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Las fronteras invisibles de Madrid

En ocasiones doblar una esquina en Madrid supone cruzar una frontera de extrema desigualdad. Las secciones censales son ��reas donde residen unos 1.500 vecinos, el nivel geogr��fico de an��lisis de renta m��s peque?o que conocemos. Ahora sabemos que de una avenida a otra se esconden realidades tan distintas como que unas cuentan con el doble o triple de renta que las otras

David Exp��sito Kike Para

Madrid - 03 oct 2019 - 16:07CEST

Fachada de un edificio en el paseo Quince de Mayo, en Carabanchel Alto. Los que viven a lo largo de esta avenida tienen una renta por persona de 9.116 euros y de 22.049 por hogar. En contraste, los vecinos de un poco m��s all��, los de la calle Antonio L��pez, estando en el mismo barrio, compartiendo el mismo pasado y la misma clase obrera de Carabanchel Bajo, les doblan en ingresos. La renta por persona es de 18.481 euros, seg��n datos del Instituto Nacional de Estad��stica. — Fachada de un edificio en el paseo Quince de Mayo, en Carabanchel Alto. Los que viven a lo largo de esta avenida tienen una renta por persona de 9.116 euros y de 22.049 por hogar. En contraste, los vecinos de un poco m��s all��, los de la calle Antonio L��pez, estando en el mismo barrio, compartiendo el mismo pasado y la misma clase obrera de Carabanchel Bajo, les doblan en ingresos. La renta por persona es de 18.481 euros, seg��n datos del Instituto Nacional de Estad��stica.Kike Para

Clientes desayunan en el bar La Taurina, en el coraz��n del barrio de La Ventilla, en el distrito de Tetu��n, cerca de las Cuatro Torres. La Ventilla, con 7.995 euros de renta media por persona, es uno de los barrios m��s pobres de Madrid y Espa?a. — Clientes desayunan en el bar La Taurina, en el coraz��n del barrio de La Ventilla, en el distrito de Tetu��n, cerca de las Cuatro Torres. La Ventilla, con 7.995 euros de renta media por persona, es uno de los barrios m��s pobres de Madrid y Espa?a.David Exp��sito

La avenida Antonio L��pez, este martes. Esta calle se divide en dos tramos continuados y, para quien tenga ah�� una propiedad, todo son buenas noticias. El mejor tramo de ocio de Madrid R��o discurre en paralelo, tienen a mano un centro comercial llamado Plaza R��o 2, y cuentan con la cercan��a del Matadero de Madrid, un antiguo degolladero de animales destinado ahora a la cultura. — La avenida Antonio L��pez, este martes. Esta calle se divide en dos tramos continuados y, para quien tenga ah�� una propiedad, todo son buenas noticias. El mejor tramo de ocio de Madrid R��o discurre en paralelo, tienen a mano un centro comercial llamado Plaza R��o 2, y cuentan con la cercan��a del Matadero de Madrid, un antiguo degolladero de animales destinado ahora a la cultura.Kike Para

Una pareja que vive en las chabolas camina por una zona de 'parking' con un carro de chatarra, frente a las Cuatro Torres del paseo de la Castellana. Son los m��s pobres de los pobres y ni siquiera figuran en el mapa de la renta del INE. — Una pareja que vive en las chabolas camina por una zona de 'parking' con un carro de chatarra, frente a las Cuatro Torres del paseo de la Castellana. Son los m��s pobres de los pobres y ni siquiera figuran en el mapa de la renta del INE.David Exp��sito

Vicente Hern��ndez, en su Bar Tapakubos, en el Paseo Quince de Mayo, en Carabanchel Alto. Las obras durante a?os de la M-30, la demolici��n del Calder��n y el contrapeso que ha ejercido Madrid R��o en de las calles aleda?as, donde se ha abierto un Madrid m��s verde y gentil con el ciudadano, ha levantado un muro invisible alrededor de esta avenida, cuyo esplendor emite sus ��ltimos destellos desde el pasado. — Vicente Hern��ndez, en su Bar Tapakubos, en el Paseo Quince de Mayo, en Carabanchel Alto. Las obras durante a?os de la M-30, la demolici��n del Calder��n y el contrapeso que ha ejercido Madrid R��o en de las calles aleda?as, donde se ha abierto un Madrid m��s verde y gentil con el ciudadano, ha levantado un muro invisible alrededor de esta avenida, cuyo esplendor emite sus ��ltimos destellos desde el pasado.Kike Para

Trabajadores llegan a las oficinas de las Cuatro Torres, este mi��rcoles por la ma?ana, en el paseo de la Castellana. Pronto se unir�� un quinto rascacielos, cuando concluya la obra de la Torre Caleido. — Trabajadores llegan a las oficinas de las Cuatro Torres, este mi��rcoles por la ma?ana, en el paseo de la Castellana. Pronto se unir�� un quinto rascacielos, cuando concluya la obra de la Torre Caleido.David Exp��sito

Vista del centro comercial Plaza Rio 2 de la calle Antonio L��pez, en su parte del distrito de Usera, construido a imagen y semejanza del opulento lugar de compras de Alcobendas. — Vista del centro comercial Plaza Rio 2 de la calle Antonio L��pez, en su parte del distrito de Usera, construido a imagen y semejanza del opulento lugar de compras de Alcobendas.Kike Para

Un hombre camina por un poblado chabolista junto a las v��as del tren en Chamart��n, cerca de las Cuatro Torres del distrito financiero de Madrid. Desde lo alto de las torres la vista de los tejados de Madrid es bastante uniforme. Sin embargo, a ras de suelo el contraste es salvaje. — Un hombre camina por un poblado chabolista junto a las v��as del tren en Chamart��n, cerca de las Cuatro Torres del distrito financiero de Madrid. Desde lo alto de las torres la vista de los tejados de Madrid es bastante uniforme. Sin embargo, a ras de suelo el contraste es salvaje.David Exp��sito

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