La lucha contra la poluci��n de la ciudad m��s contaminada de Polonia

De d��a el "smog", la mezcla de contaminaci��n y niebla caracter��stica de esta zona de Polonia lo envuelve todo. De noche, parece que se puede tocar bajo las farolas, como en esta imagen de la estaci��n de trenes de Nowy Targ, a las afueras de la ciudad.Olivia L��pez Bueno

��Todos sab��amos que la calidad del aire era mala, pero no se med��a de manera sistem��tica��, explica Grzegorz Watycha, alcalde de Nowy Targ, que cuenta que meses despu��s de llegar al poder en diciembre de 2014 empez�� las gestiones para instalar una estaci��n de medici��n que sirviera ��para concienciar a los ciudadanos��. ��La situaci��n es delicada��, dice. ��Hay un grupo de vecinos conscientes de lo nocivo que es respirar el aire muy contaminado y otros preocupados por la imagen al exterior de la ciudad. Pero la mayor��a dice que siempre se ha utilizado este tipo de combustible [carb��n y, cada vez menos, aceite] y que no pasaba nada, que es una tradici��n��.Olivia L��pez Bueno

El carb��n que se utiliza para la calefacci��n y el agua caliente en los hogares polacos genera el 50% de la contaminaci��n del pa��s, un porcentaje que en Nowy Targ se eleva hasta el 60% seg��n Sylwester Magiera, asesor de Medio Ambiente de la ciudad. El de la imagen se almacena en el s��tano de la vivienda familiar de Michal Huziar, donde viven ocho personas que utilizan cinco toneladas de carb��n que les dura seis meses y les cuesta unos 2.000 euros. Tienen que alimentar la caldera cada hora.Olivia L��pez Bueno

Lidia Kolodziej, doctora de atenci��n primaria en Nowy Targ, advierte de los efectos nocivos de la contaminaci��n para la salud, que son muchos y afectan en especial a los ni?os. ��Hace 10 a?os me miraban raro, pero ahora hay m��s concienciaci��n��, dice. Las madres, alertadas, le prestan m��s atenci��n y siguen sus recomendaciones. Los mayores, en cambio, les responden que el uso de calderas de carb��n ��siempre ha sido as��, es el olor del invierno y se niegan a aceptar que es un problema��.Olivia L��pez Bueno

Esa negaci��n de la que hablan la doctora y el alcalde se palpa al hablar con algunos mayores en la ciudad, como Maria Sieka, de 73 a?os, propietaria de este quiosco situado en la plaza principal del pueblo. Sieka insiste en que el problema son los ��miles de coches�� y no las calderas. Minimiza adem��s el impacto en la salud. ��Yo tengo 73 a?os y no me preocupa. Tengo asma, pero se vive bien y sigo viva��, dice. ��Hago ejercicio, nado, y tengo siete ni?os��, a?ade para certificar que est�� en forma.Olivia L��pez Bueno

El Ayuntamiento que dirige Watycha financia con hasta 5.000 eslotis (casi 1.100 euros) el cambio de calderas antiguas como la de la imagen por otras m��s eficientes. El programa se complementa con las ayudas del Plan Nacional de Aire Limpio del Gobierno polaco, que a partir de 2022 aumentar�� el porcentaje de cofinanciaci��n para las familias vulnerables hasta el 90% de la inversi��n necesaria para la instalaci��n de nuevas calderas y el aislamiento de viviendas. El Ayuntamiento calcula que hay que sustituir unas 1.500 en la ciudad. En Polonia son m��s de tres millones.Olivia L��pez Bueno

Magdalena Cygan, activista y gestora de Smog Alert Nowy Targ, trabaja para mejorar el aire que respiran ella y sus vecinos. Junto al Ayuntamiento, ella y otros compa?eros han organizado charlas educativas, han desarrollado un sistema de SMS que alerta cada ma?ana de los niveles de contaminaci��n y han reforzado las ecopatrullas que vigilan que los habitantes de Nowy Targ no quemen basura o muebles viejes en sus calderas. A veces se desespera, sobre todo en invierno cuando las chimeneas est��n a tope. Pero en el fondo, asegura que ��tiene esperanza�� de que la situaci��n mejore. ��Pero hace falta tiempo y dinero��, reconoce.Olivia L��pez Bueno

As�� se ve Nowy Targ desde la colina donde se encuentran el hospital y el cementerio municipal. Este 14 de diciembre no fue uno de los d��as peores pero se puede apreciar c��mo el smog engulle la ciudad de tejados a dos aguas. Al fondo, apenas imperceptibles pero a pocos kil��metros, se elevan los Tatras, los montes que forman parte de la cadena de los C��rpatos que separan Eslovaquia y Polonia. Zakopane, el resort de monta?a que quiere ser la capital de invierno de Polonia se encuentra a 23 kil��metrosOlivia L��pez Bueno

Anna Dworakowska, fundadora de Polish Smog Alert, explica con entusiasmo los inicios de esta organizaci��n en 2012 en Cracovia. Eran un peque?o grupo de amigos preocupados ��porque el aire de su ciudad era el peor de Europa�� que empez�� a hacer ruido y alertar del problema en redes sociales. Un efecto ��bola de nieve��, como ella lo describe, los catapult�� al centro del debate p��blico. El Ayuntamiento de Cracovia se vio obligado a tomar medidas y en 2019, gracias a su presi��n, prohibi�� quemar cualquier combustible f��sil. Ahora Polish Smog Alert trabaja a nivel nacional y tiene 52 antenas locales en todo el pa��s.Olivia L��pez Bueno

Piotr Kleczkowski, profesor en la Universidad de Ciencia y Tecnolog��a AGH, escribi�� el primer libro que examin�� la contaminaci��n del pa��s al detalle, seg��n cuenta, y ha analizado c��mo las medidas implantadas en Cracovia han conseguido reducir la poluci��n hasta en un 45%. ��Polonia compite con Bulgaria por el primer puesto en la contaminaci��n. En Bulgaria tienen menos estaciones de medici��n pero las ponen donde hay m��s contaminaci��n. Si se pusiesen m��s, se ver��a que la situaci��n es peor en Polonia��, dice. En lo que s�� es l��der indiscutible en la UE, se?ala, es en los niveles de benzo(a)pireno. El pa��s necesita normas m��s duras que se ejecuten y se controlen mejor, afirma. Pero sobre todo, lo que hace falta es la descarbonizaci��n a trav��s de ��una revoluci��n en la generaci��n de energ��a��.Olivia L��pez Bueno