28 fotosLos 33 d¨ªas del papa Juan Pablo IEl 26 de agosto se cumpli¨® el 40? aniversario del inicio de uno de los papados m¨¢s cortos de la historiaAnabel Serrano26 ago 2018 - 15:28CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlace1978, el a?o de los tres papas. Pablo VI mor¨ªa con 81 a?os el 6 de agosto durante sus vacaciones en Castelgandolfo, tras 15 de papado. Su sucesor, Juan Pablo I, lo hac¨ªa tras s¨®lo 33 d¨ªas al frente de la Iglesia, dando paso a Juan Pablo II, que la dirigir¨ªa durante 26 a?os. En la imagen, el 25 de agosto de 1978, los 112 cardenales (por primera vez todos los pa¨ªses del mundo estaban representados) asisten a la misa 'Pro eligendo pontificem' antes de ser encerrados bajo llave en el c¨®nclave. Pablo VI decret¨® antes morir que los cardenales estuvieran solos durante su encierro. Hasta entonces pod¨ªan llevar dos o tres acompa?antes si alegaban problemas de salud.Fran?ois Lochon (Getty Images)Un hombre lee en un peri¨®dico la lista de los papables en las escaleras de la bas¨ªlica de San Pedro, el 26 de agosto de 1978, mientras se producen las primeras votaciones del s¨¦ptimo c¨®nclave del siglo XX. El diario 'La Repubblica' hab¨ªa publicado unos d¨ªas antes un documento secreto del Ministerio de Exteriores italiano sobre los favoritos de la curia romana: los cardenales Bertoli, Bagio y Benelli. Pocos apostaban por Albino Luciani, aunque s¨ª por un Papa que siguiera con las reformas del Concilio Vaticano II sin volver atr¨¢s. Se esperaba un largo debate pero apenas dur¨® un d¨ªa.Francois Lochon (Getty Images)La plaza de San Pedro llena de gente que espera, el 26 de agosto de 1978, la se?al de que los cardenales han llegado a un acuerdo. Cada dos votaciones (una sesi¨®n de escrutinio) las papeletas y las notas se queman en una estufa cuya chimenea da al tejado de la Capilla Sixtina. Si no ha habido acuerdo los papeles arden junto a paja h¨²meda, que produce humo negro. Si hay acuerdo, y el elegido acepta, las papeletas se queman junto a paja seca, que da humo blanco.Francois LOCHON (Getty Images)Pocos meses antes, en mayo, Italia hab¨ªa vivido uno de sus episodios m¨¢s tristes de su historia reciente, el secuestro y posterior asesinato por los terroristas de las Brigadas Rojas de Aldo Moro, presidente democristiano y quien fuera primer ministro italiano en dos ocasiones.Fran?ois Lochon (Getty Images)Un sacerdote escucha en la radio, en la plaza de San Pedro, la elecci¨®n de Albino Luciani, el 26 de agosto de 1978. Los dos pontificados anteriores, el de Juan XXIII y Pablo VI, hab¨ªan sido de cambio y renovaci¨®n en la Iglesia debido al Concilio Vaticano II.La Iglesia se encontraba en medio de disensiones entre los sectores m¨¢s conservadores que quer¨ªan menos cambios y los m¨¢s progresistas a quienes eso les sab¨ªa a poco.Fran?ois Lochon (Getty Images)Fumata blanca. El humo blanco sale de la chimenea de la Capilla Sixtina a las 19.20 del 26 de agosto de 1978, indicando que hay nuevo Papa. Las dos primeras fumatas hab¨ªan sido negras. La segunda, blanca a ratos debido a un fallo t¨¦cnico, caus¨® confusi¨®n a nivel de mundial a pesar de contar con la ayuda de productos qu¨ªmicos y de la larga trayectoria de la Iglesia en este tipo de eventos. La tercera, la definitiva (seg¨²n Radio Vaticana, gris clara, blanca sucia, casi blanca), fue una de las m¨¢s largas y se elev¨® al cielo durante 56 minutos. De haber existido Twitter entonces m¨¢s que arder se hubiera ahumado.AP¡®Habemus Papam'. Juan Pablo I, el papa de la sonrisa, bendice a la multitud que lo aclama en la plaza de San Pedro del Vaticano, el 26 de agosto de 1978. Fue el primer papa en elegir un nombre compuesto, honrando as¨ª a sus dos predecesores, Juan XXIII y Pablo VI. Cada papa puede escoger el nombre que desee, elecci¨®n que se interpreta como una especie de programa de su pontificado. Desde hac¨ªa dos siglos los papas hab¨ªan escogido s¨®lo ocho nombres: Benedicto, Clemente, Gregorio, Inocencio, Le¨®n, P¨ªo, Juan y Pablo. Se dice que es el mayor secreto que cada cardenal lleva en su pecho cuando entra en el c¨®nclave y la primera tentaci¨®n de vanidad cuando se entera de la muerte del papa.Getty ImagesEl Papa n¨²mero 263? de la Iglesia cat¨®lica sale al balc¨®n de la plaza de Vaticano en su primera aparici¨®n p¨²blica, una hora despu¨¦s de su elecci¨®n, el 26 de agosto de 1978. Antes de dar la bendici¨®n ¡®urbi et orbi¡¯ (a la ciudad de Roma y al mundo entero) cant¨® en lat¨ªn, demostrando lo que sus feligreses ya sab¨ªan, que Juan Pablo I cantaba muy bien. Tuvo que salir una segunda ocasi¨®n ante los aplausos de los 300.000 fieles que llenaban la plaza. Despu¨¦s, por decisi¨®n suya, se encerr¨® con los 111 cardenales (de los que 81 hab¨ªan votado a su favor) hasta el d¨ªa siguiente.Fran?ois Lochon (Getty Images)El cardenal Felici coloca uno de los broches met¨¢licos que recuerdan los clavos de Cristo en el palio papal (una especie de cinta alredor del cuello) a Juan Pablo I el 3 de septiembre de 1978. El papa Luciani quiso una ceremonia simple y renunci¨® al rito de coronaci¨®n, lo que plante¨® un problema de denominaci¨®n a los liturgistas que r¨¢pidamente encontraron un nombre: fiesta de la inauguraci¨®n del pontificado. Fue el primero en inaugurar su pontificado sin utilizar los s¨ªmbolos del poder papal, la tiara (la triple corona carga de joyas que simboliza a la Iglesia triunfal, el poder espiritual y el poder temporal de los papas) o la silla gestatoria. Un gesto de humildad que recibi¨® el aplauso mundial. El Papa, que quer¨ªa ser el de los pobres, hab¨ªa empezado con buen pie.Keystone (Getty Images)Vista de la plaza de San Pedro el 3 de septiembre de 1978, en la solemne ceremonia de inauguraci¨®n del papado celebrada por ¨²ltima vez al atardecer como era costumbre. A partir de Juan Pablo II tendr¨ªa lugar por la ma?ana. El mayor problema de la inauguraci¨®n lo plante¨® la presencia del dictador argentino, el general Jorge Rafael Videla, que provoc¨® graves incidentes en las calles de Roma. Durante la ceremonia, transmitida por televisi¨®n en color, el mundo entero pudo leer ¡°Videla verdugo¡± en un cartel izado por 25 globos de colores.Fran?ois Lochon (Getty Images)Albino Luciani (con una cruz en la imagen) junto a otros seminaristas. Nacido en Forno de Canale, entre Venecia y la frontera austriaca, el 17 de octubre de 1912, se convert¨ªa en el primer papa en nacer en el siglo XX y el ¨²ltimo en morir en el siglo pasado. Su padre era un alba?il socialista, emigrante durante a?os en Suiza y que su vuelta trabaj¨® como artesano del vidrio en Murano, que respetar¨ªa la decisi¨®n de su hijo de ser sacerdote. El futuro papa estudi¨® teolog¨ªa en la Universidad Gregoriana de Roma y fue uno de los primeros obispos nombrados por Juan XXIII en 1958. Desde 1969 era patriarca de Venecia, donde lleg¨® con la fama de ser el pastor de los pobres y disolvi¨® las organizaciones m¨¢s progresistas, como la Federaci¨®n Universitaria de Cat¨®licos Italianos, porque se hab¨ªan negado a hacer la campa?a contra el divorcio. En los centros industriales de Mestre, cerca de Venecia, combati¨® a los sacerdotes obreros.Fran?ois Lochon (Getty Images)Albino Luciani, en el centro con un libro abierto, en 1932 en el Seminario Gregoriano de Belluno. Dec¨ªa de s¨ª mismo: ¡°Soy s¨®lo un pobre hombre acostumbrado a realizar cosas peque?as y en silencio¡±. En 1973 fue nombrado cardenal por Pablo VI.Eric Vandeville (Getty Images)Albino Luciani, en su etapa de patriarca de Venecia. Cuando tom¨® posesi¨®n del este cargo, dijo: ¡°Vengo sin dinero y as¨ª deseo marcharme¡±. Vendi¨® el anillo de oro que le hab¨ªa regalado Juan XXIII y autoriz¨® a los p¨¢rrocos a que vendieran joyas de sus parroquias.David Lees (Getty Images)El papa Pablo VI saluda al p¨²blico congregado en la plaza de San Marcos en Venecia, en presencia de su gran amigo y sucesor el cardenal Albino Luciani, en una visita a la ciudad en 1972. Otros dos papas del siglo XX, P¨ªo X y Juan XXIII, hab¨ªan sido tambi¨¦n patriarcas de Venecia.Gianni Giansanti (Getty Images)Juan Pablo I recibe el juramento de fidelidad del cardenal polaco Karol Wojtyla, quien ser¨ªa su sucesor tras ser elegido por el c¨®nclave el 16 de octubre, el primero no italiano desde 1523, tomando el nombre de Juan Pablo II.ReutersJuan Pablo I fue un ac¨¦rrimo defensor del Opus Dei. Gran amante de la literatura y buen conversador que se ganaba a todo el mundo con su simpat¨ªa, bondad y sencillez. Su elecci¨®n fue fruto de un compromiso entre conservadores, moderados y progresistas. Gustaba a quienes no quer¨ªan un papa diplom¨¢tico, ni un hombre de la Curia o a uno demasiado amigo de la izquierda, pero procedente ¨¦l mismo de la clase obrera. Humaniz¨® el papado dejando de ser el "nos" propio de los papas y hablar en primera personal del singular.Fran?ois Lochon (Getty Images)Unas mujeres leen, en septiembre de 1978, carteles en los muros del Vaticano en los que se da la bienvenida a la elecci¨®n de Juan Pablo I.Fran?ois Lochon (Getty Images)Juan Pablo I en el encuentro con los periodistas un d¨ªa despu¨¦s de su elecci¨®n en el que ley¨® su discurso program¨¢tico. La elaboraci¨®n de este mensaje, muy elaborado y lleno de citas, se realiz¨® de manera colegiada durante el c¨®nclave, abriendo el camino de la participaci¨®n de los obispos en la Iglesia, una exigencia de los m¨¢s progresistas. Una muestra de que el Papa, aunque conservador, iba a ser menos tradicional de lo esperado.Fran?ois Lochon (Getty Images)El Papa es conducido por los sedarios poniificios en la llamada silla gestatoria en su toma de posesi¨®n como obispo de Roma en la archibas¨ªlica de San Juan de Letr¨¢n, catedral de la di¨®cesis romana el 3 de septiembre. Juan Pablo I, a quien convencieron de utilizarla para poder ser visto por la multitud tras haber renunciado a su uso en la inauguraci¨®n de su papado, fue el ¨²ltimo en ser llevado a hombros en este trono ceremonial, que ser¨ªa sustituido por el papam¨®vil.Getty Images33 d¨ªas despu¨¦s de su elecci¨®n Juan Pablo I aparec¨ªa muerto al amanecer del 29 de septiembre de 1978. Seg¨²n las fuentes oficiales muri¨® de un infarto de miocardio y fue encontrado por su secretario privado John Magge (al menos sobre lo segundo, el Vaticano no dijo la verdad, fue una monja quien encontr¨® el cad¨¢ver). El anuncio de la Santa Sede de que no se le practicar¨ªa una autopsia y las contradicciones en la versi¨®n oficial abr¨ªan la puerta a todo tipo de teor¨ªas, incluyendo, como no pod¨ªa ser de otra manera, la del asesinato. El cuerpo fue colocado el 30 de septiembre en la sala Clementina del palacio Apost¨®lico, donde m¨¢s de 100.000 personas le rindieron homenaje tras pasar horas haciendo cola.Fran?ois Lochon (Getty Images)Los restos de Juan Pablo I fueron trasladados desde la sala Clementina hasta la bas¨ªlica de San Pedro, el 30 de septiembre de 1978, acompa?ado por unas 60.000 personas. Un cortejo f¨²nebre de guardias suizos, obispos, cardenales, la coral de la Capilla Sixtina, miembros de la prefectura vaticana, familiares y autoridades acompa?aban al catafalco, transportado por 12 sedarios. Su cad¨¢ver permaneci¨® expuesto ante el altar de la Resurrecci¨®n en la bas¨ªlica hasta el 4 de octubre, cuando se celebr¨® el funeral.Getty ImagesCola de fieles para visitar la capilla ardiente en la bas¨ªlica de San Pedro. Una de las prioridades del Papa en su corto mandato habr¨ªa sido investigar el estado de las cuentas vaticanas. Luciani ya se hab¨ªa enfrentado con el arzobispo norteamericano Paul Marcinkus, el todopoderoso responsable de las finanzas vaticanas, por la venta de la Banca Cattolica del Veneto, al Banco Ambrosiano (controlado por la mafia y cuyo derrumbe fue un esc¨¢ndalo financiero), propiedad de Roberto Calvi, el banquero de Dios (que aparecer¨ªa ahorcado bajo un puente en Londres en 1982).Fran?ois Lochon (Getty Images)El cuerpo del Papa en la bas¨ªlica de San Pedro el 30 de septiembre de 1978. Las sospechas sobre la muerte no natural de Juan Pablo I fueron investigadas por David A. Yallop en su libro ¡°En nombre de Dios¡±, en el que sostiene la tesis del envenenamiento. En el libro, un cardenal del que no da el nombre (en realidad, un amigo personal del Papa, Gianni Gennari), desvelaba detalles diferentes a los de la versi¨®n oficial.Fran?ois Lochon (Getty Images)Seg¨²n Gennari, el Papa habr¨ªa muerto por la ingesti¨®n de una fort¨ªsima dosis de un vasodilatador recetado por tel¨¦fono por su m¨¦dico personal de Venecia. La noche de su muerte, del 28 al 29 de septiembre de 1978, Juan Pablo I estaba muy agitado por una dura discusi¨®n mantenida con el cardenal franc¨¦s Villot, secretario de Estado, sobre los cambios que iba a introducir en la Curia y rodearse de personal de su confianza. Por la ma?ana, una monja, Vicenza Taffarel (no su secretario como se dijo) lo encontr¨® muerto. Esta monja dio dos versiones, la primera que lo que encontr¨® en el ba?o, vestido, la segunda que lo encontr¨® sentado en la cama (ante su escritorio, seg¨²n la familia), reclinado sobre el costado derecho y con un papel en la mano con los cambios que iba a hacer (seg¨²n el Vaticano con el ¡°Kempis¡±, un libro sobre la espiritualidad). Sobre la mesita de noche, el vaso con el que bebi¨® el medicamento. Seg¨²n la autopsia, una dosis fort¨ªsima, que le provoc¨® un infarto fulminante.Mondadori Portfolio (Getty Images)Nueve a?os despu¨¦s de su muerte, Diego Lorenzo, exsecretario particular del Papa, sorprendi¨® a todos revelando en un encendido debate con Yallop en la televisi¨®n italiana que Juan Pablo I hab¨ªa tenido dos d¨ªas antes de su muerte un fuerte dolor en el pecho que podr¨ªan presagiar un infarto. Tambi¨¦n confirm¨® que al Papa se le hab¨ªa hecho la autopsia (lo que el Vaticano hab¨ªa negado).Mondadori Portfolio (Getty Images)Unas 50.000 personas asistieron bajo la lluvia a los funerales por el Papa en la plaza de San Pedro el 4 de octubre de 1978, cinco d¨ªas de su muerte, cuyos restos reposaban en un sencillo ata¨²d de cipr¨¦s, adornado con una sencilla cruz de ¨¦bano. Ante el temor de posibles ataques terroristas, la Secretar¨ªa de Estado vaticana pidi¨® que no asistieran jefe de Estado y de Gobierno. 93 cardenales concelebraron el funeral.Fran?ois Lochon (Getty Images)Un sacerdote suelta una paloma en la iglesia de Saint Leonard en Boston (Estados Unidos) en homenaje al Papa, el 4 de octubre de 1978, el d¨ªa siguiente del funeral en el Vaticano. Su muerte, tras apenas un mes de papado, conmovi¨® a al mundo entero y supuso un jarro de agua fr¨ªa al optimismo que la elecci¨®n de Luciani hab¨ªa significado.Getty ImagesLos cardenales participantes en el nuevo c¨®nclave entran en la Capilla Sixtina el 14 de octubre de 1978 para elegir al siguiente Pont¨ªfice. Tras dos d¨ªas de deliberaciones, de aqu¨ª saldr¨ªa el nombre del polaco Karol J¨®zef Wojtyla. De 58 a?os, el m¨¢s joven del siglo XX, y con fama de deportista, tal vez los cardenales quisieron asegurarse un Papa con un mejor estado de salud. El papado de Juan Pablo II, casi 27 a?os, fue el tercero m¨¢s largo de la Iglesia cat¨®lica.EFE