11 'hacks' asombrosos de clientes de Ikea para personalizar la estanter¨ªa Billy
Desde molduras hasta puertas correderas: parece otro mueble
Es uno de los elementos identificativos de nuestro tiempo. La colecci¨®n de estanter¨ªas Billy de Ikea se ha convertido con su popularidad y omnipresencia en uno de los muebles m¨¢s vendidos, usados y vistos en casas de todo tipo de pelaje y condici¨®n (y en el que encabeza la lista de los 10 m¨¢s vendidos de Ikea, con 60 millones de unidades en el mundo). Pero para muchos de los propietarios de una Billy, no basta con comprarla y llenarla de libros u objetos decorativos: tambi¨¦n hay que darle una vuelta, transformarla, convirtiendo el dise?o est¨¢ndar fabricado en serie en algo ¨²nico, con el toque personal de sus usuarios.
Tendremos los mismos muebles en Jaca que en Helsinki pero, si es posible, cada uno los customizar¨¢ para otorgarle ese toque personal que por su condici¨®n no pueden tener. Adem¨¢s, las Billys fueron concebidas como librer¨ªa, pero habida cuenta de que cada vez tenemos menos libros f¨ªsicos en nuestras casas, reconvertirlas en otra cosa adquiere todo el sentido. Tambi¨¦n es este uno de los signos de nuestros d¨ªas.
?Y cu¨¢l es el lugar para comprobar la habilidad de los dem¨¢s, inspirarse o envidiar desde el silencio la buena mano para el bricolaje que tienen algunos mientras nosotros sufrimos ya con la tarea sencilla de montar una Billy, el abc del ensamblaje Ikea? Por supuesto, las redes sociales y las webs como Ikea hackers. Creado en mayo de 2006 por Jules Yap como un blog en el que reunir los hackeos que los usuarios hac¨ªan en sus muebles de Ikea, la popularidad de la p¨¢gina la llev¨® incluso a un contencioso con la casa sueca, que aspiraba a los derechos sobre el dominio. El tema se resolvi¨® de forma satisfactoria para Jules, que sigue manteniendo el nombre del sitio (su versi¨®n espa?ola Mi llave Allen, acab¨® dejando su nombre anterior de Piratas del Ikea).
Estas webs pusieron nombre a todos los que hac¨ªan virguer¨ªas con sus adquisiciones en la tienda de mobiliario de dise?o asequible y llegaron a crear sentido de comunidad. Con el 'hashtag' #ikeahacks se accede a una muestra de la creatividad humana.
Fuera de discusiones por la nomenclatura, Ikea apoya estas personalizaciones creando una rama de muebles que invita a eso y colgando v¨ªdeos con ideas para transformar la Billy y otros ¨ªtems. Desde YouTube nos sugieren cambiar el cristal de las puertas por una rejilla, pegar recortes de fieltro a modo de escamas en las puertas o cubrirlas y pintarlas con paneles de colores microperforados a juego con los tonos de la habitaci¨®n de destino.
11 milagros que podemos hacer con una Billy, habilidad y paciencia
1. A?adirle puertas correderas. La dise?adora de Interiores Kristina Steinmetz realiz¨® en 2016 un hack en el que a?ad¨ªa a una Billy puertas correderas de conglomerado. El post de su blog en el que explica c¨®mo lo hizo se volvi¨® tan popular que recientemente ha decidido traducir las instrucciones, en su primera versi¨®n en alem¨¢n, al ingl¨¦s, para los que se atrevan con esta modificaci¨®n de la estanter¨ªa de Ikea.
2. Convertirla en una casa de mu?ecas. Ikea tiene su propia casita de mu?ecas, tambi¨¦n muy frecuente en los hashtags de ikea hacks, pero ?por qu¨¦ conformarse con pintar una ya hecha o a?adirle papel en las paredes cuando puede crearse una completamente diferente desde una Billy?
3. A?adirle molduras. Es sorprendente lo que algo tan sencillo como unas molduras pueden hacer por una Billy: de plebeya a burguesa en un solo paso.
4. Darle un aire de mueble industrial. Con un poco de pintura y ma?a, se convierte en un mueble sacado de un loft neoyorquino¡ Con camita abatible para un oso de peluche, tambi¨¦n, porque lo cort¨¦s no quita lo valiente.
5. Darle la apariencia de hecha a medida. Nunca hay que subestimar el poder de unas cuantas Billys contiguas. Bien soldadas, unidas y ajustadas al espacio, podr¨ªan pasar por una librer¨ªa hecha a medida.
6. Reconvertirla en armario. Sin estantes y con algunas barras para perchas, las Billy pueden cumplir la funci¨®n de armarios para distintos usos. Con estanter¨ªas, pueden servir como los zapateros ajustados al tama?o que necesitan muchos zapatoadictos.
7. Modificarla para que sea una cajonera. Tablas de madera a medida, variedad de pomos a escoger y pintura de colores. Sin necesidad de rieles, una Billy b¨¢sica pasa a ser una lucida cajonera para todo.
8. Con un arco a?adido. Si se tiene debilidad por las estanter¨ªas rematadas en arco, una visita al carpintero (o siguiendo las instrucciones de la autora de este 'hack') puede lograr por poco dinero transformar la m¨¢s corriente de las Billys en un mueble con apariencia de herencia familiar.
9. Pintarla. De forma peri¨®dica Ikea saca modelos de Billy en distintos colores, como amarillo o rosa, adem¨¢s de las habituales l¨ªneas en blanco, negro y distintos tonos de madera. Si no se quiere esperar a que aparezca el tono deseado, con algo tan sencillo como una capa de pintura el mueble queda completamente transformado.
10. Pintarla, s¨ª, pero a juego con las paredes. Malcolm Begg renov¨® del todo su casa y logr¨® que la Billy que presid¨ªa el sal¨®n pareciese cualquier cosa menos una Billy. Iluminaci¨®n directa, molduras y el hallazgo de pintarla a juego con el gris de las paredes le dan un nuevo aire. En su web muestra paso a paso c¨®mo lo hizo.
11. Forrar el fondo con papel pintado. Una variaci¨®n m¨¢s elaborada de pintar la Billy consiste en sustituir su fondo plano por uno forrado con papel pintado estampado. El resultado da lugar a un ambiente muy distinto.
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