Primeras im¨¢genes de Kate Middleton y el pr¨ªncipe Guillermo con su nuevo hijo

Poco antes de las seis de la tarde del lunes, apenas siete horas despu¨¦s de dar a luz, la duquesa de Cambridge abandonaba el hospital junto con su marido, el pr¨ªncipe Guillermo, llevando a su reci¨¦n nacido tercer hijo en brazos. Se abr¨ªan las puertas del ala Lindo del hospital londinense de St. Mary y la multitud congregada recib¨ªa con v¨ªtores al ni?o, envuelto en una mantita blanca, en brazos de su madre, Kate Middleton, que llevaba un vestido rojo que en algunas im¨¢genes dejaba notar que su cuerpo reflejaba su reciente maternidad.

La sonriente pareja se ha detenido unos minutos y ha posado para los medios. Despu¨¦s volv¨ªan a entrar al hospital para recoger la sillita de coche del ni?o y emprend¨ªan el camino a su residencia en el palacio de Kensington. Pocas horas antes el beb¨¦ hab¨ªa recibido la visita de sus dos hermanos, Jorge y Carlota, de cuatro y dos a?os, respectivamente. El reci¨¦n nacido, cuyo nombre se anunciar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas, ha pesado 3,8 kilos y es quinto en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono de Reino Unido.

Como es tradici¨®n, los forofos de la familia real brit¨¢nica han celebrado la llegada del nuevo beb¨¦ en las inmediaciones del hospital. Ah¨ª estaban Terry Hunt y John Loughrey, octogenarios que llevaban 15 d¨ªas acampados junto a la entrada, cubiertos de banderas de Union Jack, y anunciaban que celebrar¨ªan el nacimiento con una folcl¨®rica raci¨®n de fish and chips. Tambi¨¦n Nadia, londinense de 48 a?os, que luc¨ªa una camisera con las caras de los duques de Cambridge. "Me encanta la pareja, los he seguido desde su boda. Creo que Guillermo ha elegido una mujer tan adorable como su madre, yo adoraba a Diana. Son gente normal, con los pies en la tierra. Creo que ser¨¢ un gran rey", dec¨ªa.

Tony Appleton, autoproclamado pregonero real no oficial, entreten¨ªa a los congregados repitiendo, entre campanadas, el anuncio de la llegda del beb¨¦. No forma parte de la ceremonia oficial, pero su pintoresca presencia en los nacimientos de los tres hijos de los duques de Cambridge le ha ganado un lugar por derecho propio. Un muy brit¨¢nico taxi negro levantaba los aplausos de los congregados mientras se paseaba con la ventanilla abierta para dejar ver una figura de cera a tama?o real de la reina Isabel II en el interior. Y hasta una cadena de restaurantes mexicanos ofrec¨ªa a la multitud peque?os burritos conmemorativos.