Chenoa: ¡°Mi mejor matrimonio es el que tengo con el p¨²blico¡±
Con 16 a?os ya cantaba en hoteles y casinos y con 27 era una de las estrellas de ¡®Operaci¨®n Triunfo¡¯. Hoy, con 48, triunfa como presentadora del ¡®talent show¡¯ que la lanz¨® a la fama, pero tambi¨¦n atraviesa un momento personal dif¨ªcil
Chenoa entra en el estudio fotogr¨¢fico con la misma energ¨ªa que despliega en los escenarios y plat¨®s de televisi¨®n. No deja a nadie del equipo sin saludar, hace bromas con el maquillador, se r¨ªe con el fot¨®grafo y aprueba con entusiasmo la ropa que ha elegido la estilista para ella. Pero Laura Corradini (Mar del Plata, Argentina, 48 a?os), la mujer de carne y hueso detr¨¢s del personaje, est¨¢ cansada. ¡°Agotada, m¨¢s bien. Y llevo semanas con dolor de espalda, pero ahora no tengo tiempo de ir al fisio¡±, reconoce despu¨¦s de posar du...
Chenoa entra en el estudio fotogr¨¢fico con la misma energ¨ªa que despliega en los escenarios y plat¨®s de televisi¨®n. No deja a nadie del equipo sin saludar, hace bromas con el maquillador, se r¨ªe con el fot¨®grafo y aprueba con entusiasmo la ropa que ha elegido la estilista para ella. Pero Laura Corradini (Mar del Plata, Argentina, 48 a?os), la mujer de carne y hueso detr¨¢s del personaje, est¨¢ cansada. ¡°Agotada, m¨¢s bien. Y llevo semanas con dolor de espalda, pero ahora no tengo tiempo de ir al fisio¡±, reconoce despu¨¦s de posar durante cuatro horas. Cuando se apaga la c¨¢mara, enciende un cigarrillo. ¡°Fumo cuando estoy estresada¡±, se excusa la cantante, atrapada en un torbellino informativo desde que trascendi¨® que se ha separado de su marido, el cirujano Miguel S¨¢nchez Encinas.
El culebr¨®n est¨¢ siendo retransmitido a diario por las televisiones y las revistas del coraz¨®n. La persecuci¨®n medi¨¢tica que soporta Chenoa ¡ªvigilancia de los paparazis en la puerta de su casa, preguntas inc¨®modas en los photocalls¡ª la est¨¢ haciendo revivir todo lo que sufri¨® hace dos d¨¦cadas cuando, con 27 a?os, se convirti¨® en una de las estrellas de la primera edici¨®n del talent show musical Operaci¨®n Triunfo (OT): su muy p¨²blico romance con David Bisbal, seguido de una ruptura todav¨ªa m¨¢s p¨²blica; los comentarios hirientes, las especulaciones¡ Su situaci¨®n personal coincide con un pico de trabajo que la ha vuelto a llevar hasta la cima de la fama. La cantante presenta la decimosegunda edici¨®n de OT, que se emite en la plataforma de streaming Amazon Prime; conduce el late night de radio T¨®matelo menos en serio, en Europa FM; est¨¢ promocionando su nuevo single, Bailar contigo, y es uno de los grandes reclamos de la cuarta temporada de El desaf¨ªo, concurso de Antena 3.
?De d¨®nde saca la energ¨ªa para trabajar tanto en un momento personal tan complicado?
Hace poco un amigo me pregunt¨® lo mismo. Tengo muchas herramientas despu¨¦s de haber pasado por tantos baches en la vida.
No la veo muy autocompasiva.
No me permito mucho la autocompasi¨®n. Natalia [su amiga desde que compitieron juntas en OT] es mi vecina y me dice lo mismo: ¡°No lloras, estoy esperando que petes¡±. Pero yo dosifico mucho mi dolor, no me permito sufrir del todo. ?Me vendr¨ªa bien llorar? S¨ª. Pero con el tiempo las cosas te duelen menos porque ya te han pasado antes. Con la edad te das cuenta de que no sirve de nada sentir pena por uno mismo. Lloro cuando menos lo espero: con una canci¨®n, una serie, una pel¨ªcula¡
Operaci¨®n Triunfo 2023, la primera gran emisi¨®n en vivo en una plataforma de streaming en Espa?a, se ha convertido en un ¨¦xito desde la primera gala. ¡°Se abre una nueva etapa y se cierra un c¨ªrculo para m¨ª¡±, dijo Chenoa en su estreno como conductora del programa que la lanz¨® a la fama. Sus ojos llorosos suger¨ªan que se refer¨ªa a su reciente ruptura. ¡°En la primera gala sent¨ª n¨¢useas. Pens¨¦ que iba a convulsionar en ese godzilla de escenario, con todos los focos en la cara. Hac¨ªa tiempo que no sent¨ªa eso¡±, admite. Su presencia en OT ha conseguido reunir frente a las pantallas dos generaciones de espectadores muy distintas: los nost¨¢lgicos que la vieron concursando hace m¨¢s de 20 a?os y la generaci¨®n Z, los nacidos entre mediados de los noventa y los primeros a?os de este siglo. El p¨²blico joven, la primera generaci¨®n completamente nativa de la telerrealidad, sigue d¨ªa a d¨ªa la evoluci¨®n de un grupo de aspirantes a estrellas que se parecen mucho a ellos: dominan el dialecto de los realities y no tienen miedo a las c¨¢maras porque han nacido con ellas, vienen formados de casa, y no tienen prejuicios sobre su vida personal. En esta edici¨®n, por ejemplo, solo cinco participantes se han declarado abiertamente heterosexuales.
Amazon Prime no difunde sus cifras de audiencia, pero OT 2023 ya ha batido r¨¦cord de votaciones a trav¨¦s de su aplicaci¨®n ¡ªimplementada en 2017¡ª, con 7.500.000 votos en los d¨ªas previos a la quinta gala. Tambi¨¦n ha batido el r¨¦cord de consumo de audiencia en directo en el canal de YouTube, con 143.000 usuarios conectados concurrentes. En cuatro semanas, el programa ha obtenido 1.000 millones de visualizaciones en TikTok y, cada lunes, los hashtags relacionados con las galas consiguen la primera posici¨®n en el listado de tendencias de X (antes Twitter). Ahora, las redes sociales est¨¢n inundadas de im¨¢genes antiguas de Chenoa en su ¨¦poca de concursante. OT 2023 ha resucitado a la Chenoa de 2002. Y eso ha removido cosas dentro de ella. ¡°Me est¨¢ costando digerir todo lo que est¨¢ pasando. He tenido que buscar la forma de gestionar tanta emoci¨®n porque para m¨ª es volver a 20 a?os atr¨¢s. Cuando me ofrecieron presentar el programa, me dije: Cuidado, ?d¨®nde te vas a meter? ?Est¨¢s segura de que quieres volver?¡±, explica. Ahora cree que el riesgo ha valido la pena.
?Ha sentido ansiedad en estos meses?
S¨ª, mucha. Siento ansiedad sobre todo cuando no logro controlar a mi juez interno. Me meto mucha ca?a. Pero mi psic¨®loga me ayuda y me aconseja. La pasiflora [planta medicinal con propiedades sedantes y ansiol¨ªticas] tambi¨¦n me ayuda mucho.
?La pasiflora funciona?
S¨ª, hace poco fui al herbolario y le dije: ¡°Perdona, no me encuentro bien. Voy como pollo sin cabeza¡±. Me dijo que la pasiflora era buen¨ªsima. Y ten¨ªa raz¨®n. Me tomo la pasiflora y estoy como nueva. Soy otra persona. Te lo juro.
El empleado del herbolario habr¨¢ alucinado¡
No, porque voy mucho. Tomo muchas tisanas.
Despu¨¦s de 20 a?os, ?se ha acostumbrado al inter¨¦s por su vida privada?
Sigo sin entender mucho por qu¨¦ mi vida privada interesa tanto. Llevo meses con la prensa haciendo guardia en la puerta de mi casa y me sigue chocando como el primer d¨ªa. Me choca y me crea ansiedad. No te acostumbras a eso, solo aprendes a llevarlo. Es algo de lo que no hablo con mis amigos.
?Qu¨¦ es lo que m¨¢s le duele de la fama?
Que me prejuzguen. Que me pongan una etiqueta sin conocerme, solo por ver una foto m¨ªa. Eso no lo soporto. En mi caso, se han quedado con una foto m¨ªa de hace 20 a?os. No me dejan avanzar, no me dejan pasar de p¨¢gina.
?Se refiere a la etiqueta de v¨ªctima o despechada?
No creo que me vean como una v¨ªctima, pero s¨ª como un drama digno. Siento que buscan todo el rato un drama digno en m¨ª, que buscan verme caer¡, pero no lo van a conseguir. Me da fuerza saber que no tienen fe en m¨ª. Aunque cuesta. Ahora, pasar por un photocall me supone ansiedad y me lleva a un estado que no me gusta, en el que no estoy contenta ni calmada. Todo lo que digo se tergiversa y se ponen enunciados que no tienen nada que ver con lo que explico.
Hace 20 a?os la prensa fue un poco injusta con usted. Y parece que lo sigue siendo.
Entonces hubo de todo. Y s¨ª tuvo un punto encarnizado. Estaba todo fuera de control y sigue siendo as¨ª. Fueron muy machistas conmigo. Recuerdo que una vez me fotografiaron agarrando a mi perra. Yo acababa de romper con una pareja y titularon esas fotos: ¡°La celulitis del desamor¡±. Sub¨ª a mi casa llorando. Me doli¨® mucho. Yo no estaba bien y eso me termin¨® de tirar abajo.
No parece que las cosas hayan cambiado tanto¡
Antes me dec¨ªan ¡°est¨¢s loca¡±. Ahora me dicen ¡°eres intensa¡±. Se sustituyen palabras, pero siguen significando lo mismo. El machismo sigue ah¨ª, pero camuflado. Pero eso es asunto de ellos, no m¨ªo. He aprendido que no duermo con los periodistas, duermo conmigo misma.
A un artista hombre no se le pregunta tanto por su vida privada.
Por supuesto que no. Todav¨ªa no hay igualdad en eso. Pero la sociedad est¨¢ empezando a levantar la voz ante ciertos titulares, ciertas noticias y cierto tratamiento de la informaci¨®n. Hace poco me persegu¨ªan por una estaci¨®n de tren y las im¨¢genes tuvieron como medio mill¨®n de reproducciones en las redes sociales. Hab¨ªa mucha gente comentando: ¡°?Por qu¨¦ no dej¨¢is a la chavala en paz?¡±. Ahora la gente tiene una ventana para opinar. Es como cuando me preguntan por un ex m¨ªo. Doy una respuesta y luego dicen que yo he sacado el tema. Me preguntan, soy amable y respondo.
?Por qu¨¦ cree que le siguen preguntando tanto sobre David Bisbal y en cambio a ¨¦l no le preguntan sobre usted?
No lo s¨¦ y nunca lo sabr¨¦.
Es raro, ?no?
No me molesta que me pregunten por su carrera porque le tengo mucho respeto profesionalmente. Pero no le encuentro explicaci¨®n. Me llama la atenci¨®n y me causa hast¨ªo. Yo he hecho muchas cosas como para que 20 a?os despu¨¦s me sigan preguntando por Bisbal. Ha pasado mucho tiempo. Hace poco David contest¨® algo parecido y me pareci¨® un punto de inflexi¨®n. Me sent¨ª respaldada. ?l hace su vida y yo hago la m¨ªa, pero eso no significa que yo lo odie o que ¨¦l me odie a m¨ª. No pasa nada. Pasa el tiempo y nada m¨¢s. No hay rencores.
La mujer siempre es la que tiene que dar explicaciones¡
Absolutamente. Las mujeres somos las encargadas de explicar las situaciones sentimentales, familiares y de todo tipo. No s¨¦ por qu¨¦. Siempre es la mujer la que tiene que dar las explicaciones sobre una ruptura, una separaci¨®n, un divorcio o lo que sea [sobre su situaci¨®n sentimental, ella solo ha dicho que no se trata de una ruptura, sino de una ¡°separaci¨®n temporal¡±].
La primera edici¨®n de Operaci¨®n Triunfo, emitida por La 1 de Televisi¨®n Espa?ola entre octubre de 2001 y febrero de 2002, marc¨® un antes y un despu¨¦s en el panorama musical espa?ol. Las galas semanales en directo se convirtieron en un ¨¦xito de audiencia, alcanzando cifras r¨¦cord. Cada semana se vend¨ªan enormes cantidades de discos de OT en una ¨¦poca en la que la industria estaba hundida por la pirater¨ªa. La SGAE public¨® que los participantes del talent show contribuyeron a mejorar el mercado de la m¨²sica grabada, con ventas de entre tres y cuatro millones de ¨¢lbumes.
M¨¢s de 13 millones de espa?oles siguieron la final de aquella primera edici¨®n de OT. Chenoa, una de las m¨¢s veteranas de la academia ¡ªten¨ªa 27 a?os y llevaba desde los 16 actuando en hoteles y casinos en Mallorca¡ª, qued¨® en el cuarto puesto. ¡°Entonces yo era muy dura, muy contundente. No hab¨ªa tanta diversidad, ya no solo sexual, sino de car¨¢cter. Y estaba mal visto que yo fuera m¨¢s dura que otras concursantes, o que hablara de forma intensa. Eso no gustaba al p¨²blico. Era raro ver en televisi¨®n a una mujer con mi forma de ser. Y me pas¨® factura en todos los sentidos¡±, explica. ¡°Tambi¨¦n era muy joven y dudaba mucho. Ahora la generaci¨®n que est¨¢ en OT es muy natural, org¨¢nica, fluida y segura de s¨ª misma. Les pasan cosas y se las toman con normalidad. Eso mola mucho¡±.
?Y de d¨®nde ven¨ªa su coraza?
Si empiezas a trabajar con 16 a?os, es normal que a los 26 o 27, la edad que ten¨ªa yo cuando concurs¨¦ en OT, tuviera esa dureza. No hab¨ªa puntos blandos, ten¨ªa muchos callos. Cada uno nace en un tipo de mundo y con un tipo de historia y la m¨ªa no fue f¨¢cil. No era f¨¢cil el mundo en el que yo me mov¨ªa. El negocio musical tiene muchas ligas, unas m¨¢s ingratas que otras, y hay ligas en las que tienes que cuidarte m¨¢s. Y yo me cuidaba. Ve¨ªa que ser dura me serv¨ªa. Me reforzaba en esa posici¨®n para que nadie me hiciera da?o, para que nadie me tocara.
?Por qu¨¦ empez¨® a cantar tan joven? ?Por necesidad?
Empec¨¦ por mis padres, ellos ya cantaban en hoteles. Para m¨ª fue como continuar el oficio, una cosa artesanal. Lo vi en mi casa, lo hered¨¦ y lo repet¨ª.
En 2002, al concluir la primera edici¨®n de OT, Chenoa y los otros 15 concursantes realizaron una gira multitudinaria que cont¨® con m¨¢s de medio mill¨®n de asistentes. Llenaron el estadio Santiago Bernab¨¦u y el Palau Sant Jordi. Muchos artistas no los recibieron con los brazos abiertos. M¨¢s de un centenar de cantantes y m¨²sicos firmaron el manifiesto Otro timo no en contra del fen¨®meno OT. Entre los firmantes figuraban Joaqu¨ªn Sabina, Enrique Bunbury, Miguel R¨ªos, Luis Eduardo Aute y Diego el Cigala. ¡°Lo bonito es ir en furgoneta para tocar al principio para poca gente y luego para m¨¢s. Llenar dos bernab¨¦us el primer mes de tu carrera es un fracaso. Est¨¢n creando enfermos de la cabeza y unos chavales que no van a saber vivir de otra forma¡±, dijo Dani Mart¨ªn. ¡°Operaci¨®n Triunfo es un ejemplo claro y absoluto de estalinismo. Esos chicos tienen que ir uniformados, tienen que pensar de una manera determinada. No piensan, obedecen¡±, afirm¨® Loquillo en una entrevista en Abc.
?Alguno de esos artistas le ha pedido disculpas?
No, qu¨¦ va. Pero yo no creo que sea una cuesti¨®n de disculpas.
Bueno, se pon¨ªa en duda su calidad art¨ªstica y la de sus compa?eros.
El miedo a lo desconocido es normal. En ese momento, OT era algo muy novedoso que estaba reventando el mercado. Nadie lo vio venir, ni siquiera los que hac¨ªan el programa. Nadie entend¨ªa el ¨¦xito, ni siquiera nosotros.
Alejandro Sanz tambi¨¦n fue cr¨ªtico con OT. A?os despu¨¦s, fue jurado de La Voz, un formato similar.
Efectivamente. Pero, de todo eso, lo que he aprendido es que no nos dan mucha licencia para equivocarnos. Hay que dar derecho a equivocarse y a poder rectificar. Algunos rectifican haciendo un programa que antes no hubieran hecho. Pero no hay que tener inquina. Hoy en d¨ªa noto mucho enfado. Dices una cosa y ya te tienes que quedar ah¨ª, no puedes cambiar de opini¨®n.
Tambi¨¦n se dijo que el ¨¦xito de OT enfermaba a los participantes. ?Usted enferm¨®?
No, yo ten¨ªa buenas herramientas en casa. Habl¨¢bamos mucho y desmenuz¨¢bamos todo para llegar exactamente a lo que hab¨ªa que aprender de todo eso. Mi abuelo siempre me dec¨ªa: ¡°No te duermas en los laureles¡±. Eso me sirvi¨® mucho. Ten¨ªa claro que el ¨¦xito era algo puntual. Ahora hablamos de salud mental, pero entonces no se hablaba de eso. Por suerte, yo ya iba al psic¨®logo.
?Entonces ya iba al psic¨®logo?
Yo siempre he ido al psic¨®logo. Me gusta hacer higiene mental. Me lo tomo como una gimnasia.
?Y ahora tiene tiempo para ir?
Cuando tengo un descanso, en vez de ir a hacerme un masaje, voy al psic¨®logo para que me haga un masaje mental.
Chenoa presume de tener la cabeza bien amueblada. ¡°Cuando he tenido ¨¦xito, no se me ha subido a la cabeza¡±, dice. En abril de 2002, un mes despu¨¦s de que terminara OT, debut¨® con su primer ¨¢lbum, el hom¨®nimo Chenoa, con el que gan¨® cuatro discos de platino. Varios singles de aquel trabajo, como Atr¨¦vete, Cuando t¨² vas o Yo te dar¨¦, ya forman parte de la historia del pop espa?ol. Veinte a?os, siete discos de estudio y dos en directo y m¨¢s de un mill¨®n de copias vendidas despu¨¦s, es una artista consagrada que ha allanado el camino a las triunfitas (as¨ª llaman a las exconcursantes de Operaci¨®n Triunfo) idolatradas por los j¨®venes de hoy: Lola ?ndigo, Amaia, Aitana¡
Han criticado a Aitana por sus bailes y letras sensuales. ?Seguimos juzgando a las mujeres que hablan abiertamente sobre su sexualidad?
El problema no es tanto que ella hable de sexo como que se tome la licencia de querer cambiar de etapa. A Aitana la agarramos muy peque?a y es como querer que Miley Cyrus sea siempre Hannah Montana. Siempre hay gente que quiere que no cambies. Pero ?qui¨¦n quiere ser la misma persona toda su vida?
?Le pas¨® lo mismo?
Yo entr¨¦ directamente cantando Yo te dar¨¦, Atr¨¦vete y Cuando t¨² vas. No tuve que pasar de ni?a a mujer, yo fui directamente al turr¨®n.
Pero han pasado dos d¨¦cadas y tengo la sensaci¨®n de que la seguimos viendo como ¡°la novia de Espa?a¡±. ?No se siente as¨ª?
S¨ª. Mi mejor relaci¨®n es con Espa?a. Mi mejor matrimonio es el que tengo con el p¨²blico. Los mejores piropos me los dicen cuando voy al supermercado. La gente me grita: ¡°?Guapa, ¨¢nimo!¡±. Y lo dicen de verdad. Eso s¨ª me hace llorar: el amor de toda esa gente que te ve y no te saca una foto para publicarla ni escribe sobre ti. Ah¨ª s¨ª que lloro.