Christian Louboutin convertir¨¢ M¨®naco en Bollywood
El famoso zapatero ha sido el elegido para sustituir a Karl Lagerfeld como director art¨ªstico del Baile de la Rosa, la gran fiesta de Carolina de M¨®naco
En la peculiar monarqu¨ªa monegasca la vida social prima en muchas ocasiones por encima de otras cuestiones m¨¢s importantes. Y es que el Principado sobrevive entre otras cosas por sus fiestas, sus glamur y el deseo de sus habitantes de ser vistos como si la exposici¨®n medi¨¢tica fuera signo de triunfo. Una de las citas m¨¢s importante del a?o es el llamado Baile de la Rosa, que se celebra con la llegada de la primavera, en el que Carolina de M¨®naco ejerce de anfitriona y al que asiste toda la familia Grimaldi. En los ¨²ltimos a?os el gran amigo de la princesa Karl Lagerfeld ha ejercido de director art¨ªstico en la cita pero con su fallecimiento, del que este mi¨¦rcoles se cumple un a?o, se ha producido un relevo obligado. Para sustituirlo, Carolina de M¨®naco ha elegido al famoso zapatero Christian Louboutin.
Creado por la princesa Grace de M¨®naco en 1954, el Baile de la Rosa es tambi¨¦n una cena para recaudar fondos destinados a proyectos solidarios. Este a?o el evento social tendr¨¢ lugar el 21 de marzo en el Sal¨®n de las Estrellas del Sporting Montecarlo. Louboutin ha elegido un tema muy espec¨ªfico para esta edici¨®n 2020: India. Por lo tanto, toda la noche se celebrar¨¢ bajo el signo de Bollywood.
La familia monegasca y Karl Lagerfeld siempre han estado muy unidos. Carolina de M¨®naco conoci¨® al dise?ador con 16 a?os: "Fue en Saint-Sulpice, en el hermoso apartamento art deco de Karl. Me ha influido y enriquecido. Ha sido fundamental en mi vida, eso es seguro, pero no debo ser la ¨²nica en decir eso ", dijo en las p¨¢ginas de la revista Vogue en diciembre de 2016.
Al morir el dise?ador, la princesa de Hannover y de M¨®naco rompi¨® su habitual silencio en los medios de comunicaci¨®n para hablar de su amigo. Lo hizo en la revista francesa Point de Vue. "Est¨¢bamos muy unidos. Karl era como un miembro m¨¢s de mi familia. Todos sentimos la muerte de Karl como un luto familiar, a mis hijos les afect¨® mucho. Le conoc¨ªan desde que nacieron, ¨¦l estuvo en casa cuando ellos nacieron", relat¨®. Y a?adi¨®: "He pasado m¨¢s a?os con ¨¦l que con muchos miembros de mi familia. Solo mi ni?era me conoc¨ªa igual de bien".
¡°Es muy dif¨ªcil describir qu¨¦ era lo que nos un¨ªa, no se puede definir con palabras, se quedan cortas. Ten¨ªamos el mismo sentido del humor y nos hac¨ªan re¨ªr las mismas cosas. Llegamos a conocernos muy bien, incluso desarrollamos nuestros propios c¨®digos", afirm¨® la princesa.
¡°En M¨®naco, Karl y yo hac¨ªamos muchas actividades. Almuerzos a bordo de un barco, en la playa¡ Siempre estaba preparado para lo inesperado. Me llamaba y me preguntaba: ¡®?Qu¨¦ est¨¢s haciendo?", recuerda la hija de Rainiero, "y al poco tiempo se presentaba en el lugar en el que yo estuviera".
Carolina de M¨®naco desvel¨® tambi¨¦n c¨®mo el dise?ador la ayud¨® a crecer personalmente: "Karl me ense?¨® a no tener miedo de explorar otros territorios y a cuestionarme todo, a no tomarse en serio a uno mismo". En cambio, revela una inesperada curiosidad. "Karl nunca me aconsej¨® en cuestiones de moda. A veces le preguntaba su opini¨®n sobre un vestido u otro, pero nunca se deten¨ªa en eso. Era un hombre del Renacimiento que se proyectaba sin cesar hacia el futuro, que abrazaba la modernidad sin olvidar nada del pasado".
El a?o pasado, el Baile de la Rosa rindi¨® homenaje a Karl Lagerfeld con una decoraci¨®n de la Riviera que sumergi¨® a los invitados en la d¨¦cada de 1950. Este a?o se espera la presencia de 900 invitados en un ambiente de Bollywood.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.