Guardar las lentillas en agua con sal y otros 12 errores que cometemos habitualmente con ellas
Pueden hacer que veamos peor y derivar en problemas como infecciones en los ojos
En el mundo hay 153 millones de personas con discapacidad visual debido a errores de refracci¨®n no corregidos: miop¨ªa, hipermetrop¨ªa y astigmatismo, seg¨²n los datos de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). Para el a?o 2050, seg¨²n un estudio de la Universidad de Nueva Gales del Sur (Sidney) ser¨¢n 4.758 millones de personas con miop¨ªa, casi el 50% de la poblaci¨®n mundial.
Para paliar la p¨¦rdida de visi¨®n que supone, cada vez son m¨¢s quienes optan por las lentes de contacto. Una soluci¨®n indicada por oftalm¨®logos y optometristas, siempre y cuando se sigan las recomendaciones de uso. De lo contrario pueden acarrear problemas como ojos secos y, en casos m¨¢s graves, queratitis infecciosa. Estos son los errores m¨¢s frecuentes de los usuarios de lentes de contacto, que m¨¢s le vale evitar:
Es una costumbre habitual cuando las personas que usan lentillas se quedan sin soluci¨®n ¨²nica. El problema est¨¢ en que el agua de grifo puede aumentar el riesgo de infecciones, indica Mar Gonz¨¢lez Manrique, jefa del Servicio de Oftalmolog¨ªa del Hospital Universitario de M¨®stoles, que explica que aunque el agua con sal "permite conservar las lentes, no las desinfecta".
En caso de ser inevitable, la especialista recomienda disolver una cucharada de sal en un litro de agua previamente hervida y enfriada o usar suero fisiol¨®gico y buscar la soluci¨®n adecuada en el menor tiempo posible. Cuanto m¨¢s sal se ponga en el agua, m¨¢s da?o podemos hacer a los ojos y el agua de grifo puede llegar a causar queratitis ¡ªinflamaci¨®n de la c¨®rnea¡ª, seg¨²n un estudio publicado en la revista americana Eye & Contact Lens.
"La duraci¨®n de cada modelo de lente est¨¢ calculada para evitar riesgos oculares y garantizar una visi¨®n adecuada. El fabricante calcula estos tiempos para que la lente no pierda sus propiedades, sobre todo la de aportar el ox¨ªgeno adecuado al ojo. Sobrepasar los tiempos recomendados no es correcto", afirma Gonz¨¢lez Manrique.
No cumplir con los tiempos indicados e intentar que las lentillas nos duren m¨¢s "aumenta la incomodidad y la sensaci¨®n de ojo seco. Es causa de problemas para la superficie ocular a medio y largo plazo", aclara C¨¦sar Villa Collar, catedr¨¢tico de Optometr¨ªa de la Universidad Europea (Madrid) y coordinador de la vocal¨ªa de lentes de contacto del Consejo General de Colegios de ?pticos-Optometristas. A¨²n as¨ª, seg¨²n la Asociaci¨®n Americana de Optometristas, el 57% de los usuarios de lentes, lo hacen.
Aunque seg¨²n la especialista del Hospital de M¨®stoles, tendemos a manipular lo menos posible la lente de contacto, sin embargo "en ocasiones se recomienda una leve limpieza mec¨¢nica de la superficie de la lente, es decir, frotarlas entre los dedos, para eliminar posibles dep¨®sitos, sobre todo los grasos". Raquel Aranda Benito, del Servicio de Oftalmolog¨ªa del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja, tambi¨¦n se refiere a dep¨®sitos proteicos y ciertos microorganismos. Y un estudio realizado por el Hospital Militar V¨¢zquez Bernab¨¦u de Valencia recuerda que la falta de higiene puede suponer queratitis por Acanthamoebas y provocar necrosis corneal severa.
La raz¨®n para tirarlas es sencilla: la lente de contacto puede contener microorganismos de la conjuntivitis adheridos. De manera que si se vuelven a usar es muy probable volver a contagiarse. En las no desechables, "deben ser desinfectadas con soluciones profesionales. No sirven las que se usan diariamente", comenta Villa Collar. "En algunas infecciones el oftalm¨®logo puede incluso indicar un cultivo de la lente para determinar con exactitud de qu¨¦ pat¨®geno se trata", a?ade Gonz¨¢lez Manrique.
La soluci¨®n pierde sus propiedades desinfectantes y esto puede llegar a ser peligroso para el ojo. Adem¨¢s, matiza Aranda Benito, "el l¨ªquido acumulado ayuda al desarrollo de ciertos microorganismos que ensucien las lentillas sucias y aumente el riesgo de tener infecci¨®n ocular con su uso".
!A pesar de que limpiemos muy bien el porta-lentes cada vez que cambiamos el l¨ªquido de las lentillas, no es suficiente para eliminar toda la suciedad que queda impregnada en este", aclara Aranda Benito: . Por eso, es conveniente emplear uno nuevo con cada par de lentillas nuevas para evitar el riesgo de infecci¨®n de que microorganismos pat¨®genos, como las pseudomonas aeruginosa, que compromete la cornea y bloquea el mecanismo de defensa del ojo, se acumulen en el estuche.
Seg¨²n los datos de la Asociaci¨®n Americana de Optometristas, el 29,8% de los adolescentes, el 33,3% de los adultos j¨®venes y el 32,9% de los adultos que usan lentillas reconocen dormir tanto la siesta como por la noche con ellas puestas. Lo peor es que seis de cada siete saben que esta pr¨¢ctica es perjudicial para la salud. "Es un error muy grave porque supone un factor de riesgo para el desarrollo de queratitis o inflamaci¨®n corneal. En general, los oftalm¨®logos no somos partidarios del uso durante el sue?o, ni siquiera de las que est¨¢n aceptadas para ello", comenta la oftalm¨®loga del Hospital Universitario de M¨®stoles.
Las l¨¢grimas artificiales son colirios cuya composici¨®n trata de imitar la l¨¢grima natural y ayudan a evitar la sequedad ocular que pueden generar las lentillas. Los esfuerzos visuales de larga duraci¨®n con pantallas implican mayor sequedad por la reducci¨®n del parpadeo asociada. "En estos casos usar l¨¢grimas artificiales es muy conveniente, siempre de marcas que aseguren que no deterioran ni generan dep¨®sitos en las lentes", aconseja Gonz¨¢lez Manrique.
Los l¨ªpidos (grasas) y las prote¨ªnas se adhieren a las lentillas f¨¢cilmente, lo que genera gran cantidad de dep¨®sitos. Si el usuario tiene los ojos especialmente grasos, no es suficiente con la limpieza diaria y es necesario "tomar medidas m¨¢s eficientes como las pastillas desproteinizadoras", afirma Aranda Benito. Las consecuencias no hacerlo pueden pasar por padecer "conjuntivitis al¨¦rgicas y ojo rojo con las horas de uso", a?ade el coordinador de la vocal¨ªa de lentes de contacto del Consejo General de Colegios de ?pticos-Optometristas.
Desmaquillarse antes de quitarse la lentilla es un error, explican los expertos. Primero hay que retirar la lente y luego el maquillaje. Una de las razones es que los desmaquillantes tienen un impacto sobre la lente. Adem¨¢s, sin ella puesta es m¨¢s f¨¢cil hacer la limpieza con profundidad que el ojo requiere. Del mismo modo, siempre hay que ponerse las lentillas antes de maquillarse, aseguran los especialistas.
"El contacto con agua de las lentes de contacto est¨¢ rigurosamente prohibido, por el elevado riesgo de infecciones graves (sobre todo las producidas por amebas). En ni?os y j¨®venes debe prohibirse del todo. Los adultos con elevadas graduaciones podr¨ªan ba?arse con una gafa de nataci¨®n bien ajustada que evite la entrada de agua por completo. Y si les entra agua, esa lente debe desecharse. Esta norma debe aplicarse tambi¨¦n a la ducha, que debe hacerse siempre sin lentillas", sentencia Gonz¨¢lez Manrique.
Lo ideal es dejar que pase un tiempo: ducharse, vestirse, desayunar y, despu¨¦s, ponerse las lentillas. La raz¨®n es que "durante el sue?o nocturno se produce un peque?o edema de la c¨®rnea que es fisiol¨®gico y hasta los primeros parpadeos no alcanza las condiciones basales normales", dice Gonz¨¢lez Manrique. En caso de no poder esperar, el vocal del Consejo General de Colegios de ?pticos-Optometristas es lavar los ojos con suero fisiol¨®gico antes de colocar las lentes.