Los sanadores tradicionales de Zanz¨ªbar, archipi¨¦lago de Tanzania, est¨¢n siendo registrados por las autoridades. Alrededor de 340 ya se han inscrito
La curandero tradicional, Bi Mwanahija Mzee, sostiene al paciente Mundhir Nasoor, de cuatro semanas de edad, en Zanz¨ªbar, en enero de 2019. El beb¨¦ fue llevado porque no quer¨ªa alimentarse. Ella le diagnostic¨® que una ingesta de hierro demasiado alta durante la gestaci¨®n como la raz¨®n principal de la enfermedad.Nicky Moran Woo (REUTERS)Hidaya Rayabu, de 22 a?os, mira a su peque?a hija horas despu¨¦s de dar a luz en el Hospital Makunduchi.Nicky Moran Woo (REUTERS)El beb¨¦ Ahee Bom yace sobre un coj¨ªn en el pasillo de su casa en Zanz¨ªbar, Tanzania, el pasado febrero. Despu¨¦s del nacimiento, la piel de Ahee comenz¨® a oscurecerse y despegarse en grandes tiras. El curandero tradicional Bi Mwanahija Mzee lo ba?¨® con dos exfoliantes hechos de hojas.NICKY MORAN WOO (REUTERS)La curandera tradicional Bi Mwanahija Mzee (en el centro) revisa el pa?al de un ni?o que fue llevado a ella por estre?imiento. "La gente viene aqu¨ª porque realmente los ayudo. Conoc¨ª a muchos pacientes que fueron al hospital primero y no obtuvieron soluciones o la medicina no funcion¨® ", dice Mwanahija Mzee. "Este es mi trabajo seis d¨ªas a la semana durante m¨¢s de 20 a?os, as¨ª que lo hago mejor, s¨¦ m¨¢s que ellos. Los pacientes que acuden a m¨ª no mueren", afirma, rotunda.Nicky Moran Woo (REUTERS)Un beb¨¦ llevado a la curandera tradicional Bi Mwanahija Mzee para que lo ayude a que le crezca el cabello mira a la c¨¢mara.Nicky Moran Woo (REUTERS)La aprendiz de sanadora Salama corta las ra¨ªces para distribuirlas a los pacientes en la cl¨ªnica de Bi Mwanahija Mzee, en Zanz¨ªbar, Tanzania, el 6 de enero de 2019.Nicky Moran Woo (REUTERS)El curandero tradicional Haji Mrisho habla con la paciente embarazada Hidaya Rayabu, de 22 a?os, en su oficina en Zanz¨ªbar, el 9 de enero de 2019. Mrisho da bendiciones a las mujeres embarazadas para proteger a sus beb¨¦s no nacidos de lo que ellas creen que es una posesi¨®n por parte de esp¨ªritus sobrenaturales, como los llamados djinns .Nicky Moran Woo (REUTERS)Una mujer grita mientras es tratada por lo que ella cree que es posesi¨®n de esp¨ªritus sobrenaturales, como los llamados djinns, mientras que otras mujeres rezan en la cl¨ªnica de hierbas Shifaa en Zanz¨ªbar, Tanzania, 17 de febrero de 2019. Las personas que visitan la cl¨ªnica creen que pueden curarse de enfermedades f¨ªsicas, espirituales y mentales causadas por la posesi¨®n de esp¨ªritus mientras escucha recitar palabras del Cor¨¢n.Nicky Moran Woo (REUTERS)Murtazha Hamis, de 11 a?os, fue llevado a un curandero despu¨¦s de sufrir un derrame cerebral que result¨® en par¨¢lisis parcial. En la imagen hace flexiones en la cl¨ªnica de Bi Mwanahija Mzee en Zanz¨ªbar, Tanzania, 20 de enero de 2019. La sanadora ha estado masajeando a Murtazha y prescribi¨¦ndole ba?os de hierbas durante el a?o pasado. La familia del ni?o le da cr¨¦dito por ayudarle a recuperar la movilidad.Nicky Moran Woo (REUTERS)Ra¨ªces y las hierbas sobre una mesa esperando ser cortadas en pedazos m¨¢s peque?os y administradas como medicina a los pacientes en la cl¨ªnica de la curandera tradicional Bi Mwanahija Mzee. Zanz¨ªbar, Tanzania, 5 de enero de 2019.Nicky Moran Woo (REUTERS)Un servicio de t¨¦ adorna una habitaci¨®n recientemente renovada para filmar v¨ªdeos para el canal de YouTube del jeque Salum, el fundador de la cl¨ªnica Herbal Shifaa en Zanz¨ªbar, Tanzania, el 3 de marzo de 2019. En la cl¨ªnica Herbal Shifaa se lee el Cor¨¢n para desechar lo que la poblaci¨®n cree que son esp¨ªritus sobrenaturales, como los djinns, a quienes se atribuyen a muchas enfermedades.Nicky Moran Woo (REUTERS)La curandera tradicional Bi Mwanahija Mzee, de 56 a?os, masajea al beb¨¦ Abduli Juma de tres meses. La madre de Abduli, Semeni, lo llev¨® porque est¨¢ muy let¨¢rgico y no puede aguantar la cabeza. arriba. Bi Mwanahija Mzee cree que est¨¢ pose¨ªdo por esp¨ªritus sobrenaturales como djinns. Sin embargo, los m¨¦dicos del hospital dicen que tiene un problema cerebral incurable.Nicky Moran Woo (REUTERS)Montones de archivos de pacientes apilados en los estantes del Hospital Kidongo Chekundu, que posee el ¨²nico pabell¨®n psiqui¨¢trico de Zanz¨ªbar, el 24 de agosto de 2018. Algunas familias creen que las enfermedades mentales son causadas por esp¨ªritus sobrenaturales, y rara vez llevan a los enfermos al centro m¨¦dico tradicional salvo que la situaci¨®n sea grave.NICKY MORAN WOO (REUTERS)El aprendiz de sanador de la cl¨ªnica Bin Rubea, Mohammed Saleh, espera clientes en el dispensario de su jefe. Zanz¨ªbar, Tanzania, el 3 de marzo de 2019. El fundador de la cl¨ªnica, Seif Khamis Rubea, embotella sus propios productos y tambi¨¦n practica la medicina china a base de hierbas. Vende estos medicamentos en una tienda a un kil¨®metro de la cl¨ªnica donde atiende pacientes.NICKY MORAN WOO (REUTERS)El curandero tradicional Sahihi Mrisho 67, ofrece ra¨ªces medicinales en la aldea de Makunduchi, Zanz¨ªbar, Tanzania, el 26 de agosto de 2018. Mrisho cultiva y recolecta la mayor¨ªa de los medicamentos que usa en su pr¨¢ctica y fue ense?ado por sus padres, ambos curanderos. No hay control alguno sobre las hierbas y sus propiedades. El Gobierno del pa¨ªs quiere cambiar esto.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Varias mujeres recogen sus pertenencias despu¨¦s de un rezo cor¨¢nico en la cl¨ªnica de hierbas de Shifaa, Zanz¨ªbar, Tanzania, el 17 de febrero de 2019. En cl¨ªnica de hierbas de Shifaa se lee el Cor¨¢n para desechar lo que creen que son esp¨ªritus, culpados de muchas enfermedades.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Fatma Hamad sostiene a su hija de dos a?os, Khadija, mientras examina sus radiograf¨ªas en el hospital gubernamental Mnazi Mmoja, Zanz¨ªbar, Tanzania, 5 de febrero de 2019. Hamad llev¨® a su hija al hospital despu¨¦s de que una de las piernas del ni?o se paraliz¨® durante fiebre alta. Incapaz de encontrar el problema a trav¨¦s de rayos X, el propio hospital le recomend¨® que buscara un sanador tradicional.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Un sanador intenta despertar a una mujer verti¨¦ndole agua en el cuello. Ella cree que est¨¢ pose¨ªda por esp¨ªritus sobrenaturales.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Nadra sostiene a su hijo Muhammad Ali, de ocho meses. Lo llev¨® a la curandero tradicional Bi Mwanahija Mzee para buscarle alivio, pues sufr¨ªa de una hernia umbilical. Inicialmente lo atendieron en el hospital, pero tiene miedo de que le practiquen una cirug¨ªa y muera. Lo cual muestra el gran problema de la pr¨¢ctica y atenci¨®n cl¨ªnica reglada en el pa¨ªs.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Bi Mwanahija Mzee, de 56 a?os, pone hojas frescas para hervir como medicina en el bolso de Khadija Salum. Zanz¨ªbar, Tanzania, el 31 de enero de 2019. Salum es madre de un ni?o de un a?o, Amar, que fue llevado porque sufre unas convulsiones que comenzaron a los seis meses y no han cesado. El sanador est¨¢ convencido de que es por culpa de los esp¨ªritus. El peligro para el peque?o es inmenso.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Fatawi Haji Hafidh, gerente del Hospital Makunduchi, el segundo hospital m¨¢s grande administrado por el Gobierno en la isla principal de Zanz¨ªbar, posa para una fotograf¨ªa el 21 de agosto de 2018. Hafidh afirma que los m¨¦dicos y enfermeras est¨¢n sobrecargados y pueden no tener tiempo para ver pacientes o realizar diagn¨®sticos. Los enfermos tambi¨¦n pueden ser incapaces de pagar los medicamentos recetados, o pueden dejar de tomarlos antes de que termine la prescripci¨®n, lo que los lleva a una reca¨ªda y aumenta su desconfianza. Acuden a curanderos, m¨¢s baratos y cercanos.NICKY MORAN WOO (REUTERS)Un jeque de la cl¨ªnica de hierbas de Shifaa sostiene a una mujer que et¨¢ siendo tratada por lo que cree que es posesi¨®n de esp¨ªritus. La mujer tuvo convulsiones y cay¨® al suelo durante el proceso.NICKY MORAN WOO (REUTERS)La curandera tradicional Bi Mwanahija Mzee, de 56 a?os, masajea a la paciente embarazada Maryam Juma, de 29 a?os. Este es el quinto embarazo de Maryam despu¨¦s de tres abortos espont¨¢neos y un parto. Tanto ella como la sanadora creen que la raz¨®n es porque los ni?os en el ¨²tero estaban pose¨ªdos por esp¨ªritus. Maryam viene a Bi Mwanahija Mzee para procurar que este beb¨¦ sobreviva a trav¨¦s de hierbas y oraciones.NICKY MORAN WOO (REUTERS)La aprendiz de sanadora Salama sostiene un cuchillo usado para cortar hierbas en la cl¨ªnica de Bi Mwanahija Mzee en Zanz¨ªbar, Tanzania, 31 de enero de 2019.NICKY MORAN WOO (REUTERS)P¨¢ginas gastadas del Cor¨¢n utilizadas para otorgar bendiciones en la cl¨ªnica del curandero tradicional Haji Mrisho, en la aldea de Jambiani, Zanz¨ªbar, Tanzania, 8 de agosto de 2018.NICKY MORAN WOO (REUTERS)
