La batalla de las ideas

He estado reflexionando con angustia sobre el ataque terrorista de marzo de 2004 en Madrid. La d¨¦cada que comenz¨® en septiembre de 2001 con el ataque terrorista en Estados Unidos y la cadena de ataques terroristas que se sucedieron, incluido el de mi pa¨ªs, constituy¨® un punto de inflexi¨®n que remodel¨® las relaciones entre Occidente y el mundo ¨¢rabe y musulm¨¢n.

Los discursos del odio, la xenofobia y la intolerancia contra los musulmanes se convirtieron en la nueva norma. El estereotipo negativo cre¨® un miedo exagerado, odio y hostilidad frente ¡°al otro¡±.

Con este tel¨®n de fondo se sentaron las bases para la creaci¨®n de una ambiciosa iniciativa propuesta en 2004 por el expresidente del Gobierno espa?ol Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, apoy¨® la idea. De hecho, hace 15 a?os que el secretario general de la ONU, Kofi Annan, lanz¨® la Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas (UNAOC) como una herramienta pol¨ªtica para la prevenci¨®n de los conflictos mediante la promoci¨®n del respeto mutuo de las culturas, religiones y creencias a trav¨¦s del di¨¢logo interreligioso e intercultural.

Por desgracia, la masacre ocurrida en Nueva Zelanda recientemente contra los creyentes musulmanes fue un claro recordatorio de que el discurso del odio, la ret¨®rica supremacista blanca y el racismo siguen en pleno auge reforzados por el poder y la rapidez de Internet y sus m¨²ltiples plataformas.

Los cambios geopol¨ªticos de la d¨¦cada anterior contribuyeron a sentimientos inhumanos que son una afrenta contra la paz y la seguridad mundial. Esos cambios se plasman concretamente en el surgimiento de los partidos de ultraderecha en Europa y en la manipulaci¨®n que estos hacen de la crisis migratoria para demonizar a los inmigrantes a fin de ganar votos. Los pol¨ªticos miopes distorsionan la religi¨®n para extender su odio antimusulm¨¢n y antisemita, y as¨ª acabar sirviendo a los intereses de los terroristas y grupos extremistas.

La calumnia supremacista blanca no se limita ¨²nicamente a los musulmanes. El pasado mes de octubre, Robert Bowers asesin¨® violentamente a 11 jud¨ªos en la sinagoga Tree of Life, en Pittsburgh, culpando a los jud¨ªos de atraer invasores a Estados Unidos, en referencia a los refugiados. En enero, un atentado con bomba acab¨® con la vida de fieles cristianos en la misa del domingo de la catedral de Jolo en Sulu, Filipinas.

La ret¨®rica supremacista blanca y el racismo siguen en pleno auge reforzados por el poder y la rapidez de Internet y las plataformas

A pesar de su aparente similitud con la d¨¦cada pasada, el terrorismo moderno ha evolucionado, y ha adquirido un modus operandi m¨¢s complejo que requiere un nuevo enfoque: hacer frente a las causas profundas que favorecen un caldo de cultivo propicio para el extremismo violento. La prevenci¨®n y la lucha contra el terrorismo deber¨ªan ir de la mano. Deber¨ªa priorizarse la existencia de una metodolog¨ªa integral multilateral y polifac¨¦tica.

Cuando tom¨¦ posesi¨®n del cargo de alto representante de UNAOC, dise?¨¦ una visi¨®n renovada para hacer que el trabajo de UNAOC sea m¨¢s operativo y orientado a obtener resultados. Esto implica afianzar nuestros esfuerzos sobre el terreno con las comunidades afectadas de forma que se eviten y apacig¨¹en las tensiones basadas en la identidad. Fomentar el di¨¢logo intercultural e interreligioso es un instrumento de prevenci¨®n muy poderoso.

La masacre de Christchurch nos sacudi¨® hasta lo m¨¢s profundo de nuestro coraz¨®n y nos record¨® que, en nuestros esfuerzos globales de lucha contra el terrorismo, es importante salvaguardar los lugares de culto religioso.

El secretario general de Naciones Unidas acert¨® plenamente cuando hace pocos d¨ªas realiz¨® un llamamiento global para reafirmar el car¨¢cter sagrado de todos los lugares de culto y la seguridad de todos los fieles que visitan lugares de veneraci¨®n en un esp¨ªritu de compasi¨®n y tolerancia. Es un privilegio para m¨ª tener la responsabilidad de desarrollar un plan de acci¨®n para que Naciones Unidas se comprometa plenamente en apoyo de la salvaguarda de lugares de culto religioso. Tengo la intenci¨®n de ponerme en contacto con Gobiernos, organizaciones confesionales, l¨ªderes religiosos y otros para explorar actuaciones que prevengan ataques de ese tipo y garanticen el car¨¢cter sagrado de los lugares de culto religioso.

La Alianza no puede conseguir sus objetivos sin ayuda. Ninguna persona con sentido de humanidad puede deso¨ªr esta llamada.

La tragedia de Christchurch deber¨ªa unirnos. Hacer frente colectivamente al azote del odio que alimenta el terrorismo no es una opci¨®n; es una obligaci¨®n moral. Solo si estamos juntos lograremos ganar la batalla de las ideas.

Miguel ?ngel Moratinos es alto representante de la Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas.