Peligro de esclavitud en Espa?a
La justicia debe investigar a fondo la denuncia por trata y delitos de lesa humanidad de las temporeras marroqu¨ªes en Huelva
Editoriales anteriores
Diez mujeres marroqu¨ªes han llegado hasta la Audiencia Nacional para denunciar las condiciones de explotaci¨®n, esclavizaci¨®n y acoso sexual que, conforme a sus declaraciones, han sufrido en una finca de Huelva a la que acudieron a trabajar en abril como temporeras de la fresa. Los testimonios que aportan constituyen un espeluznante relato de lo que llaman ¡°cosificaci¨®n¡± de decenas de empleadas contratadas en origen a las que, una vez en el lugar de trabajo, se las confin¨® en barracones met¨¢licos sin agua, se les neg¨® acceso a tratamiento m¨¦dico cuando lo necesitaron y se les mengu¨® o escatim¨® el salario hasta provocar situaciones de hambre o mendicidad. Algunas de ellas denuncian tambi¨¦n acoso sexual, agresi¨®n y presi¨®n para ejercer la prostituci¨®n con hombres que se acercaban a la finca.
El relato de los hechos, que consideran constitutivos de delitos de ¡°trata de seres humanos en concurso con delitos de lesa humanidad¡±, se agrava adem¨¢s por la ristra de dificultades que ha jalonado sus denuncias ante la Guardia Civil o juzgados de instrucci¨®n o el intento de devolverlas en contra de su voluntad a Marruecos, del que algunas escaparon. El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha abierto sumario y ha solicitado a la Fiscal¨ªa su criterio sobre la competencia de este tribunal ante los hechos al considerar que pueden ser delictivos.
La Fiscal¨ªa y la Audiencia deben aclarar la cuesti¨®n de competencia pero, corresponda a quien corresponda, las instituciones judiciales deben aclarar con la mayor diligencia la verdad sobre unos hechos que no puede albergar la Espa?a de 2018. Cerca de 17.000 marroqu¨ªes, normalmente madres con hijos a su cargo que no hablan espa?ol y de escasa formaci¨®n, se convierten cada a?o en temporeras en Huelva. Los tribunales espa?oles deben demostrar que son capaces de salvaguardar su integridad en caso de abuso y de perseguir a los supuestos responsables sin demora.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.