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Una casa rural, moderna y responsable Esta vivienda se abre y se cierra al campo mallorqu¨ªn. Se protege del sol, busca el aire, recicla el agua de lluvia para cisternas y riego y se acerca al paisaje actualizando la l¨®gica de la tradici¨®n. Vidrio y ca?izo para acercarse al exterior. Adem¨¢s de permitir que el paisaje mallorqu¨ªn entre en la casa, los grandes ventanales de vidrio que flanquean el sal¨®n-comedor pueden recogerse y convertir la zona de estar en un espacio abierto a dos terrazas de cemento mezclado con ¨¢rido local y protegidas por ca?izo, un material tradicional en la zona que distancia el sol y que los arquitectos transformaron en p¨¦rgola. Junto a uno de esos salientes de hormig¨®n est¨¢ la piscina. El otro, elevado y convertido en mirador, oculta el aljibe donde se recicla el agua de lluvia.
Esta vivienda amplia y escueta cambia con las estaciones. El paisaje, frondoso en invierno y pajizo en verano, se cuela en el interior por las grandes cristaleras y, al rev¨¦s, estas se retiran para exponer la casa al viento cuando llega el verano. Sencilla y c¨®moda, actualiza la tradici¨®n mallorquina de la teja, el ca?izo o el mortero r¨²stico. Jos¨¦ Hevia Los dormitorios est¨¢n abiertos a norte y sur para facilitar su ventilaci¨®n. La butaca de madera es de La Pecera. Sus autores, los arquitectos del estudio Ohlab Paloma Hernaiz y Jaime Oliver (45 a?os), se conocieron en la Universidad de Columbia y hoy trabajan en Palma. Construida en un campo de olivos, la casa es espacialmente un cruce de rect¨¢ngulos: un prisma con tres dormitorios, ba?os y la cocina atravesado por un rect¨¢ngulo de vidrio apoyado en hormig¨®n. Jos¨¦ Hevia Casi todo el mobiliario de la casa ha sido adquirido en La Pecera, un negocio de muebles artesanos de Palma que busca actualizar la tradici¨®n mediterr¨¢nea local. Las butacas junto a la chimenea, al igual que las sillas del comedor, son el modelo Robusta, fabricado en enea. El taburete Saturn tambi¨¦n lo construye y comercializa La Pecera. La mesa es de Ethnicraft. En la terraza, la mecedora est¨¢ tapizada con tela de lenguas, un ikat t¨ªpico mallorqu¨ªn que crea estampados mediante la t¨¦cnica de te?ido por reserva.
Se trata de una vivienda kil¨®metro cero construida con materiales locales ¡ªcomo la piedra de mar¨¦s¡ª, amueblada con dise?os de artesanos del colectivo Made in Mallorca y coronada por tejas cer¨¢micas y voladizos de ca?izo para lidiar con el sol. Un aljibe recoge el agua de lluvia, que se recicla en las cisternas y el riego, y las habitaciones tienen dos ventanas para favorecer la ventilaci¨®n. Sostenibilidad, l¨®gica y tradici¨®n mediterr¨¢nea puesta al d¨ªa. Jos¨¦ Hevia En el centro de la isla, las pacas de heno recogidas convierten el campo mallorqu¨ªn en una pieza de land art. Jos¨¦ Hevia El sal¨®n-comedor con vistas a un olivar est¨¢ ordenado alrededor de la chimenea. Sobre esta, el jarr¨®n es de Paparkone y el grabado de Paz Alomar. Todo el mobiliario es de La Pecera. Y las l¨¢mparas, de Contain. En la p¨¢gina siguiente, los ba?os combinan alicatado blanco para las zonas h¨²medas con roble en el suelo y en el mueble que soporta los lavabos, que fueron adquiridos en Huguet. Jos¨¦ Hevia El ba?o de la casa, decorado en tonos blancos, potencia la luz. Jos¨¦ Hevia Construida con madera de fresno y encimera de m¨¢rmol envejecido, la cocina est¨¢ organizada en torno a una isla de trabajo central y es un dise?o de los arquitectos de Ohlab para Crea Cuina. La estanter¨ªa es de acero inoxidable y las baldosas hidr¨¢ulicas son de la mallorquina Huguet. Jos¨¦ Hevia El paisajismo, firmado por Salvador Ca?¨ªs, busca minimizar el consumo de agua, evitar la erosi¨®n del terreno y disfrutar de una vegetaci¨®n colorida todo el a?o. Olivos, romero, lavanda, salvia, palmitos y cipreses estrat¨¦gicamente colocados buscan refrescar el lugar. Jos¨¦ Hevia La piscina est¨¢ construida con piedra de mar¨¦s. Jos¨¦ Hevia