El enlace entre la historia y la prosperidad
El monasterio de Sijena, el arte mud¨¦jar y el Camino de Santiago son pilares de la regi¨®n
En Arag¨®n se escucha el silencio de las piedras y las pinturas antiguas, pero tambi¨¦n el estallido del toque de tambor y el bombo. Ambos extremos son patrimonio material e inmaterial de la humanidad. En los bell¨ªsimos ¨¢bsides del monasterio de Sijena (en la comarca de Los Monegros), el visitante siente el recogimiento con el que los arquitectos del siglo XII imaginaron acercarse a Dios. Dentro, un tesoro. Tras la llegada ¡ªdespu¨¦s de la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155 en Catalu?a¡ª de 44 piezas que estaban depositadas en el Museo de Lleida, entre las que destacan tres hermosas cajas sepulcrales del siglo XV, el cenobio ha tenido una nueva vida. En 2017, cuando albergaba solo las 51 obras devueltas por el Museu Nacional d¡¯Art de Catalunya (MNAC), apenas lo visitaban 6.000 personas. El a?o pasado fueron m¨¢s de 10.500. Acallado temporalmente el ruido del traslado y su enfrentamiento con la Generalitat, aguardan en la quietud las piezas, y son soberbias.?
La comunidad quiere "So?ar Sijena". Es el nombre de un plan director que intenta conseguir unos 10 millones de euros en los pr¨®ximos cuatro a?os; hasta 2023, cuando el monasterio cumpla su centenario. ¡°Con ese presupuesto podremos terminar la restauraci¨®n del monumento y ampliar las salas de exposiciones. Hasta ahora hemos atendido a lo urgente, pero tenemos que trabajar a largo plazo¡±, defiende Juan Yzuel, portavoz de la plataforma ciudadana Sijena S¨ª. A¨²n tienen que regresar o no (depender¨¢ de la resoluci¨®n de la Audiencia Provincial) las pinturas murales del cenobio monegrino. Pero esta localidad de poco m¨¢s de 500 habitantes nota que la historia les ha hecho hueco. ¡°Es un ejemplo de resistencia de los pueblos en su lucha contra el expolio frente a urbes grandes y poderosas. Sijena es un s¨ªmbolo de dignidad y justicia¡±, reivindica Yzuel.
Por lo com¨²n, el patrimonio hist¨®rico y cultural suele generar un espacio sin tantas tensiones. Predominan m¨¢s los acuerdos que las disputas. Arag¨®n es abundante en bienes culturales y naturales que son patrimonio del mundo. En esta lista de joyas de valor universal concurre el arte mud¨¦jar de Teruel (que entr¨® en la clasificaci¨®n en 1986), el Camino de Santiago (1993), los parques de Ordesa y Monte Perdido (1997) y el arte rupestre del Arco Mediterr¨¢neo (1998). Un di¨¢logo entre el presente y el pasado.
Un reclamo identitario
Crece el inter¨¦s por las rutas que rememoran la Guerra Civil, como Belchite o los pasos de ?Orwell por Los ?Monegros
El mud¨¦jar turolense ¡ªuna arquitectura de tierras reconquistadas¡ª abri¨® esa v¨ªa a la memoria del planeta. Hoy son ya 10 edificios bajo la b¨®veda mundial. Ah¨ª est¨¢n, por ejemplo, las torres de San Mart¨ªn y del Salvador; la torre, techumbre y cimborrio de la catedral de Santa Mar¨ªa de Mediavilla, o la torre e iglesia de San Pedro. El patrimonio cultural es la identidad de un pueblo y se cuida mucho. ¡°Solo falta por restaurar la torre de la catedral en Teruel¡±, apunta el arquitecto Antonio P¨¦rez S¨¢nchez, quien reclama levantar la mirada cuando se pasee por la ciudad y fijarse en el modernismo tra¨ªdo por el arquitecto tarraconense Pablo Mongui¨® Segura.
Sin embargo, mientras se vaga por las calles de Teruel, el visitante escucha al fondo el rumor del pasar que acarrean los peregrinos. El Camino Franc¨¦s ¡ªparte del Camino de Santiago¡ª entra por Somport (puerto de Monta?a que sirve de frontera con Francia) y baja hasta Undu¨¦s de Lerda (Zaragoza). Un viaje de unos 98 kil¨®metros paralelo al r¨ªo Arag¨®n que ¡°permite contemplar algunos de los mejores elementos rom¨¢nicos del mundo, como el ajedrezado [una ornamentaci¨®n del siglo XI basada en peque?os cilindros alineados] jaqu¨¦s¡±, comenta Ernesto G¨®mez, director de la Asociaci¨®n de Municipios del Camino de Santiago (AMCS). Un recorrido de descubrimiento interior, pero tambi¨¦n econ¨®mico: cada peregrino que pasa por el territorio aragon¨¦s se deja, en promedio, 240 euros. Hay que atraer a esos caminantes: al fin y al cabo, el 10% de la riqueza de la regi¨®n procede del turismo.
Uno de esos motores de la prosperidad estaba enterrado bajo capas de sedimentos y millones de a?os. La Fundaci¨®n Conjunto Paleontol¨®gico de Teruel-Din¨®polis, con su centro en Teruel y siete peque?os museos en el territorio, expone f¨®siles, muchos de dinosaurios y las huellas de sus pisadas al aire libre. ¡°No solo hemos atra¨ªdo m¨¢s de tres millones de visitantes desde que abrimos en 2001, sino tambi¨¦n contribuimos a fijar la poblaci¨®n en una tierra de pueblos dispersos¡±, reflexiona Luis Alcal¨¢, su director gerente. Por desgracia, el pasado no siempre resulta tan amable. El recuerdo, a veces, es dolor. La comunidad muestra esa tragedia entre espa?oles que fue la Guerra Civil. Se pueden recorrer las ruinas del Pueblo Viejo de Belchite ¡ªdonde en 1937 murieron 5.000 personas en 15 d¨ªas¡ª o caminar los pasos del escritor brit¨¢nico en Los Monegros durante la contienda (Ruta Or?well). Jornadas que son parte del horizonte humano y geogr¨¢fico de su novela Homenaje a Catalu?a (1938), el relato de un ejercicio de memoria y democracia.
Pluralidad ling¨¹¨ªstica
El aragon¨¦s es una joya com¨²n. Un patrimonio hist¨®rico distinto; al igual que la palabra, la m¨²sica popular o la tradici¨®n oral. Empez¨® a ense?arse en las escuelas en el curso 1997-1998. ¡°Nosotros no tenemos una sola lengua, lo que construye la identidad aragonesa es la pluralidad de hablar catal¨¢n, aragon¨¦s y castellano¡±, explica Jos¨¦ Ignacio L¨®pez Sus¨ªn, director general de Pol¨ªtica Ling¨¹¨ªstica. Incluso le han buscado una respuesta comercial a la iniciativa Agora x l¡¯aragon¨¦s, que busca encontrar el valor econ¨®mico en la palabra. Pensemos en una bodega que bautiza uno de sus vinos con esa gram¨¢tica. Algo sencillo, algo trascendente. ¡°La cultura para nosotros es un motor de la econom¨ªa¡±, refrenda Nacho Escu¨ªn, director general de Cultura y Patrimonio de Arag¨®n.
?Y qui¨¦n puede imaginar el territorio sin Francisco de Goya? Desde hace 12 a?os, la fundaci¨®n que lleva su nombre se ocupa de difundir su legado. Entre 2016 y 2019, apostilla Mar¨ªa Lorente, su coordinadora, ha duplicado los ingresos p¨²blicos y privados. Se persigue dar a conocer los aspectos m¨¢s in¨¦ditos de la obra del maestro ¡ªoriundo de Fuendetodos (Campo de Belchite)¡ª y su contexto.La pr¨®xima exposici¨®n, El dibujo espa?ol en el gusto privado. Del Renacimiento a la Ilustraci¨®n, presentar¨¢ por primera vez colecciones privadas de dibujo espa?ol.
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