Los liberales dem¨®cratas
Una posible alianza electoral entre el laboristas y los liberales antes del Brexit dar¨ªa al Reino Unido lo que de verdad necesita: un segundo refer¨¦ndum con la opci¨®n de quedarse en la Uni¨®n Europea
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?Mientras estamos todos obsesionados con el nuevo Gobierno pro-Brexit de Boris Johnson, debemos tener en cuenta otra cosa: con Jo Swinson, la nueva l¨ªder que eligieron la semana pasada, los liberales dem¨®cratas tienen una posibilidad de encabezar la lucha para recuperar un Reino Unido liberal. El magn¨ªfico ¡ªy no representado¡ª Reino Unido liberal, que la gente de todo el mundo admira y echa de menos. Para lograrlo, los liberales dem¨®cratas deben llegar a las partes de un pa¨ªs revuelto a las que no llegan desde hace un siglo.
Uno de los t¨ªtulos de libros m¨¢s memorables de la historia pol¨ªtica es The Strange Death of Liberal England (La extra?a muerte de la Inglaterra liberal), y ahora tengo la tentaci¨®n de hablar de ¡°El extra?o renacimiento de la Inglaterra liberal¡±. Pero la Inglaterra liberal no estaba muerta, como tampoco lo estaban la Escocia liberal ¡ªde donde procede Swinson¡ª ni el Gales liberal. De hecho, la encuesta de Actitudes Sociales de los brit¨¢nicos muestra que, en religi¨®n, orientaci¨®n sexual y origen ¨¦tnico, la sociedad brit¨¢nica se ha vuelto cada vez m¨¢s liberal en las ¨²ltimas d¨¦cadas.
Lo que estuvo a punto de morir no fue el Reino Unido liberal, sino el Partido Liberal (ese era el tema del libro de George Dangerfield). Si observamos el gr¨¢fico del comportamiento electoral durante los ¨²ltimos 100 a?os, veremos una monta?a rusa. Despu¨¦s de ser uno de los grandes partidos de Gobierno durante seis d¨¦cadas, hasta el final de la Primera Guerra Mundial, se convirti¨® en una minor¨ªa diminuta (en votos y, debido a un sistema electoral injusto, todav¨ªa m¨¢s en esca?os) entre 1931 y principios de los a?os setenta. Entonces revivi¨®, fortalecido por la alianza y fusi¨®n posterior con los socialdem¨®cratas escindidos del Partido Laborista ¡ªde ah¨ª el nombre de liberales dem¨®cratas¡ª y, en 2005, obtuvo 62 esca?os, su mejor resultado desde 1923. En 2010, con 57 diputados, logr¨® el aparente triunfo de entrar en un Gobierno de coalici¨®n con los conservadores, pero su pecado de pragmatismo le granje¨® el castigo de quedarse con ocho esca?os en 2015 y unos cuantos menos tras las elecciones anticipadas de 2017.
Swinson propone construir una econom¨ªa que ponga por delante a la gente y el planeta y controle la tecnolog¨ªa
Pero la monta?a rusa no se hab¨ªa detenido. Los liberales (para devolverles el nombre que les corresponde) salieron valientemente a proponer un segundo refer¨¦ndum sobre el Brexit al d¨ªa siguiente del de 2016, y desde entonces han sido el verdadero partido defensor de la permanencia, mientras los conservadores convert¨ªan el Brexit en un caos y los laboristas ca¨ªan en la ambig¨¹edad m¨¢s desastrosa. Como consecuencia, los liberales vencieron a los otros dos partidos en las ¨²ltimas elecciones europeas. Cuentan con m¨¢s de 106.000 miembros, en su mayor¨ªa recientes, una cifra que est¨¢ alcanzando a toda velocidad a los 160.000 del partido conservador, en su mayor¨ªa de m¨¢s edad, que han escogido a Johnson para ser su l¨ªder y (sin preguntar al resto del pa¨ªs) primer ministro del Reino Unido. Los liberales han obtenido mejores resultados que los laboristas en los ¨²ltimos sondeos de intenci¨®n de voto, pensando en unos comicios que seguramente habr¨¢ que convocar m¨¢s pronto que tarde.
Ahora bien, cuidado. Si Oxford es el centro de las causas perdidas, el Partido Liberal es el partido de los amaneceres enga?osos. ¡°Vamos a obtener una victoria aplastante¡±, dijo su l¨ªder, Jeremy Thorpe, en 1974. ¡°Volved a vuestras circunscripciones y preparaos para gobernar¡±, exclam¨® David Steel en 1981. Su ¨¦xito actual es producto de la coincidencia de dos circunstancias concretas. En primer lugar, la brecha identitaria entre los partidarios de permanecer y los partidarios de abandonar la UE se ha vuelto m¨¢s importante que cualquier otra divisi¨®n pol¨ªtica, y los liberales son el partido de la permanencia. Segundo, los laboristas y los conservadores tienen unos dirigentes que, cada uno por un motivo, est¨¢n inhabilitados para gobernar y abiertos a posturas radicalmente antiliberales. Johnson es un mentiroso y narcisista irresponsable, tan descalificado por su car¨¢cter para ser primer ministro brit¨¢nico como Trump para ser presidente de EE UU. No ha descartado la posibilidad de suspender el Parlamento para imponer un Brexit sin acuerdo. En una democracia liberal parlamentaria, ?hay algo menos liberal que eso? Jeremy Corbyn es un veterano activista socialista, bienintencionado pero confuso y que se deja guiar por asesores profundamente iliberales. Ning¨²n liberal genuino habr¨ªa tolerado tanto antisemitismo durante tanto tiempo en el partido. Pese a todo, si alguno de los dos grandes partidos regresara al centro ¡ªy, como liberal independiente de cualquier partido, conf¨ªo en que lo hagan¡ª, esta oportunidad excepcional desaparecer¨ªa.
Para aprovecharla, el Partido Liberal debe abarcar m¨¢s y mejor. Swinson obtuvo el liderazgo con un programa atractivo por su brevedad, con solo tres puntos: construir una econom¨ªa que ponga por delante a la gente y el planeta, controlar la revoluci¨®n tecnol¨®gica y agrupar ¡°un movimiento liberal que defienda nuestros valores y se oponga a las fuerzas del populismo y el nacionalismo¡±. Ahora tiene que especificar qu¨¦ son ¡°nuestros valores¡±. Es decir, tiene que profundizar en los principios del liberalismo, empezando por el principio fundamental de la libertad individual. Deber¨ªa remitirse a la magn¨ªfica tradici¨®n liberal brit¨¢nica, desde el fil¨®sofo John Locke y Freeborn John Lilburne, defensor de la libertad de expresi¨®n en el siglo XVII, pasando por el pensador John Stuart Mill y el primer ministro del siglo XIX William Ewart Gladstone, hasta el fil¨®sofo Isaiah Berlin y el ensayista pol¨ªtico George Orwell en el siglo XX. No estoy proponiendo un oscuro seminario sobre teor¨ªa pol¨ªtica; todos esos grandes liberales hablaban un ingl¨¦s m¨¢s claro, fresco y vibrante que cualquier pol¨ªtico actual. Podemos comparar a Johnson con Gladstone y a Corbyn con Orwell. Y luego podemos demostrar que esos valores liberales tienen mucha relaci¨®n con los desaf¨ªos de nuestra ¨¦poca, como el cambio clim¨¢tico, la igualdad de g¨¦nero (sobre la que Swinson escribi¨® un libro), la educaci¨®n y el compromiso de preservar la Uni¨®n Europea como ejemplo supremo del orden liberal internacional.
Johnson es un mentiroso y narcisista irresponsable. Est¨¢ descalificado para ser primer ministro brit¨¢nico
Esa profundizaci¨®n contribuir¨¢ a alcanzar m¨¢s amplitud. Conectar¨¢ con los votantes del Partido Laborista y el Partido Conservador que votaron por primera vez a los liberales en las elecciones europeas pero quiz¨¢ no les votar¨ªan en unas elecciones generales. Los liberales son favoritos en las elecciones parciales que se celebrar¨¢n la semana pr¨®xima en el distrito de Brecon y Radnorshire, en Gales. Cuentan con Chuka Umunna, quiz¨¢ el pol¨ªtico de m¨¢s talento de los que abandonaron el laborismo a trav¨¦s de la escisi¨®n Change UK, y al que pronto se unir¨¢ seguramente al menos una de las tres carism¨¢ticas diputadas conservadoras y partidarias de la permanencia que tambi¨¦n dejaron su partido para incorporarse a Change UK. Parece que varios conservadores m¨¢s est¨¢n pensando en pasarse a los liberales. Aun as¨ª, el partido seguir¨¢ siendo muy peque?o en el Parlamento. En unos comicios generales necesitar¨¢n lo que Swinson llama acuerdos electorales ¡°a medida¡± con los Verdes, los nacionalistas galeses de Plaid Cymru, laboristas liberales y conservadores partidarios de la UE. Adem¨¢s, para poder superar sus resultados de 2005, y mucho m¨¢s para acercarse a los 100 diputados, tendr¨¢n que recaudar m¨¢s fondos para su campa?a.
Quedan muchas cosas que depender¨¢n de las circunstancias. Si los conservadores consiguen sacar al Reino Unido de la UE con un acuerdo antes de ir a elecciones, el Partido del Brexit se quedar¨¢ sin raz¨®n de ser y los europe¨ªstas se desinflar¨¢n. Ahora bien, si las elecciones se adelantan al Brexit, tendremos la posibilidad de forjar una alianza entre laboristas y liberales que d¨¦ al Reino Unido lo que de verdad necesita: un segundo refer¨¦ndum con la opci¨®n de quedarse en la UE. Y una segunda oportunidad para el verdadero, magn¨ªfico ¡ªy no representado¡ª Reino Unido liberal.
Timothy Garton Ash es catedr¨¢tico de Estudios Europeos en la Universidad de Oxford y en 2017 fue galardonado con el Premio Carlomagno.
Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia.
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