que tienes que morder un coj¨ªn a cada toma¡ª, fiebre durante la subida de la leche y las temidas grietas de postre. "Es una buena idea prepararse para este momento e informarse. Una buena manera puede ser a trav¨¦s de los cursos de preparaci¨®n al parto o los talleres de lactancia", explica Mar¨ªa Fe Est¨¦banez. La especialista resalta algo que he comprobado en primera persona y es que la lactancia materna puede ser maravillosa pero en sus inicios "hay que tener paciencia y perseverancia, y un gran apoyo familiar y profesional". En la web de la Iniciativa para la Humanizaci¨®n de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia, de UNICEF, hay un sinf¨ªn de recursos y un directorio de grupos de apoyo de todo el territorio nacional, un recurso fabuloso especialmente para primerizas.La segunda noche que pas¨¦ en el hospital como primeriza empec¨¦ a llorar como una magdalena. Estaba tan incre¨ªblemente vulnerable que al d¨ªa siguiente, ya en casa, un anuncio de pa?ales consigui¨® hundirme en la m¨¢s profunda miseria. Lo peor de todo era la verg¨¹enza que sent¨ª por estar tan triste as¨ª que ocult¨¦ todo lo que pude mi labilidad y sensaciones... ?No se supon¨ªa que ten¨ªa que estar por las nubes? "Se considera normal que la mujer, tras dar a luz experimente una serie de cambios a nivel f¨ªsico, hormonal y psicol¨®gico llamado maternity blues. No es un trastorno, sino un proceso que se ha de transitar y que si se cuenta con los recursos, apoyos y compa?¨ªa apropiados quedar¨¢ atr¨¢s en pocos d¨ªas", relata Jazm¨ªn Mirelman, psic¨®loga perinatal en el Instituto Europeo de Salud Mental Perinatal. La principal diferencia entre la tristeza postparto y la depresi¨®n postparto "tiene que ver con su persistencia a lo largo del tiempo", continua Mirelman. En el caso de la tristeza, la sufrimos entre un 50% y un 60% de las mujeres y la depresi¨®n entre un 10% y un 20%. Mirelman matiza que en ambos casos es algo infradiagnosticado y, especialmente en el caso de la depresi¨®n postparto, "existe a¨²n un porcentaje incierto de mujeres que transitan su maternidad con esta dificultad sin ning¨²n tipo de atenci¨®n psicol¨®gica ni psiqui¨¢trica". ?Por qu¨¦ es importante empezar a salir del armario de la tristeza? "Hablar de la tristeza durante la etapa que rodea el nacimiento es una necesidad urgente en el actual contexto social. Tiene que ver con la soledad de las mujeres y las familias, y los obst¨¢culos que se presentan a la hora de tener con qui¨¦n contar para poner palabras a sus incertidumbres como medio de prevenci¨®n antes de que aparezcan los s¨ªntomas", concluye la especialista. Para mi segundo beb¨¦ avis¨¦ a todo mi entorno de que me pod¨ªa volver a pasar, me prepar¨¦ un pack de bienvenida a m¨ª misma (ropa nueva c¨®moda, un pijama bonito, alg¨²n que otro cosm¨¦tico¡) y aunque le volv¨ª a ver las orejas al lobo el efecto liberador de haber hablado del tema sin tapujos, normalizar algo tan com¨²n, me ayud¨® a vencer a los nubarrones negros much¨ªsimo mejor.Es de lo m¨¢s normal que al final del embarazo, con la cabeza del beb¨¦ presionado la vejiga tenga que ir al ba?o cada dos por tres e, incluso, un estornudo m¨¢s potente de lo normal le juegue una mala pasada. De lo que no ten¨ªa ni la m¨¢s remota idea es que despu¨¦s de dar a luz, cuando se supone que la vejiga por fin est¨¢ libre de presi¨®n resulta que la incontinencia urinaria puede ser peor que nunca y pr¨¢cticamente incontrolable. "Un embarazo es un sobreesfuerzo para toda la musculatura del suelo p¨¦lvico. Si adem¨¢s pensamos en todo lo que sucede durante la labor de parto no nos tendr¨ªa que extra?ar que podamos padecer incontinencia urinaria, ya que son m¨²sculos que van a recibir una gran presi¨®n de la cabeza del beb¨¦ y sufrir¨¢n un sobreestiramiento importante del tejido", cuenta Marta Andreu Roig. Para las que hemos sufrido incontinencia (casi un 8% de mam¨¢s a los dos meses de dar a luz), lo ideal es que pasada la cuarentena acudamos a un fisioterapeuta especialista en suelo p¨¦lvico para que lo valore "junto con la zona abdominal, los diafragmas y la postura, para poder ayudar a solucionar cualquier otro problema que pudiera aparecer", dice Andreu y a?ade que "realizar ejercicios de suelo p¨¦lvico puede ayudar a reforzarlo y permite mejorar la situaci¨®n". Sin embargo ejercitar el suelo p¨¦lvico por s¨ª solo no siempre soluciona el problema. Hay que tener presentes otros aspectos, incluida la posibilidad de que estos no se realicen correctamente sin una orientaci¨®n adecuada.Durante el embarazo muchas mujeres experimentan un estado de belleza muy especial. Ese brillo m¨¢gico del que todo el mundo habla. En mi caso particular he de reconocer que el pelo me ascendi¨® a categor¨ªa pelazo. La doctora Veciana me cuenta que las responsables de tan dichoso suceso fueron "las hormonas, concretamente los estr¨®genos, ya que ayudan a mantener el cabello en fase de crecimiento". A los pocos d¨ªas de dar a luz el brillo desapareci¨® de la noche a la ma?ana y empec¨¦ a embozar el desag¨¹e de la ba?era cada vez que me duchaba. De hecho, ahora se me cae tanto el pelo que encuentro evidencias capilares en la ropita de mis beb¨¦s, en la sopa y en forma de bolas de pelo dentro de la lavadora. Para mejorar esta situaci¨®n poco se puede hacer, digamos que hay que pasarlo: "Actualmente hay poca evidencia que respalde alg¨²n tratamiento espec¨ªfico para trastornos endocrinos del cabello en mujeres postparto y posmenop¨¢usicas", explica un estudio realizado por el departamento de dermatolog¨ªa de la Universidad de Li¨¨ge, B¨¦lgica. Por suerte es algo que se soluciona por s¨ª solo a los tres meses del postparto o coincidiendo con el destete.Cuando el ginec¨®logo levanta la bandera verde para marcar el fin de la abstinencia pueden pasar dos cosas: o que tire cohetes de alegr¨ªa o que no tenga el horno para bollos. "Es algo bastante com¨²n que las mujeres manifiesten que al reactivar la vida sexual ¨¦sta no sea placentera y que pueda producir dolor". En la mayor¨ªa de casos estas molestias suelen estar producidas "por una falta de lubricaci¨®n, ocasionada por ejemplo por cambios hormonales durante el periodo de lactancia materna o a cicatrices de las episiotom¨ªas o de los desgarros", cuenta Marta Andreu. La especialista insiste en que aunque se trate de algo muy com¨²n "no lo deber¨ªamos de considerar normal, hay que ponerle remedio ¡ªvisitando a un especialista¡ª ya que mantener relaciones dolorosas lo ¨²nico que favorecer¨¢ es que no queden ganas de mantenerlas y que puedan aparecer otros problemas".Y no una de esas reglas ligeritas con las que todas so?amos que la suerte nos regale durante las vacaciones. Una regla bestia, abundante e incluso con co¨¢gulos de un tama?o considerable. "El sangrado postparto se conoce como loquios y suele durar unos 20 d¨ªas aproximadamente. Los loquios van disminuyendo progresivamente a medida que pasan los d¨ªas. Al principio es un sangrado abundante y, finalmente, se parece m¨¢s al final de una regla", relata Mar¨ªa Fe Est¨¦banez. Para esos primeros d¨ªas ¨¢rmese de un buen arsenal de compresas grandes y braguitas viejas o de poca calidad que no le importe tirar a la basura. Sobretodo no cometa el mismo error de novata que yo: en casa me esperaban ¨²nicamente peque?os protege slips y compresas light que yo jurar¨ªa que las escuch¨¦ re¨ªrse de m¨ª cuando en cuanto me vieron entrar al ba?o.No se lo voy a descafeinar. El postparto es horroroso, o por lo menos para muchas de nosotras lo es. Si se encuentra a las puertas de esta nueva etapa o est¨¢ en plena acci¨®n solo me queda decirle que pasar¨¢, le aseguro que pasar¨¢. Casi sin darse cuenta poco a poco todo volver¨¢ a equilibrarse, las grietas se curar¨¢n, el beb¨¦ se agarrar¨¢, los puntos caer¨¢n, el pip¨ª ya no se escapar¨¢, su beb¨¦ dormir¨¢, recuperar¨¢ la figura (o se enamorar¨¢ de su nuevo cuerpo) y conseguir¨¢ disfrutar del sexo igual o incluso mejor que antes. Todo pasa y esta fase no va a ser menos, ?¨¢nimo!