Segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil

La primera vuelta acab¨® con un sobresalto: el ultraderechista Bolsonaro se quedaba a punto de ganar sin necesidad de una segunda votaci¨®n. Pocos hab¨ªan previsto semejante resultado. Pero Fernando Haddad, el segundo ganador, no logr¨® despegar en las encuestas, ni entonces ni ahora, por mucho que su rival propugne valores de la dictadura. La cuesti¨®n ya no es si Bolsonaro gana o pierde. Es cu¨¢ntos votos recibir¨¢ Haddad para hacer mejor o peor oposici¨®n.

Una gran parte del fracaso brasile?o es social. La pobreza extrema ha ido en aumento en los ¨²ltimos a?os, mientras los ¨ªndices de violencia no paran de subir de un a?o para otro (hablamos del pa¨ªs con m¨¢s homicidios del mundo) y los millonarios ya se van de miles en miles en busca de pa¨ªses m¨¢s amables.

Tras el batacazo del ¨²ltimo lustro, justo cuando el resto del mundo se recuperaba de la Gran Crisis, la econom¨ªa brasile?a empieza ahora a recuperar el pulso. El t¨ªmido avance registrado en 2017, ligeramente por debajo del 1%, es, no obstante, insuficiente para cerrar las heridas que dej¨® la recesi¨®n. Y eso tiene traslaci¨®n directa al terreno pol¨ªtico, en forma de desencanto generalizado. Para este a?o y el pr¨®ximo, no obstante, la situaci¨®n luce mejor: seg¨²n las previsiones de la Cepal, Brasil crecer¨¢ un 1,4% ¡ªuna d¨¦cima m¨¢s que la media de Am¨¦rica Latina y el Caribe¡ª durante el ejercicio en curso y un 1,6% en 2019. Algo de ox¨ªgeno para una econom¨ªa asfixiada tras a?os en el abismo.