Decenas de migrantes centroamericanos resultan heridos cada a?o a bordo de 'La Bestia', el tren que atraviesa M¨¦xico de sur a norte. El Centro de Rehabilitaci¨®n de Guanajuato, al centro del pa¨ªs, brinda apoyo a aquellos que han perdido alguna extremidad en accidentes durante los viajes.?dgar Garrido (REUTERS)El hist¨®rico tren, que transporta desde az¨²car hasta granos o minerales, ha ayudado a muchos migrantes a huir de extorsionadores y secuestradores o, m¨¢s recientemente, de los agentes de migraci¨®n y polic¨ªas que abundan en las carreteras. Luis Estuardo, un contador de 21 a?os, hab¨ªa subido al ferrocarril para escapar de las autoridades mexicanas, pero perdi¨® el equilibrio y cay¨®. Cinco horas despu¨¦s lo encontraron junto a las v¨ªas, ten¨ªa una de sus piernas destrozadas.?dgar Garrido (REUTERS)El continuo flujo migratorio en el pa¨ªs latinoamericano y el aumento de los controles por parte del Gobierno de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha incrementado la demanda de atenci¨®n en este centro hospitalario de Guanajuato.?dgar Garrido (REUTERS)Especialistas han tratado entre cinco y ocho nuevos pacientes con extremidades amputadas cada mes durante este a?o. Un importante aumento para este peque?o centro que atendi¨® entre tres y cuatro al mes en 2018. La pr¨®tesis de cada individuo es ¨²nica, explica el t¨¦cnico prot¨¦sico Gibr¨¢n Guzm¨¢n, por lo que la atenci¨®n es personalizada.?dgar Garrido (REUTERS)En un intento por buscar una vida mejor, muchos migrantes han sufrido ca¨ªdas mortales o serias heridas durante los viajes, principalmente cuando el ferrocarril se desliza a trav¨¦s de t¨²neles.?dgar Garrido (REUTERS)Las pr¨®tesis han servido de gran ayuda para que los migrantes que acceden a ellas puedan rehacer su vida despu¨¦s de los accidentes.?dgar Garrido (REUTERS)Desde 2011, un programa especial de la Cruz Roja, ahora localizado en un punto medio estrat¨¦gico sobre la l¨ªnea del tren, ha atendido a 411 migrantes mutilados.?dgar Garrido (REUTERS)Sobre 'La Bestia', los migrantes viajan a temperaturas extremas, por largas extensiones muchas veces controladas por carteles de la droga, con decenas de personas encaramados sobre techos resbaladizos o colgando de las manijas.?dgar Garrido (REUTERS)
