Entre 1937 y 1939, el ruinoso monasterio de Oia (Pontevedra) sirvi¨® de campo de concentraci¨®n para los represaliados por el franquismo. En sus muros, los presos dibujaron a l¨¢piz estampas de todo tipo, muchas de ellas b¨¦licas.?SCAR CORRALLa empresa propietaria del cenobio cisterciense, la naviera Vasco Gallega de Consignaciones, descubri¨® los grafitos durante unas obras acometidas para convertirlo en un hotel.?SCAR CORRALSobre los deteriorados estucos, corro¨ªdos por la salinidad de la arena de playa con la que se constru¨ªan, muchos hombres dibujaban calendarios con la cuenta atr¨¢s de su reclusi¨®n.?SCAR CORRALLos presos dejaban constancia de su paso por Oia. En alguna de las notas, la fecha de salida tiene una caligraf¨ªa distinta, ya que la apuntaban sus compa?eros porque al preso en cuesti¨®n no le dio tiempo a hacerlo.?SCAR CORRALOtros trazaban el mapa de c¨®mo llegaron hasta este campo de concentraci¨®n improvisado cerca de Vigo.?SCAR CORRALEntre los dibujos abundan los banquetes pantagru¨¦licos y las im¨¢genes de carne, como esta cabeza de cochinillo. En Oia los presos sobreviv¨ªan apenas con lo que les daban los mandos franquistas (muchas veces una casta?a hervida) y se alimentaban de algas o moluscos que encontraban en la playa cuando les dejaban bajar a lavarse.?SCAR CORRALTambi¨¦n se han encontrado im¨¢genes de otro tipo de fantas¨ªas como veloces b¨®lidos, centuriones romanos o sinuosos cuerpos de mujer.?SCAR CORRALAlgunos de los grafitos destilan miedo o desesperaci¨®n, otros son m¨¢s fantasiosos, unos tienen gran talento art¨ªstico y otros son m¨¢s sencillos, como este 'Paisaje id¨ªlico' bajo el que transcurre un duelo de ¡®western¡¯.El hallazgo del centenar de grafitos nutre una exposici¨®n en el monasterio pontevedr¨¦s.?SCAR CORRALA la espera de ser convertido en un hotel, en el monasterio de Oia se celebran visitas guiadas, que ahora se completan con esta exposici¨®n de dibujos que los presos de la Guerra Civil dejaron sobre sus muros de 800 a?os.?SCAR CORRAL
