Cultura popular en formato mini: 10 minutos (o incluso menos) que lo cambiaron todo
Hay ocasiones en que lo breve es doblemente bueno. Estas obras completas y fragmentos que solo exigen un ratito de nuestro tiempo son la prueba de que el tama?o (casi) nunca importa
El 10 es un n¨²mero m¨¢gico. Sonoro y perfecto. Nos remite a puntuaciones m¨¢ximas, gestas deportivas o aniversarios redondos. En la cultura popular, hay ocasiones en las que 10 minutos lo son todo: la raci¨®n perfecta, la dosis id¨®nea para que lo que vemos, escuchamos o leemos se nos quede grabado en la memoria. Y a veces no hace falta m¨¢s para que nos quedemos con la boca abierta. Aqu¨ª van algunos cl¨¢sicos que se pueden descubrir (o revisar) mientras te tomas una lata de cerveza (en formato mini, por supuesto) o esperas a que se cueza la pasta...
La escalera hacia el cielo que parec¨ªa demasiado larga
Cuando Led Zeppelin sacaron Stairway to Heaven en 1971 todos les dijeron que era demasiado larga. ?Una canci¨®n de cerca de 10 minutos convertida en un hit? Imposible. Hoy la escuchamos y se nos hace corta. As¨ª es de buena la condenada. La jugada la han repetido muchos otros despu¨¦s, como Guns N' Roses en la muy muy ¨¦pica November Rain o el campe¨®n del exceso Kanye West en su Runaway, consiguiendo el aplauso de la cr¨ªtica. Otra aficionada a los temas larguitos pero que no llegan a cansar es Lana del Rey, que ejecuta la jugada con maestr¨ªa en Venice Bitch. Antes de empezar piensas que 9:36 es demasiado y la acabas pidiendo m¨¢s. Menuda jefa.
Cap¨ªtulos de series para darse un atrac¨®n
Hace unos a?os, era habitual ponerse delante del televisor en Espa?a para ver un cap¨ªtulo de una serie a las 10 de la noche y acabar a las tantas de la madrugada. Y no, no era por los anuncios (que tambi¨¦n) sino por las dos horas largas que duraba el cap¨ªtulo. Los nuevos modelos de consumo de series lo han cambiado todo y ahora hay genialidades como Comedian in cars getting coffee (Netflix), en la que Jerry Seinfeld y su invitado de turno, de Ricky Gervais a Barack Obama se lo pasan pipa entre coches antiguos, diners de carretera y mucho cachondeo en pildoritas de poco m¨¢s de 10 minutos.
Otro ejemplo de serie pensada para consumir entre parada y parada de metro es State of the Union (HBO) en la que Nick Hornby ¨Cel escritor de Alta Fidelidad¨C nos cuenta una relaci¨®n de pareja en 10 escenas de 10 minutos.
La conversaci¨®n definitiva sobre hamburguesas
En poco m¨¢s de 10 minutos Vicent Vega (John Travolta) y Jules Winnfield (Samuel L. Jackson) repasan todo el cat¨¢logo de hamburguesas de McDonald's, debaten sobre la conveniencia o no de echar mayonesa a las patatas y, de paso, recuperan un malet¨ªn con algo valioso que nunca llegamos a descubrir y, s¨ª, pegan algunos tiros. Despu¨¦s de esta secuencia de Pulp Fiction muchos no volvimos a ser los mismos.
Parecido efecto tiene la persecuci¨®n de Blade Runner que acaba con el famoso mon¨®logo ¡°Yo he visto cosas que vosotros no creer¨ªais...¡± pronunciado por Roy Batty (Rutger Hauer): otros 10 minutos de gloria. Lo que dura la primera escena de En busca del arca perdida, mientras nos bebemos una Heineken? MINI, nos sirve de presentaci¨®n perfecta del arque¨®logo m¨¢s carism¨¢tico de la historia del cine. Jones, Indiana Jones.
Relatos que te cambian de arriba abajo
El reverso luminoso de fragmentos de mil p¨¢ginas como La monta?a m¨¢gica o It son esos cuentos de escritores reputados que se leen mientras se espera al autob¨²s. Continuidad de los parques de Julio Cort¨¢zar no exige m¨¢s de 10 minutos de atenci¨®n plena para disfrutar de una historia que admite varias interpretaciones. Lo mismo pasa con Bolsas de Raymond Carver que, en un suspiro, disecciona un (breve) encuentro entre padre e hijo. Y nunca se borran de la memoria.
El d¨ªa que vi ¡®Thriller¡¯
Antes hab¨ªa videoclips que te cambiaban la vida. Thriller de Michael Jackson era uno de ellos. Poco m¨¢s de 10 minutos que marcaron a una generaci¨®n entera cuando se estren¨® en 1982 a golpe de zombies bailarines. Jacko repiti¨® la jugada del videoclip largo con Bad o Black and White y todos los que desde entonces han querido embelesar a la audiencia se han subido al carro. M.I.A se marc¨® un v¨ªdeo brutal en el que los pelirrojos eran los apestados de nuestra sociedad en su Born Free y David Bowie se despidi¨® de nuestro planeta con el tremebundo videoclip de Blackstar. Dos obras maestras de 10 minutitos cada una.
Grandes maestros del cine en formato corto
Pedro Almod¨®var acaba de presentar su ¨²ltima pel¨ªcula en el Festival de Venecia. Pero no es un largo, sino un mediometraje con Tilda Swinton. Otros genios del celuloide han ido m¨¢s lejos, como Paolo Sorrentino que grab¨® un improbable encuentro entre el Papa y la Reina de Inglaterra en pleno confinamiento en una fantas¨ªa de la serie Hecho en casa que no llega a los 10 minutos. David Lynch tambi¨¦n regres¨® al formato corto para interrogar a un mono sospechoso de asesinato en What did Jack do? ?Qu¨¦ esperabais del tipo que a¨²n nos tiene pensando qui¨¦n se carg¨® a Laura Palmer?
Novelas gr¨¢ficas 'indies' cortas
Hay historias contadas en formato de c¨®mic que se quedan para siempre con nosotros. En eso, los autores underground norteamericanos son aut¨¦nticos maestros. Imposible no sentir una punzada en el coraz¨®n con Caricatura de Daniel Clowes, un cuento de amor entre perdedores, o Son¨¢mbulo de Adrian Tomine, que explora las relaciones personales a la luz de las tiendas abiertas de madrugada en mitad de ninguna parte. No superan las 10 p¨¢ginas y se leen en un abrir y cerrar de ojos pero dejan poso. Vaya si lo dejan.
Y para disfrutar (a¨²n m¨¢s) de todo esto...
Una gran acompa?ante en peque?o formato para todos estos placeres que se disfrutan en 10 minutos es la nueva Heineken? MINI, que apuesta por los 25 centilitros como medida ideal para acompa?ar ese cap¨ªtulo, relato, esa escena de peli gloriosa que ya nos sabemos de memoria. Tan solo hay que tener un break para abrirnos una de estas latas con todo el sabor de Heineken? y la calidad de siempre. Y apurar los ¨²ltimos tragos cuando Jules de Pulp Fiction grita eso de ¡°?Y sabr¨¢s que mi nombre es Yav¨¦ cuando mi venganza caiga sobre ti!¡±.
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