El adi¨®s sin billete de vuelta de Pau Don¨¦s
Despu¨¦s de tres a?os con un c¨¢ncer de colon, el cantante, de 52 a?os, se despide de los escenarios para dedicarse a su hija
¡°El 1 de enero paro. Y me voy. Lejos¡±. As¨ª de rotundo se muestra un relajado Pau Don¨¦s que ha decidido poner punto y aparte a 20 a?os de carrera. ¡°Me toca, me lo merezco. Llevo 20 a?os a tope y necesito hacer un cambio¡±, reflexiona con EL PA?S el l¨ªder de Jarabe de Palo, de 52 a?os, que celebra el 20 aniversario de la creaci¨®n del grupo. Asegura que este agotamiento no tiene nada que ver con el c¨¢ncer de colon que los m¨¦dicos le detectaron en 2015 y que, despu¨¦s de varias operaciones, el a?o pasado volvi¨® a resurgir. ¡°No es por el c¨¢ncer. El primer concierto de la gira del a?o pasado lo hice con la bomba de infusi¨®n puesta y no import¨®. El c¨¢ncer me hizo parar, sobre todo por las secuelas de las operaciones, pero esta decisi¨®n la ten¨ªa tomada desde hace tiempo¡±.
Entre sorbo y sorbo a su taza de infusi¨®n, que en otros tiempos habr¨ªa sido una cerveza, cuenta que esta despedida formaba parte de un plan. ¡°Cuando celebramos los 50 palos ya sab¨ªa que vendr¨ªa esto. Mi idea era ir a tope hasta los 50 y luego levantar el pie del acelerador¡±, dice sobre el especial con el que en 2016 conmemor¨® su medio siglo y haber superado la primera etapa de su c¨¢ncer. Se ha pasado dos a?os de frenada, pero est¨¢ m¨¢s seguro que nunca. En su discurso no hay un resquicio de l¨¢stima por dejar a un lado lo que ha sido su vida durante tantos a?os. Tal vez, dice, porque siempre lo ha vivido con mucha intensidad. ¡°El mundo de la m¨²sica nos hace muy dependientes porque est¨¢s 24 horas conectado, viajando para los conciertos, escribiendo canciones, grabando, o simplemente porque vas a cenar y alguien te recuerda que eres popular¡±. O quiz¨¢ porque en el fondo no se va del todo. ¡°En un a?o me estar¨¦ subiendo por las paredes, pero tengo que aguantar m¨¢s¡±, admite el cantante, que seguir¨¢ creando m¨²sica desde su refugio.
Aunque todo esto estaba dise?ado, Don¨¦s es una persona que huye de los planes. Sobre todo desde que la enfermedad lleg¨® a su vida. ¡°Cada vez hago menos planes y me fijo m¨¢s en el presente. Hago las cosas que me apetece y no hago lo que no quiero. El nivel de conformismo en el que vivimos est¨¢ muy bajo, enseguida nos contentamos con cualquier cosa¡±.
Es inevitable pensar que el c¨¢ncer ha podido pararle los pies, pero est¨¢ tan convencido de que no ha sido as¨ª que hay que creerle. Su buen aspecto y su tono moreno en la piel ¡ªacaba de volver de hacer surf en Francia¡ª lo prueban. Igual que cuando hace tres a?os comunic¨® su diagn¨®stico ¡ªy en 2017 anunci¨® que hab¨ªa reca¨ªdo de nuevo¡ª, el int¨¦rprete de La Flaca sigue sin tener miedo al c¨¢ncer y no teme hablar de ello, pese a que contin¨²a con revisiones m¨¦dicas cada tres semanas. ¡°Yo soy un enfermo cr¨®nico, pero esta enfermedad, por suerte, no me impide andar, ni hacer el amor, ni tocar la guitarra. El c¨¢ncer no ha definido una nueva estrategia en mi vida¡±, explica una vez m¨¢s y a?ade que es algo a lo que solo le dedica cinco minutos al d¨ªa. ¡°Casi siempre a mediod¨ªa, cuando estoy en una terraza al sol y me tomar¨ªa encantado una cerveza, pero ya no bebo¡±.
Aunque insiste en que esto no es un adi¨®s, sino que se trata de un hasta luego, Pau Don¨¦s tiene muchas cosas en mente que hacer durante su descanso, para el que no tiene billete de vuelta. ¡°Tengo ganas de arreglarme e ir al cine, ir a comer con amigos, pasear por la monta?a, hacer surf, pero sobre todo, estar con mi hija¡±. Su pr¨®ximo destino est¨¢ lejos, en el extranjero aunque no desvela el lugar concreto, y como acompa?antes se lleva la guitarra, su fiel compa?era, la tabla de surf, su ¨²ltima afici¨®n y a su hija Sara, de 14 a?os, el motivo principal de esta decisi¨®n. ¡°A lo largo de mi carrera musical he intentado tres veces parar, una de ellas cuando naci¨®. Pero esta vez es en serio¡±. ¡°No pude disfrutar de su infancia y no quiero perderme su adolescencia¡±, comenta quien se ha propuesto apuntarse a clases de funky para no ridiculizar a su hija en la discoteca.
Antes le esperan tres meses intensos. Quiere despedirse por todo lo alto: el viernes estren¨® disco, Jarabe Filarm¨®nico; libro, 100 letras de Jarabe de Palo; y la gira, Jarabe 20 a?os. El a?o pasado Jarabe de Palo llen¨® auditorios y teatros con un espect¨¢culo m¨¢s ¨ªntimo y emotivo, pero el int¨¦rprete de grandes ¨¦xitos como Depende o Bonito quiere arrasar en las salas de los bares con algo ¡°mucho m¨¢s golfo¡±. ¡°Me quiero ir con el recuerdo de qu¨¦ bien lo pasamos en la ¨²ltima gira. Perd¨®n, la pen¨²ltima¡±.
¡ª Dice que para, pero que no se pira y que volver¨¢, ?cumple sus promesas?
¡ª Siempre.
20 a?os de ¡®rock and roll¡¯ de Jarabe de Palo
Jarabe de Palo cumple 20 a?os haciendo rock and roll y Pau Don¨¦s quer¨ªa terminar con esta etapa musical por todo lo alto. Por ello ha publicado Jarabe Filarm¨®nico, un ¨¢lbum con 13 canciones del repertorio jarabesco grabadas por la Orquesta Filarm¨®nica de Costa Rica y cantadas por ¨¦l mismo. "Art¨ªstica y musicalmente hablando es el trabajo m¨¢s potente que hemos hecho nunca", reconoce el cantante sobre su decimosegundo disco. Don¨¦s revela la confianza que le ha aportado a s¨ª mismo esta "maravillosa experiencia" que fue grabar sus m¨ªticos temas con 60 m¨²sicos profesionales. "Ha sido un verdadero paso de gigante para m¨ª. Ahora s¨¦ cu¨¢l es mi calidad y me atrever¨ªa a tocar con los m¨¢s grandes".
Pero lo que verdaderamente hace a un grupo de m¨²sica son sus canciones, aunque muchas veces de ellas solo se recuerde el estribillo. Para que esto no ocurra, el int¨¦rprete de Humo ha hecho una selecci¨®n de los 100 sencillos m¨¢s significativos de toda su trayectoria ¡ªLa Flaca, Depende, 1m2, entre otras¡ª y los ha plasmado en un libro recopilatorio. 100 letras recoge, adem¨¢s, algunos de los manuscritos que el cantante ha guardado durante todos estos a?os y que ha conservado en su formato original, como en hojas con el membrete de hoteles de todas las partes del mundo o en las t¨ªpicas servilletas de los bares.
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