Enrique de Inglaterrra, de pr¨ªncipe d¨ªscolo a pr¨ªncipe del pueblo

Enrique de Inglaterra se casa el s¨¢bado locamente enamorado. As¨ª define ¨¦l su estado desde que conoci¨® a Meghan Markle. "Me enamor¨¦ tan incre¨ªblemente r¨¢pido que comprend¨ª que las estrellas estaban alineadas", ha dicho sobre su prometida. El menor de los hijos de Carlos y Diana le pidi¨® matrimonio a Markle el pasado noviembre en el curso de "una noche t¨ªpica y est¨¢ndar" en su casa del palacio de Kensington (Londres), mientras preparaban un pollo asado. "Fue una sorpresa maravillosa", explic¨® Markle. "Fue dulce, natural y muy rom¨¢ntico", a?adi¨®. Andrew Morton, autor de un libro sobre la pareja y bi¨®grafo de Lady Di, ha dicho del pr¨ªncipe: "Est¨¢ tan obsesionado con Meghan como Eduardo con Wallis Simpson".

El hijo menor de Carlos y Diana, de 33 a?os, llega al matrimonio en un momento en el que su papel en la familia real brit¨¢nica est¨¢ consolidado y goza de una buena aceptaci¨®n p¨²blica. A esta posici¨®n ha ayudado la aparici¨®n de Meghan Markle. Atr¨¢s quedaron los tiempos en los que el pr¨ªncipe protagonizaba sonados esc¨¢ndalos, como cuando se disfraz¨® de militar nazi en una fiesta en 2005, cuando se pele¨® con un fot¨®grafo a la salida de un pub en 2004 o cuando se filtraron unas fotograf¨ªas del joven desnudo en una fiesta en Las Vegas en 2012.

Esta nueva imagen del nieto de Isabel II tiene que ver con sus reiteradas comparecencias en los medios para recordar a su madre con motivo del vig¨¦simo aniversario de su muerte. En estas apariciones Enrique se ha mostrado cercano y familiar contando el trauma que vivi¨® al quedarse hu¨¦rfano y c¨®mo la ausencia de Diana de Gales ha influido en su vida. Ahora el hijo menor de la princesa del pueblo dedica mucho de su tiempo a mantener en marcha las fundaciones que cre¨® su madre, tarea en la que seguir¨¢ trabajando con la ayuda de su futura esposa.

La llegada al mundo de los tres hijos de los duques de Cambridge ha alejado a Enrique de la posibilidad de un d¨ªa reinar, lo que le ha permitido relajarse, aunque su abuela se encarga de que su presencia representando a la Corona sea muy visible. Se cuenta que ¨¦l y Guillermo son los nietos favoritos de la soberana, y que ellos se atreven a decirle lo que nadie le cuenta. Por ellos, la estricta reina ha cedido en muchas de sus normas. La llegada a la familia de Meghan Markle es el mejor ejemplos: una actriz, divorciada y afroamericana.

En los ¨²ltimos meses Enrique de muchas cosas, tambi¨¦n de la monarqu¨ªa como instituci¨®n. Sexto en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono brit¨¢nico, hace unos meses habl¨® con la revista estadounidense Newsweek.?"Estamos involucrados en la modernizaci¨®n de la monarqu¨ªa brit¨¢nica. No hacemos esto por nosotros mismos, sino por el bien mayor de la gente. ?Hay alguien de la familia real que quiera ser rey o reina? No lo creo, pero cumpliremos con nuestros deberes en el momento adecuado".

En esta misma entrevista explic¨® que trata de llevar una vida normal dentro de su extraordinaria posici¨®n en el mundo. Vive en un apartamento de dos habitaciones y afirma que hace la compra por decisi¨®n propia, pero tambi¨¦n reconoce que es f¨¢cil burlarse de esta aspiraci¨®n cuando viaja en limusinas con las ventanas tintadas y puede usar sus contactos para conseguir lo que quiere. Ahora comparte estas tareas con su prometida, con quien convive desde el oto?o pasado.

Reconoce que admira el trabajo que ha realizado su abuela, Isabel II, durante su reinado y le dedica cari?osas palabras por su actitud hacia ¨¦l y su hermano Guillermo: "La reina es fant¨¢stica porque nos ha dejado escoger lo que queremos hacer dentro de la instituci¨®n y siempre insiste en que nos tomemos nuestro tiempo". Aunque admite que si ¨¦l fuera el heredero, cumplir¨ªa su papel "por deber", tambi¨¦n afirma que su hermano Guillermo?"modernizar¨¢ la monarqu¨ªa" y que ¨¦l quiere encontrar su propio camino en el campo ben¨¦fico pero que ni ¨¦l ni los duques de Cambridge ¡ªGuillermo y Kate¡ª?quieren ser vistos como "un grupo de celebridades". "Queremos utilizar nuestro tiempo sabiamente. No subir, estrechar la mano y no involucrarnos", explica.

Enrique de Inglaterra se despidi¨® hace cuatro a?os de las armas, tras diez de carrera militar, aunque sigue vinculado al ej¨¦rcito y en concreto a los veteranos. ?l sirvi¨® en Afganist¨¢n en dos ocasiones como copiloto de helic¨®ptero. Lleva a?os implicado en causas caritativas, como su ONG Sentebale, dedicada a los hu¨¦rfanos de Lesotho, u organizaciones por la conservaci¨®n de espacios naturales en ?frica. Pero su gran creaci¨®n fueron los Juegos Invictus?en 2014, una especie de Juegos Ol¨ªmpicos para veteranos de guerra, en los que precisamente se dej¨® fotografiar por primera vez con Meghan Markle.

Pese a que se han escrito muchas l¨ªnea sobre ¨¦l, todav¨ªa hay secretos que guarda como que durante los ¨²ltimos 10 a?os ha estado tocando con la banda The Killers en conciertos improvisados. As¨ª lo? desvel¨® Ronnie Vannucci Jr, el bater¨ªa de la banda liderada por Brandon Flowers y una de las m¨¢s aclamadas del rock actual. "Apareci¨® en un concierto una vez y nos entendimos muy bien. Supongo que han pasado unos 10 a?os. Ha habido muchas largas noches", cont¨® a The Sun sobre sus jam sessions con quien es el sexto en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono brit¨¢nico.

Apuesto desde sus 1,86 metros de altura, es simp¨¢tico en las distancias cortas y a menudo dispuesto a romper el protocolo para hacerse un selfie. Ha confesado que necesit¨® ayuda de psic¨®logos para superar la muerte de su madre y que hasta hace muy poco no pod¨ªa hablar de ella. La casa real, muy curtida tras los esc¨¢ndalos del Dianagate, est¨¢ dispuesta a rentabilizar ese despliegue de encanto y de relaciones p¨²blicas tan parecido al de su madre para apuntalar su papel, el de pr¨ªncipe del pueblo.