El espa?ol en el siglo digital
Debemos conseguir que el presente y el futuro se escriban y se programen en nuestra lengua
Fue hace 500 a?os cuando la expedici¨®n Magallanes-Elcano logr¨® una de las gestas m¨¢s notables de la Historia: la primera circunnavegaci¨®n de la Tierra. Una haza?a que inaugur¨® la aventura globalizadora de nuestras lenguas ib¨¦ricas. Hoy el espa?ol es la segunda lengua materna del mundo por n¨²mero de hablantes, m¨¢s de 21 millones de alumnos lo estudian como idioma extranjero y es la tercera lengua m¨¢s utilizada en Internet.
Pero errar¨ªamos el diagn¨®stico si ci?¨¦ramos esta situaci¨®n privilegiada a un asunto ling¨¹¨ªstico. Porque nuestra lengua com¨²n no ser¨ªa lo que es sin la cultura en espa?ol: la historia, el patrimonio, el arte, o la innovaci¨®n; y nuestros valores, que viajan en ese mismo tren transnacional: democracia, libertad, igualdad de oportunidades, o justicia son parte del ¨¢rbol geneal¨®gico de nuestra lengua y cultura, del que somos copart¨ªcipes con la comunidad hispanohablante, al tiempo que nos acerca a la raz¨®n de ser de la Uni¨®n Europea.
Es as¨ª como el espa?ol nos abre numerosas oportunidades m¨¢s all¨¢ de nuestras fronteras. De alg¨²n modo, la virtud de la lengua espa?ola ha sido contribuir a la eliminaci¨®n de aduanas en un tiempo en el que la globalizaci¨®n impone esa tendencia que enriquece a las naciones, disponi¨¦ndolas como emisoras y receptoras de talento, innovaci¨®n, y cultura global.
El car¨¢cter globalizador del espa?ol nos invita a detenernos en el valor cuantitativo y cualitativo de su posici¨®n en el mundo. Nuestro idioma y la cultura en espa?ol son una fortaleza para todos, porque hablamos en todo caso de valores cuantitativos y cualitativos que revierten sus beneficios en el conjunto de los hispanohablantes.
Es en este contexto en el que el Presidente del Gobierno present¨® el pasado 24 de enero el proyecto ¡°El espa?ol, lengua global¡±, para impulsar el valor del espa?ol e incrementar su capacidad de generar oportunidades. Una iniciativa que persigue reforzar la presencia internacional de nuestra lengua, aglutinar y coordinar las iniciativas institucionales existentes, e impulsar una movilizaci¨®n social transnacional de vocaci¨®n abierta e integradora.
Hemos dise?ado el proyecto sobre el concepto de ¡°cultura en espa?ol¡±, un t¨¦rmino que responde a una realidad constatable: con naturalidad, los espa?oles sentimos como algo propio las creaciones, el talento y los ¨¦xitos de los artistas de Iberoam¨¦rica y a su vez, la comunidad iberoamericana percibe los nuestros como algo de su propiedad.
En su desarrollo hemos tenido en cuenta el compromiso de este Gobierno con la econom¨ªa administrativa, es decir, el ahorro de costes innecesarios y duplicados en la Administraci¨®n. As¨ª, lo hemos incardinado dentro de un Alto Comisionado que ha funcionado admirablemente bien ¡ªel de la Marca Espa?a¡ª modificando su t¨ªtulo para incorporar en ¨¦l la ¡°promoci¨®n del espa?ol¡± y ampliando sus competencias.
Como tuve ocasi¨®n de explicar en mi reciente comparecencia ante Comisi¨®n de Cultura del Congreso, se trata de un proyecto transversal, aglutinador y apartidista, con vocaci¨®n de obra en permanente construcci¨®n. Nuestro prop¨®sito es prender la llama, mediante acciones concretas, de algo que reclama el concurso de todos los ciudadanos, instituciones y del conjunto de las naciones de Iberoam¨¦rica.
¡°El espa?ol, lengua global¡± emerge conscientemente en pleno siglo XXI, en un mundo redefinido por los cauces de lo digital, y nace inspirado en la actual tendencia hacia la universalizaci¨®n del conocimiento, que no es tanto generadora como aglutinadora.
Nuestro reto es el fomento del espa?ol como lenguaje digital. Para apuntalar la prosperidad derivada del constante incremento de hispanohablantes, debemos situar nuestra lengua en primera l¨ªnea en el ¨¢mbito de las tecnolog¨ªas del lenguaje y la inteligencia artificial. Es ahora, en el momento de gestaci¨®n de estas tecnolog¨ªas, cuando podemos asentarlo como protagonista de esa transformaci¨®n. Es ahora cuando debemos ense?ar a las m¨¢quinas a hablar espa?ol. Ser¨¢ una conquista trascendental para las generaciones venideras porque las crecientes audiencias de esas tecnolog¨ªas demandan cada vez m¨¢s que los soportes nazcan en espa?ol. Es ahora, en definitiva, cuando junto a la comunidad iberoamericana debemos conseguir que el presente y el futuro digital se escriban, se programen y se desarrollen en espa?ol.
??igo M¨¦ndez de Vigo y Montojo es ministro de Educaci¨®n, Cultura y Deporte y portavoz del Gobierno
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