13 fotosCuando el motor del bote se par¨®Afua es una mujer costamarfile?a que fue rescatada de una patera en el Mediterr¨¢neo por la ONG Proactiva Open Arms. Ella y otros 44 hombres se zafaron de la muerte en el ¨²ltimo momentoPablo ToscoA bordo del Open Arms - 16 feb 2021 - 07:54CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceEina y Dani, voluntarios de la ONG Open Arms, en la cubierta del buque de salvamento Astral. Es viernes, es por la ma?ana y est¨¢n observando una zona del Mediterr¨¢neo central donde hay varias plantas de petroleras libias. El Astral ¡ª velero de salvamento y vigilancia¡ª zarp¨® el 1 de febrero del puerto de Badalona, en Espa?a, en su misi¨®n 81 con una tripulaci¨®n de nueve personas.Pablo Tosco (Angular)Un grupo de 45 migrantes queda a la deriva en aguas internacionales tras haber huido de Libia. Desde 2015, tanto el Astral como el Open Arms ¡ªbuque insignia¡ª han recorrido 100.000 millas y han rescatado a m¨¢s de 61.000 personas. El bote hinchable es avistado por el personal humanitario del Astral.Pablo Tosco (Angular)Se estima que 20.000 personas han muerto ahogadas en el Mediterr¨¢neo desde el a?o 2014 tras intentar llegar a un lugar seguro donde continuar sus vidas. En la imagen, Gaizkane y Xabi, marineros voluntarios de Open Arms, alistan la lancha de rescate con 50 chalecos salvavidas para asistir a las personas migrantes a la deriva.Pablo Tosco (Angular)La mujer que se cubre con una manta t¨¦rmica para protegerse del fr¨ªo y la humedad es Afua, que huy¨® de Costa de Marfil y recorri¨® ?frica subsahariana para buscar una vida digna en Europa. Su relato se reduce a la enumeraci¨®n de la cartograf¨ªa subsahariana: desde Abiy¨¢n a Togo, luego Ben¨ªn. Dice Ghana, Nigeria, N¨ªger, el cruce del desierto y Libia. Alcanza a nombrarlos mientras bebe agua y le da un mordisco a una barrita energ¨¦tica.Pablo Tosco (Angular)Laura coloca la radio a F¨¢tima momentos antes de comenzar a transitar las cinco millas que separan el Astral del bote a la deriva avistado. Previamente, se han calzado los trajes de neopreno, sus aletas, cascos y mascarillas.Pablo Tosco (Angular)Laura comienza a distribuir chalecos salvavidas a las personas migrantes mientras intenta calmaros para reducir el riesgo de que vuelque el bote. En el interior de la fr¨¢gil embarcaci¨®n, la situaci¨®n es cr¨ªtica: el agua llega a las rodillas de quienes van en los laterales; los que permanecen en el centro, la tienen hasta la cintura.Pablo Tosco (Angular)Savaas, el capit¨¢n del barco de rescate Astral, intenta comunicarse con el Centro de Operaciones para informar sobre el naufragio del bote y solicitar su traslado. El Astral ¡ªen misi¨®n de monitoreo¡ª no est¨¢ habilitado a subir personas, salvo casos de necesidad extrema como un hundimiento.Pablo Tosco (Angular)Ali, de origen marfile?o se coge a la lancha de rescate; la aver¨ªa del motor ha provocado el naufragio del hinchable en aguas internacionales. Seg¨²n Safa Msehli, portavoz de la Organizaci¨®n Mundial para las Migraciones (OIM), en las ¨²ltimas semanas cerca de 2.000 personas han sido interceptadas en el mar por las autoridades costeras, y devueltas a Libia.Pablo Tosco (Angular)En el interior de la balsa de goma, los rescatistas hallan a 45 migrantes procedentes de Gambia, Costa de Marfil y Guinea. Intentaban huir de Libia, pero llevan tres d¨ªas a la deriva, sin agua ni comida. Europa considera a Tr¨ªpoli un puerto m¨¢s, un puerto seguro. Y Tr¨ªpoli es, no obstante, la capital de un pa¨ªs que arrastra una guerra intestina desde la ca¨ªda del r¨¦gimen de Muhamar Gadafi.Pablo Tosco (Angular)Durante horas, el barco de rescate Astral y la lancha de rescate mantienen la guardia junto a las 45 personas en el bote a la deriva, a la espera de que llegue la Guardia Costera Italiana.Pablo Tosco (Angular)Afua, en el centro con un gorro y manta t¨¦rmica, rodeada de las otras 44 personas de Gambia, Costa de Marfil y Guinea rescatadas a bordo de una balsa hinchable por el buque Astral. El motor del bote se par¨® al atravesar las plantas petroleras y las mareas y los vientos hicieron el resto. Sortearon la Guardia Costera Libia y esperaron que las mismas fuerzas intangibles no los devolviera, ni los condenara. Pero pasaron tres d¨ªas a la deriva y la desesperaci¨®n se apoder¨® de ellos. Pablo Tosco (Angular)Anochece cuando la Guardia Costera Italiana recoge a los rescatados para trasladarlas a Lampedusa, Italia. Sus tripulantes, enfundados en Equipos de Protecci¨®n Personal, realizan la maniobra de traspaso de las personas del bote de goma hacia el barco ante la custodia celosa de ?scar, Laura y F¨¢tima. UPablo Tosco (Angular)Una vez todos arriba, navegan rumbo hacia Lampedusa mientras la tripulaci¨®n del Astral se reagrupa, limpia los chalecos, recarga gasolina de la lancha de rescate y se prepara para seguir asistiendo a las personas migrantes y refugiadas en riesgo en el Mediterr¨¢neo Central. Durante la limpieza, encuentran un listado de contactos, fotos carnet y un dinar libio, abandonados en el bote de goma.Pablo Tosco (Angular)