17 fotosCrecer y vivir en el barrio m¨¢s inseguro de NairobiExiste una joven generaci¨®n en Mathare que demuestra ser capaz de cambiar el rumbo de la pobreza y la exclusi¨®n en su barrioDavid SolerNairobi - 13 jun 2019 - 15:07CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceVistas del asentamiento informal de Mathare, en Nairobi (Kenia) desde una de sus calles. En este territorio de menos de ocho kil¨®metros cuadrados viven m¨¢s de 600.000 personas.David Soler CrespoIsaac Muasa ¡®Kaka¡¯ posa en la cancha de f¨²tbol Slum Soccer. Kaka acamp¨® junto a sus compa?eros del centro de juventud para no permitir que construyeran en el terreno tras quemarse unas viviendas.Primo? Kova?i?Kaka junto con su mujer, Christine Wanjiru, en el bar que ella regenta en Mathare. La especialidad de la casa es la muratina, un vino dulce con sabor similar al moscatel que prepara Christine. La pareja espera su tercer hijo. Primo? Kova?i?Kaka posa junto a su amigo Ronnie con dos banderas de Kenia desde la terraza del centro de juventud el pasado 21 de octubre de 2018 en la fiesta que celebraron en su honor tras conseguir el diploma de honor de la ONU-Habitat. Primo? Kova?i?El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, recibe de manos de Kaka un documento con propuestas de mejora para el barrio de Mlango Kubwa. Guterres visit¨® Mathare el pasado 8 de marzo de 2017 con motivo del D¨ªa Internacional de la Mujer e inaugur¨® el campo de f¨²tbol Slum Soccer, donde jug¨® una pachanga con un grupo de mujeres. Isaac MuasaEl presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, entrega a Kaka el diploma de honor de la ONU-Habitat por su labor inspirando a j¨®venes en Mathare y en la coordinaci¨®n del programa de recogida de residuos. Isaac MuasaSamuel Muasa (izquierda), el hermano de Kaka, posa junto con su amigo Philip Mwangi (derecha) en el centro de juventud. En ¨¦l decenas de j¨®venes se re¨²nen cada tarde para charlar sobre el d¨ªa a d¨ªa en el barrio y pasar el rato. Primo? Kova?i?Una calle en el asentamiento informal de Mathare. El lugar fue construido encima de un vertedero y en ¨¦l se amontonan casas de chapa unas pegadas a las otras, dejando peque?as calles entre las que hay que serpentear para labrarse un paso. David Soler CrespoUn se?or mayor pasa por delante de una ducha p¨²blica en el asentamiento de Mathare. Una ducha caliente cuesta 10 chelines, el equivalente a aproximadamente 10 c¨¦ntimos de euro. David Soler CrespoEn el campo de f¨²tbol de Mlango Kubwa hay un mural con el nombre ¡®Slum Soccer¡¯. Los ni?os pueden divertirse jugando a f¨²tbol mientras est¨¢n seguros y sus padres tranquilos al poder localizarlos con facilidad. David Soler CrespoKaka muestra una tela en la que est¨¢ escrito: ¡®La pobreza no es un accidente, est¨¢ creada por el ser humano¡¯. El 78% de los j¨®venes en Kenia est¨¢n en el paro. Primo? Kova?i?Jackson Makuru usa un GPS b¨¢sico para mapear el asentamiento informal. Muchos j¨®venes locales trabajan en proyectos con Spatial Collective, que busca obtener datos de lugares no censados. Primo? Kova?i?Actual vertedero en el barrio de Mlango Kubwa. Los j¨®venes del Mathare Environmental Youth Group recogen por 10 c¨¦ntimos a la semana la basura y la transportan a este lugar para mantener el barrio limpio. Primo? Kova?i?Thuo Wanjiku tiene 40 a?os y vive con su mujer y tres de sus cuatro hijos en una casa hecha de chapa. Naci¨® y creci¨® en Mathare. Le encanta escuchar y cantar m¨²sica reggae. Primo? Kova?i?Tyrese posa junto a su moto a las afueras del centro de juventud. A su lado se asoma Wambua, que asoma desde su puesto de comida en el que vende chapatti. Cuatro de cada diez j¨®venes desempleados en los slums monta su propio negocio y los quioscos de comida son la opci¨®n m¨¢s popular. Primo? Kova?i?Spatial Collective trabaja con la poblaci¨®n local para descubrir el uso de cada vivienda o los lugares por los donde podr¨ªan pasar camiones de bombero y furgonetas de ambulancia. En la imagen, Thuo Wanjiku apunta el uso de un local.Primo? Kova?i?Kaka observa sentado una pintada en la que pone ¡®derechos igualitarios y justicia para todos¡¯. En el centro de juventud buscan crear un barrio seguro y no aceptan a j¨®venes con historial criminal. Primo? Kova?i?