Europa subterr��nea: un viaje por las 20 cuevas m��s sorprendentes del continente

Gruta Azul de Bisevo (Croacia). Esta cueva marina en la costa occidental de la isla croata de Bisevo no es muy grande; sin embargo, quien la visita antes del mediod��a se encuentra con un juego de colores inigualable. Iluminada por el sol a trav��s de un segundo acceso sumergido, el agua del mar resplandece aqu�� con magn��ficos colores que van de un azul oscuro a un luminoso turquesa y envuelven el interior de la cueva en una luz irreal.Alamy Stock Photo

Sima de Laichingen (Alemania). Un mundo encantado en el inframundo. Quien desciende a la sima de Laichingen siente que est�� como en otro planeta, pero a 55 metros bajo la superficie terrestre. En esta larga sima, de nada menos que 1.400 metros de profundidad y la ��nica accesible de Alemania, se pasa por profundos pozos, altos vest��bulos y estrechos pasadizos. En ella se puede ver parcialmente un proceso de karstificaci��n que ya dura cinco millones de a?os y aprender sobre la historia geol��gica de la regi��n. Y al subir, espera un delicioso bizcocho, un caf�� y un museo espeleol��gico.Alamy Stock Photo

Kirkehelleren (Noruega). De los hallazgos arqueol��gicos se desprende que esta llamada ��catedral de roca�� (Kirkehelleren) en la isla noruega de Sanna debi�� de ser un lugar importante de culto y reuni��n hace 10.000 a?os. Hoy, esta gruta de 30 metros de alto no solo es un popular destino tur��stico en Noruega, sino que gracias a su magn��fica ac��stica, acoge cada mes de julio los conciertos del Tr?nafestivalen, el festival de rock m��s septentrional del mundo.Alamy Stock Photo

Melisani (Grecia). En 1953, un terremoto hizo que se derrumbara parte del techo de esta cueva en la isla griega de Cefalonia. Desde entonces los rayos del sol se abren paso a su interior, donde ilumina un bello lago azul que se puede recorrer en barca de remos. Alamy Stock Photo

Javoricko (Rep��blica Checa). ��Cueva encantada��, ��Pabell��n de las 1.000 espigas�� o "Catedral de los titanes�� son algunos de los nombres que los descubridores de la gruta de Javoricko, cerca de la localidad de checa de Olomouc, pusieron a las salas de este palacio subterr��neo de tremendas estalagmitas y estalactitas que parecen desafiar la fuerza de la gravedad en b��vedas de hasta 20 metros de altura. Bajo el tramo visitable se extiende un laberinto de galer��as del que solo se ha explorado una peque?a parte. Alamy Stock Photo

Altamira (Santillana del Mar, Cantabria). A mediados del siglo XIX, un cazador llamado Modesto Cubillas hizo un descubrimiento extraordinario mientras buscaba a su perro perdido: la cueva de Altamira, el primer lugar en el mundo en el que se identific�� la existencia del arte rupestre del Paleol��tico superior. Bisontes, caballos, ciervos, manos y misteriosos signos fueron pintados o grabados durante los milenios en los que la cueva estuvo habitada, en un periodo que va desde hace 35.000 a 13.000 a?os. Quien quiera ver hoy las impresionantes obras de arte de nuestros ancestros deber�� conformarse con una r��plica en la llamada Neocueva: al constatarse que la humedad de la respiraci��n de los visitantes da?aba las pinturas, se restringieron las visitas, y la zona central de la cueva se reprodujo fielmente en otro lugar cerca de all��. Aunque sea una copia, el resultado es impresionante.Alamy Stock Photo

Postojna (Eslovenia). Cuando en el siglo XVII se descubrieron unos extra?os tritones en la cueva de Postojna se crey�� que eran cr��as de drag��n. En realidad, son proteos, anfibios albinos end��micos de este sistema de cavernas de m��s de 24 kil��metros. La entrada a las cuevas est�� bajo el castillo de Predjama, enclavado en la roca. Alamy Stock Photo

Cuevas del Drach (Mallorca). En el subsuelo del municipio de Manacor, cerca de la localidad de Porto Cristo, aguarda un imponente tesoro natural: las cuevas del Drach. En este reino de estalactitas y estalagmitas perfectamente iluminado a 25 metros de profundidad, hace una agradable temperatura de 20 grados. Cuenta con uno de los mayores lagos subterr��neos del mundo y se puede explorar en barca. El momento cl��max de la visita, que dura una hora, es un concierto de m��sica cl��sica que aprovecha la magn��fica ac��stica de la gruta.Alamy Stock Photo

Baradla (Hungr��a). El sistema de galer��as de la cueva de Baradla, de 25 kil��metros, llega hasta Eslovaquia y est�� entre las atracciones naturales m��s famosas de Hungr��a. Algunas zonas se caracterizan por sus enormes y estilizadas estalactitas, mientras que otras las atraviesan r��os y lagos subterr��neos. En ella tambi��n se organizan conciertos de m��sica cl��sica. La gruta se encuentra dentro del parque nacional de Aggtelek, en el extremo norte del pa��s. ATTILA KISBENEDEK (AFP via Getty Images)

Jameos del Agua (Lanzarote, Canarias). A este campo de lava del norte de Lanzarote pr��cticamente nadie le prestaba atenci��n hasta que el artista espa?ol C��sar Manrique lo convirti��, con mucho empe?o, en un aut��ntico im��n tur��stico. Dedic�� todas sus energ��as a acondicionar el complejo subterr��neo de tubos volc��nicos, cuevas y grutas, prepar��ndolo para recibir visitas y albergar eventos; una de las mayores atracciones de estos Jameos del Agua es su lago subterr��neo. Hay que consultar por adelantado el calendario de eventos: en la sala que se mont�� en una gruta volc��nica se organizan regularmente conciertos y espect��culosAlamy Stock Photo

Thrihnukagigur (Islandia). Penetrar en el interior de la Tierra por la boca de un volc��n era solo una fantas��a novelada por Julio Verne, pero ahora es posible vivir la experiencia en primera persona. El lugar no pod��a ser otro que Islandia: el volc��n Thrihnukagigur, de pronunciaci��n casi imposible para los ajenos a este pa��s del ?rtico. Ubicado en las monta?as Azules, una de las regiones volc��nicas m��s activas del pa��s, permanece dormido desde hace 4.000 a?os. Como no muestra indicios de volver a despertar, se puede visitar aprovechando que la lava no rellen�� la parte m��s superficial del volc��n. Una plataforma elevadora desciende a los perplejos visitantes 120 metros desde la boca del cr��ter, donde lavas de vistosos colores acompa?an sus pasos por unas galer��as que parecen sacadas de 'Viaje al centro de la Tierra'.Ragnar Th Sigurdsson rth@arctic-images.com (Getty Images)

Skocjan (Eslovenia). A lo largo de cientos de miles de a?os la lluvia fue disolviendo la piedra caliza y creando un espectacular sistema de grutas. Estalactitas hay pocas, pero el tama?o de las cuevas es tremendo: los vest��bulos subterr��neos tienen una longitud de hasta 300 metros. Tambi��n merecen la pena los alrededores, en cuyos valles, en forma de embudo, viven numerosas especies animales protegidas. El conjunto es patrimonio mundial de la Unesco.Matthew Williams-Ellis (Getty Images/Collection Mix: Sub)

Rouffignac (Francia). En este sistema de cuevas de ocho kil��metros se han conservado m��s de 250 representaciones de bisontes, rinocerontes lanudos y mamuts pintados por un artista de paleol��tico hace unos 15.000 a?os. Fue descubierta hace 500 a?os, de ah�� que algunas de sus pinturas son m��s recientes. Buena parte de la visita subterr��nea se realiza a bordo de un peque?o tren.Alamy Stock Photo

Frasassi (Genga, Italia). El peque?o templo oct��gonal del arquitecto Giuseppe Valadier, construido en el siglo XIX con piedra de travertino y c��pula de plomo, es una de las postales m��s conocidas las cuevas de Frasassi, una red de cavernas k��rsticas en el municipio de Genga, en la regi��n italiana de las Marcas. Quien busque emociones fuertes puede reservar un recorrido de varias horas con espele��logos m��s all�� de la zona abierta a los turistas. En estas excursiones se pasa por escarpadas simas o se gatea por las profundidades de esta gruta. Alamy Stock Photo

Benagil (Algarve, Portugal). La cueva de la playa de Benagil se eleva hacia el cielo a modo de c��pula gigantesca. Una ancha columna de luz solar penetra en el interior a trav��s de una abertura del techo y confiere a las paredes un brillo anaranjado. A esta maravilla natural es posible llegar tanto nadando desde el mar como caminando desde la playa. Tambi��n se puede subir hasta el techo escalando, eso s��, por los abruptos acantilados. Una vez arriba, se goza de unas vistas fant��sticas del Atl��ntico y del paisaje costero en torno a Benagil.Philippe TURPIN (Getty Images/Photononstop RF)

Ispinigoli (Cerde?a, Italia). Eternidad petrificada: desde el suelo hasta el techo de esta gruta llega su famosa columna p��trea de casi 40 metros de altura, formada por un goteo continuo a lo largo de millones de a?os. La cueva est�� en la cordillera Supramonte, cerca de Dorgali, en la isla italiana de Cerde?a. En ella los arque��logos tambi��n han encontrado anillos, s��mbolos solares y adornos. Al final de la visita guiada uno se asoma al impactante Abismo de las V��rgenes, un pozo de sacrificios fenicio.Alamy Stock Photo

Minas de sal de Wieliczka (Polonia). A unos 14 kil��metros de Cracovia, las minas de sal de Wieliczka est��n consideradas entre las m��s antiguas del mundo: llevan siendo explotadas desde el siglo XIII. Un inquietante mundo de pozos y c��maras de sal esculpido ��ntegramente a mano y famoso por las propiedades conservantes y curativas de su microclima. Tienen una profundidad de 327 metros y su longitud supera los 300 kil��metros. Una ciudad de sal en las profundidades con esculturas de halita, relucientes muros y la capilla de Santa Cunegunda, que los mineros tallaron con brillantes cristales de sal ��incluidos el altar, los santos y las l��mparas de ara?a�� a lo largo de 70 a?os. Alamy Stock Photo

Cueva del Viento, Tenerife. El mayor tubo volc��nico de Europa no est�� en el continente europeo, sino en medio del Atl��ntico, en las islas Canarias. Es la Cueva del Viento, que con sus 18 kil��metros cartografiados es tambi��n el quinto tubo m��s largo del planeta, solo superado por otros cuatro que est��n en las islas Haw��i. La Cueva del Viento se form�� en el subsuelo de Icod de los Vinos hace 27.000 a?os, con las lavas del volc��n Pico Viejo. Tiene tres niveles de pasadizos y toda clase de fen��menos geomorfol��gicos singulares, como simas, terrazas y otras formaciones de lava. El conjunto es espectacular pero lo que le hace especial es el peculiar sonido del viento que circula en su interior.Alamy Stock Photo

Eisriesenwelt (Salzburgo, Austria). Relucientes paredes de un azul glacial, enormes esculturas naturales de hielo y estilizados car��mbanos. Es Eisriesenwelt, el Mundo de los Gigantes de Hielo en las profundidades de los montes Tennen. Aunque hay un funicular, luego hay que subir 1.400 pelda?os hasta la entrada de la gruta. Antes de adentrarse en este g��lido mundo, cada visitante recibe su lampara de carburo.Alamy Stock Photo

Hoelloch (Muotathal, Suiza). Con una longitud hasta ahora explorada de m��s de 200 kil��metros, el de Hoelloch es uno de los sistemas de cuevas m��s largos del mundo. Las fuerzas naturales han creado en las entra?as del monte gargantas subterr��neas, extra?os constructos rocosos y estalactitas de distintos tama?os y formas. A quien le guste la aventura, puede explorar estas grutas en visitas de medio d��a o de un d��a entero, o en excursiones de varios d��as pernoctando bajo tierra. Tambi��n pueden reservarse para eventos como cumplea?os o fiestas de empresa.Patrick Frischknecht (Universal Images Group via Getty)