Seat Le¨®n TGI, eficiencia a todo gas
La marca espa?ola presenta una nueva gama de modelos alimentados por gas natural comprimido (GNC) y con etiqueta ambiental ECO
Hay vida m¨¢s all¨¢ de la electrificaci¨®n del autom¨®vil. Se puede ser ecol¨®gico y ahorrador sin necesidad de esperar que las inc¨®gnitas del coche el¨¦ctrico se vayan resolviendo. Es la propuesta que realiza Seat con su nueva gama de modelos TGI alimentados por gas natural comprimido (GNC), con una eficiencia muy superior a los combustibles convencionales y todas las ventajas del etiquetado ECO que le otorga la DGT a esta tecnolog¨ªa.
Mii, Arona, Ibiza y Le¨®n conforman una propuesta que satisfar¨¢ las exigencias y necesidades de conductores que quieran ahorrar a la hora de repostar y, desde luego, tambi¨¦n ser m¨¢s respetuosos con el medio ambiente. Un veh¨ªculo de GNC emite en torno a un 25% menos de CO2 que un modelo equivalente de gasolina y hasta un 75% menos NOx que un di¨¦sel. A ello se deben sumar las ventajas econ¨®micas del gas, con un precio significativamente inferior a la gasolina (en la actualidad ronda los 0,90 euros el kilo) y siempre al menos un 25% por debajo del gas¨®leo, como marca la legislaci¨®n al respecto.
En el caso del Le¨®n TGI, disponible tanto en carrocer¨ªa de cinco puertas como la familiar ST, su motor con caja de cambio autom¨¢tica homologa un consumo de 3,5 kilos por cada 100 kil¨®metros en modo GNC, es decir, que se podr¨ªa recorrer esta distancia por tan s¨®lo 3,15 euros, con una emisiones de C02 de 95 g/km. Adem¨¢s, la inclusi¨®n de un tercer dep¨®sito de GNC eleva su capacidad total a 17,3 kilos, lo que se traduce en una autonom¨ªa de hasta 500 kil¨®metros con este combustible. A ello hay que sumar los nueve litros del dep¨®sito auxiliar de gasolina, con lo que el alcance total de esta variante se incrementar¨ªa en otros 150 kil¨®metros.
Es as¨ª como el Le¨®n TGI no s¨®lo garantiza la m¨¢xima eficiencia con las m¨ªnimas limitaciones en una utilizaci¨®n urbana, con semejante autonom¨ªa permite afrontar sin inquietud cualquier viaje por carretera, incluso cuando la red de gasineras en el territorio nacional se encuentra todav¨ªa en plena fase de expansi¨®n. Simplemente planificando la ruta con la necesaria previsi¨®n de repostaje se puede recorrer sin problemas Espa?a de punta a punta.
Y es que las versiones GNC de Seat no presentan condicionantes en este ni en ning¨²n otro sentido respecto a sus hermanos alimentado por combustibles f¨®siles, ni siquiera determinante en el precio de adquisici¨®n. Su motor 1.5 es ahora m¨¢s potente, hasta alcanzar los 130 CV frente a los 110 de la versi¨®n precedente. Se puede elegir entre un cambio manual de seis marcha u otro autom¨¢tico DSG de doble embrague y siete relaciones, adem¨¢s de las dos carrocer¨ªas ya mencionadas que se combinan con los niveles de acabado Xcellence y FR.
Sus prestaciones son comparables a las de cualquier Le¨®n correspondiente, con una velocidad punta de 206 km/h y una aceleraci¨®n de 0 a 100 km/h en 9,9 segundos. El conductor no debe intervenir en modo alguno en la gesti¨®n del combustible: el L¨¦on consume GNC mientras que est¨¦ disponible (en el salpicadero aparece un segundo indicador con su nivel), pasando de forma autom¨¢tica e imperceptible a la gasolina cuando el primero se agota.
La suavidad de funcionamiento, la respuesta inmediata y el nivel sonoro son exactamente los mismos en uno u otro caso, con el comportamiento intachable del que hace gala cualquier versi¨®n del modelo m¨¢s vendido del mercado espa?ol durante el pasado a?o. Tampoco la gama TGI renuncia al equipamiento de seguridad y asistentes a la conducci¨®n que caracteriza a la gama, que incluye desde el control de velocidad adaptativo al asistente de salida involuntaria del carril, pasando por el cambio de luces autom¨¢tico, la frenada autom¨¢tica con reconocimiento de peatones o el detector de fatiga.
Aunque, sin duda alguna, un valor a?adido destacad¨ªsimo en estas versiones TGI son las ventajas de la etiqueta ECO, cada d¨ªa m¨¢s importantes sobre todo en el entorno urbano. Var¨ªan dependiendo de las comunidades aut¨®noma e incluso de los ayuntamientos, pero la tendencia general e imparable apunta a incentivar estos combustibles m¨¢s eficientes, lo que se concreta en la exenci¨®n del impuesto de matriculaci¨®n, bonificaciones de hasta el 75% en la tasa municipal de circulaci¨®n, reducciones en el precio del aparcamiento en zonas de estacionamiento regulado, descuentos en algunos peajes¡
Sin olvidar, por supuesto, el libre acceso al centro urbano de grandes ciudades en la mayor¨ªa de los episodios de alta circulaci¨®n. En el caso de Madrid, el m¨¢s exigente en este sentido de todo el pa¨ªs a d¨ªa de hoy, el Le¨®n TGI puede circular y aparcar en cualquier zona de la ciudad, incluyendo su almendra central, hasta en el escenario cuatro de un m¨¢ximo de cinco previstos (el ¨²ltimo extremo no se ha producido por el momento en la capital).
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