Una de las pocas secciones que se conservan del muro original de la mezquita de Hassan, en Rabat, original del siglo XII.En un extremo del recinto se levanta el moderno mausoleo de Mohamed V, que, con su estilo magreb¨ª alambicado y repulido, contrasta con la sobriedad y el esp¨ªritu m¨ªnimo del conjunto.Parejas de enamorados que se cobijan tras los pilares, mam¨¢s que dejan explayarse a sus hijos sin complejos y turistas con la botella de agua mineral en mano son algunos de los visitantes asiduos de la mezquita de Hassan II, en Rabat.El alminar de la mezquita de Hassan, en Rabat, tambi¨¦n qued¨® sin concluir tras la muerte del califa Yaqub el-Mansur, el Victorioso, quien orden¨® la construcci¨®n del templo en el siglo XII.M¨¢rmol blanco pulimentado, pluscuamperfectos alicatados de colores y una enorme b¨®veda de caoba con pa?os de pan de oro son algunos de los elementos arquitect¨®nicos m¨¢s destacados del mausoleo de Mohamed V, concebido por el arquitecto vietnamita Vo Toan en los a?os 70 del siglo pasado.Turistas posando en el complejo de la mezquita de Hassan, en Rabat, cuyo mausoleo acoge los sepulcros del rey Mohamed V y de sus hijos, Hassan II y Muley Abdal¨¢.De la mezquita Hassan hoy quedan el alminar truncado y el bosque de columnas que solo sujetan ya el cielo soleado de Rabat; una gran explanada al aire libre, donde el horizonte se dilata y el sol del atardecer juega entre hileras de pilares y columnas, solitarias como centinelas.
