Derrota

Todos los antiseparatistas (nada de ¡°unionistas¡±, no queremos que se una lo separado sino que no se separe lo unido) estamos en deuda con Quim Torra: es el adversario ideal, porque expresa su ideolog¨ªa de manera tan obscena que escandaliza hasta a quienes la comparten. Y adem¨¢s revela crudamente lo que subyace tras las f¨®rmulas m¨¢s sofisticadas y bonachonas con que suele envolverse el retortij¨®n separatista. Con la misma nitidez y burricie se expres¨® en su d¨ªa Sabino Arana, por lo que hoy sus hijos pol¨ªticos veneran su nombre pero no se atreven a citarle jam¨¢s. A veces le disculpan diciendo que eran ¡°ideas de aquella ¨¦poca¡±, como si todos sus contempor¨¢neos hubieran pensado igual o como si hoy todos debi¨¦semos compartir la caca mental de nuestro coet¨¢neo Torra. Conviene recordar que las razones del separatismo se maquillan pero no mejoran. Y que siempre fueron y son profundamente reaccionarias, sea que perviertan traidoramente las instituciones democr¨¢ticas como en Catalu?a o que traten de convertir la en¨¦sima carlistada en guerrilla de liberaci¨®n, como ETA.

Ahora algunos vocean la derrota de ETA militar, que es cierta, tratando de disimular que ETA pol¨ªtica sigue vivita y coleando, benefici¨¢ndose de un trato de favor de las instituciones democr¨¢ticas y aprovechando las conquistas ensangrentadas obtenidas en el espacio c¨ªvico, el lenguaje pol¨ªtico y la propaganda. No, no era el ¨²nico final posible ni el mejor imaginable. Antes de unirse al coro triunfalista, lean el demoledor documento La derrota del vencedor, de Rogelio Alonso. Y est¨¦n atentos al nuevo estatuto vasco que preparan los nacionalistas (con sus efectos colaterales en Navarra): ah¨ª podremos leer cu¨¢nto debemos pagar a¨²n por la ¡°victoria¡± que ya tanto nos ha costado. Bien pensado, quiz¨¢ salga m¨¢s barato luchar un poco m¨¢s hasta vencer mejor¡­