La aniquilaci¨®n contin¨²a

El s¨¢bado 4 de mayo de 2019, poco despu¨¦s de que terminara la reuni¨®n que el Consejo Ind¨ªgena y Popular de Guerrero Emiliano Zapata (CIPOG-EZ) llevara a cabo en Chilpancingo, Guerrero, Jos¨¦ Lucio Bartolo y Modesto Verales Sebasti¨¢n, defensores del territorio y la cultura, promotores de la organizaci¨®n apenas mencionada y del Consejo Nacional Ind¨ªgena, abordaron el Chevrolet Cobalt 2007 que los hab¨ªa llevado hasta la capital de su estado. Mientras circulaban de regreso hacia sus comunidades, donde luchaban por la autonom¨ªa y hac¨ªan frente a los grupos criminales con los que se han coludido todos los poderes del Estado, fueron alcanzados por un par de camionetas. As¨ª fue como llegaron al bulevard Eucaria Apreza: siendo perseguidos por los sicarios que, poco despu¨¦s, abrieron fuego y los asesinaron en Chilapa. Su delito, el que los puso ante la muerte, fue el siguiente: plantar cara a la siembra de la amapola, negocio en el que se ha obligado, por medio del terror, la violencia y el abandono del gobierno, a participar a cientos de miles de personas en el campo mexicano.

¡ªLa amapola, que lleg¨® a Sinaloa en los barcos que ven¨ªan de China, viaj¨® desde el norte de nuestro pa¨ªs hasta Guerrero en 1968. A partir de entonces, esa flor, originaria de Asia Central, fue comi¨¦ndose las hect¨¢reas en las que antes se sembraban, fundamentalmente, los cuatro componentes de la milpa: ma¨ªz, frijol, calabaza y chile. Durante los siguientes cincuenta a?os, su cultivo, regado por las balas de los c¨¢rteles, por la corrupci¨®n de los poderes civiles y militares y por la sangre de quienes se le opon¨ªan, sustituy¨® muchos otros plant¨ªos y creci¨® de tal forma que hoy, seg¨²n datos de la ONU, Guerrero le disputa a Afganist¨¢n ser el primer productor mundial de amapola, con cerca de 16.000 hect¨¢reas cultivadas, as¨ª como con mil cuatrocientas comunidades dependientes de un negocio cuyos precios, para colmo, han ca¨ªdo abruptamente durante los ¨²ltimos dos a?os: como los maquiladores, los amapoleros empiezan a retirarse, dejando tras de s¨ª miles de campesinos pauperizados¡ª.

El lunes 10 de junio de 2019, Jos¨¦ Luis ?lvarez Flores, quien hab¨ªa logrado algo sorprendente, conseguir que una parte de la selva del sur de Tabasco fuera declarada santuario del mono saraguato, asisti¨® a una reuni¨®n de trabajo en el norte de Chiapas. Tras aquella reuni¨®n, en la que se discutieron diversas estrategias de defensa y conservaci¨®n de los bosques y las selvas mexicanas, ?lvarez Flores decidi¨® adelantar su regreso a casa. Una hora despu¨¦s, sin embargo, el ambientalista tabasque?o fue sorprendido en mitad de un p¨¢ramo y asesinado de cinco balazos. Su cuerpo fue encontrado en el ejido Calatrava del municipio de Palenque, junto con varias amenazas: unas estaban dirigidas contra su familia, otras contra el resto de los miembros de la Unidad de Manejo Ambiental de Tabasco. D¨ªas antes, ?lvarez Flores hab¨ªa denunciado que, en las cerca de 350 hect¨¢reas de las que se encargaba, no s¨®lo deb¨ªa hacer frente a traficantes de maderas preciosas, cazadores furtivos y narcos, tambi¨¦n deb¨ªa enfrentar la extracci¨®n ilegal de arenas del r¨ªo Usumacinta. Su delito, el que lo llev¨® ante la muerte, fue plantar cara al ¨²ltimo c¨¢rtel de nuestro pa¨ªs, el arenero, y hacerlo, para colmo, esperando la protecci¨®n de un gobierno que ha decidido ahorrar en temas como este: salvaguardar la vida de sus ciudadanos en peligro evidente y declarado.

¡ªDurante los ¨²ltimos cinco a?os, la Procuradur¨ªa Federal de Protecci¨®n al Medio Ambiente tuvo conocimiento de 104 casos de explotaci¨®n ilegal de arena en nuestro pa¨ªs, todos los cuales arrasaron territorios, ejidos, comunidades, zonas protegidas y ecosistemas enteros. Convertida en el segundo recurso natural de mayor demanda en nuestro planeta, seg¨²n el Programa para el Medio Ambiente de la ONU, el consumo mundial de arena es de 42 mil millones de toneladas: ocho veces mayor que el consumo de hidrocarburos. Ahora bien, como con los hidrocarburos, entre las arenas hay clases. Y las de mejor calidad, las que mayor demanda tienen en la industria de la construcci¨®n, en la del turismo y en la de la belleza, siempre a consecuencia de su composici¨®n silica cuarzosa, se encuentran en los lechos de los r¨ªos y de los lagos, as¨ª como en el fondo de los manglares y en las zonas costeras. Pero pongamos un ejemplo: un metro c¨²bico de arena extra¨ªda de manera ilegal en el r¨ªo Usumacinta, multiplica su valor en el mercado hasta por doce. Los ambientalistas mexicanos est¨¢n muriendo, tambi¨¦n, en nombre del concreto, las playas privadas de los spas y las mascarillas para las arrugas¡ª.

El viernes 19 de julio de 2019, Zenaida Pulido Lombera se present¨® ante las autoridades del estado de Michoac¨¢n, para denunciar que hab¨ªa vuelto a recibir amenazas de muerte. Tras salir de las oficinas en las que, adem¨¢s de dejar constancia del peligro que corr¨ªa, denunci¨® a aquellos que consideraba eran los culpables de la desaparici¨®n de su hermano, Pulido Lombera abord¨®, acompa?ada de su esposo, el autom¨®vil que deb¨ªa llevarlos a su casa. Minutos despu¨¦s, sobre la carretera que va de Huahua a Pichilinguillo, el matrimonio fue alcanzado por un convoy que, apenas verlos, abri¨® fuego contra ellos. Apenas unas horas despu¨¦s, los dem¨¢s miembros de Familiares Caminando por la Justicia, organizaci¨®n dedicada a la b¨²squeda de desaparecidos, denunciaron que el asesinato de la activista nahua era resultado de la b¨²squeda de su hermano, pero tambi¨¦n del trabajo que hab¨ªa hecho con muchos otros familiares de desaparecidos, quienes no se hab¨ªan atrevido a hablar hasta que la conocieron, as¨ª como de la organizaci¨®n de la caravana de b¨²squeda que recorri¨® Michoac¨¢n entre el 28 de abril y el 11 de mayo. Su delito, el que la coloc¨® frente a la muerte, fue buscar, en el silencio de la desesperaci¨®n, las respuestas que curaran el desamparo, enfrent¨¢ndose, al mismo tiempo, a los due?os de la violencia f¨ªsica ileg¨ªtima y exigi¨¦ndole, a los supuestos due?os de la violencia f¨ªsica leg¨ªtima, algo que en nuestro pa¨ªs se ha convertido en un imposible: que hicieran su trabajo.

¡ªHace varios meses, el gobierno mexicano reconoci¨® haber encontrado cerca de 3.000 fosas clandestinas, en las cuales hay evidencias para contar poco m¨¢s de 5.000 cuerpos (las cifras no est¨¢n cerradas pues se trata, en palabras de la presidenta de la Comisi¨®n Nacional de B¨²squeda de Personas, Karla Quintana, de n¨²meros din¨¢micos, es decir, en constante revisi¨®n). 3.000 fosas clandestinas, 5.000 cuerpos: esta es la radiograf¨ªa de nuestra fractura m¨¢s profunda, una fractura que no est¨¢ lista para soldar ni, a¨²n menos, para sanar, pues adem¨¢s yace recubierta de desgarres, de m¨²sculos deshechos: Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n, inform¨® hace apenas mes y medio que M¨¦xico cuenta 55.000 seres humanos (otra vez, en cifras din¨¢micas) de los que nadie sabe nada o casi nada. La piel, por supuesto, est¨¢ deshecha y supurando: la acuchill¨® el crimen organizado, la infect¨® la corrupci¨®n y el contubernio de los cuerpos policiales y militares y la acab¨® de pudrir la ineptitud, cuando no la complicidad, de las autoridades pol¨ªticas de todos los niveles de gobierno¡ª.

Me sent¨¦ a escribir este art¨ªculo convencido de que escribir¨ªa sobre el asesinato de Homero G¨®mez Gonz¨¢lez, ambientalista ultimado el 14 de enero de 2020. Quer¨ªa demostrar que, en M¨¦xico, defender a una mariposa se ha convertido en un delito penado con la muerte, por aquellos que son los ¨²nicos que hoy juzgan en nuestro territorio: los intereses privados, sean estos legales o ilegales. As¨ª fue como volv¨ª a ver la imagen que nos evidencia desde hace tanto: aqu¨ª, en nuestro pa¨ªs, en el siglo XXI, se muere por defender un insecto, por defender las milpas, por defender la arena, por defender el dolor, por defender la vida.

Y es que, entre el asesinato de Zenaida Pulido Lombera, el 19 de julio de 2019, y el de Homero G¨®mez Gonz¨¢lez, el 14 de enero de 2020, fueron ultimados otros ocho defensores del territorio, la cultura y el medio ambiente. Y entre el 14 de enero y la publicaci¨®n de este art¨ªculo, fue ultimado Ra¨²l Hern¨¢ndez, tambi¨¦n defensor de las mariposas, tambi¨¦n enemigo jurado de la tala ilegal.

Habitamos un pa¨ªs en el que la repetici¨®n de la tragedia desnuda la voluntad de olvido y desaparici¨®n del necrocapitalismo, con la impunidad que este impone, con la incapacidad que demanda de sus gobiernos, sean del partido que sean.

M¨¦xico, un pa¨ªs en donde incluso el duelo est¨¢ vedado, pues apenas da comienzo el funeral, toca hablar de un nuevo muerto.