El archivo que almacena los sue?os del 15-M

El centro social 3 Peces 3, en el barrio madrile?o de Lavapi¨¦s, custodia 28 cajas marrones que contienen el enojo, la indignaci¨®n, la euforia y la esperanza de miles de personas que hace diez a?os atendieron a una convocatoria de colectivos como Juventud sin futuro o DemocraciaRealYa. El 15-M devino en un cisma pol¨ªtico para Espa?a y en una acampada de casi un mes que atrajo la atenci¨®n del mundo. La idea de colocar buzones de cart¨®n y madera en la Puerta del Sol de Madrid logr¨® canalizar los s...

El centro social 3 Peces 3, en el barrio madrile?o de Lavapi¨¦s, custodia 28 cajas marrones que contienen el enojo, la indignaci¨®n, la euforia y la esperanza de miles de personas que hace diez a?os atendieron a una convocatoria de colectivos como Juventud sin futuro o DemocraciaRealYa. El 15-M devino en un cisma pol¨ªtico para Espa?a y en una acampada de casi un mes que atrajo la atenci¨®n del mundo. La idea de colocar buzones de cart¨®n y madera en la Puerta del Sol de Madrid logr¨® canalizar los sentimientos de la gente. Los 14.679 papeles, escritos con l¨¢pices, bol¨ªgrafos, rotuladores de colores o con el teclado del ordenador, tachados y subrayados, descansan hoy en lo alto de una estanter¨ªa, cuidados por voluntarios que custodian el archivo. Sin embargo, los planteamientos y las ideas no han quedado arrumbados. Las 108 asambleas de barrio que nacieron continuaron el trabajo en los siguientes a?os. Hoy, al menos 20 colectivos y una decena de asambleas de barrios madrile?os contin¨²an reivindicando las consignas que surgieron hace un decenio.

Hojas blancas, rosas, azules o amarillas. Papeles desgarrados o manchados de caf¨¦. Servilletas, post-its, viejas p¨¢ginas de agendas o papeletas publicitarias y de hoteles. Los mensajes que miles de personas dejaron en los buzones abarcan desde consejos sobre c¨®mo organizar la ocupaci¨®n de la plaza s¨ªmbolo de la capital y propuestas e informes para mejorar el sistema electoral, la econom¨ªa y la educaci¨®n, hasta juicios sobre el deterioro de la pol¨ªtica y denuncias de las carencias en los servicios sociales. ¡°Queremos una sanidad por lo menos como la que tenemos y no que la privaticen, porque entonces yo morir¨¦ por no tener dinero para pagarla¡±, dej¨® escrito Noem¨ª en uno de los papeles almacenados. ¡°Los j¨®venes espa?oles preparados que trabajen en Espa?a. ?Un sue?o o una realidad?¡±, se lee en otro.

En el local, espacioso, donde entra poca luz natural, no hay cajas fuertes ni vitrinas que separen el archivo de los materiales compartidos con los otros colectivos que ocupan el sitio. Al fondo del sal¨®n, un gran armario blanco con algunos sellos del 15-M est¨¢ repleto de lo que sobrevivi¨® a la acampada: carteles coloridos e improvisados, pancartas dobladas, dibujos y retratos. Una tabla de surf con la palabra ¡°indignados¡± descansa colgada sobre la pared. Un par de voluntarios, de un grupo de 20 participantes del 15-M, custodian esos objetos archivados en el local. Uno de ellos, que no quiere dar su nombre, cuenta que va al centro social dos veces al mes y repasa documentos o carteles que todav¨ªa no se han digitalizado. La intenci¨®n del colectivo es que este material no quede en el olvido. ?l, como otros integrantes, prefiere el anonimato porque el trabajo que hace ¡°no necesita de protagonismos¡±.

Los papeles con las propuestas sobrevivieron hasta 2018 en un altillo en la casa de Henar, una de las antiguas integrantes de la Comisi¨®n de Propuestas, en cajas de cart¨®n y en bolsas de basura. Los miembros de Archivo las recogieron y las llevaron al centro social, donde las clasificaron por temas en carpetas de pl¨¢stico color marr¨®n: organizaci¨®n interna, pol¨ªtica, econom¨ªa, pensamiento, social y medioambiente, cada una con un sello rojo y el nombre Archivo 15M. Organizaron tambi¨¦n otras 19 cajas de id¨¦ntica apariencia, que recogen unas 150.000 firmas de apoyo a una ¡°Acampada indefinida en Sol¡±.

La Comisi¨®n de Propuestas cont¨® y digitaliz¨® estas ideas y diez a?os despu¨¦s varios de sus miembros cuentan su experiencia, aunque prefieren no dar su apellido. Elena es una de ellas. ¡°En los primeros d¨ªas hac¨ªamos el recorrido por todos los buzones y volv¨ªamos con dos bolsas de pl¨¢stico llenas hasta arriba de papelitos cortados¡±, recuerda ilusionada en una videollamada. Conscientes de su valor hist¨®rico, concluyeron que la casa de Henar, cerca de la Puerta del Sol, era un sitio seguro donde guardarlas. ¡°Recoger las propuestas y canalizarlas era lo que ech¨¢bamos de menos al otro lado¡±, explica Henar refiri¨¦ndose a la pol¨ªtica institucional de entonces. ¡°Para m¨ª era la voz del pueblo¡±.

El conteo final de aquellos 14.679 papeles se tradujo en un documento que esa comisi¨®n public¨® en 2012, en el primer aniversario del movimiento. Entre las propuestas espont¨¢neas, un 32% hablaba de pol¨ªtica, un 22% de econom¨ªa, un 16% de medioambiente, un 13% de educaci¨®n, un 10% de temas sociales, un 4% de la organizaci¨®n interna y un 3% de cultura. Las tres m¨¢s repetidas son la supresi¨®n de los privilegios de los pol¨ªticos, que apareci¨® 741 veces, la reforma de la ley electoral, que se lee 628 veces, y medidas m¨¢s duras contra la corrupci¨®n, mencionadas en 624 papeles.

Elena explica que las propuestas no se refer¨ªan solo a los grandes temas, sino tambi¨¦n a los problemas de los barrios y de territorios perif¨¦ricos. ¡°Recuerdo que una persona ped¨ªa encontrar una soluci¨®n para el r¨ªo de su pueblo, que se estaba secando¡±, rememora sonriendo. En un papel que sobrevive entre los miles guardados en el archivo se propone una soluci¨®n para la Espa?a vaciada: ¡°Consensuar con los alcaldes de pueblos despoblados cupos de inmigrantes dispuestos a residir en sus municipios a cambio de permiso de residencia y trabajo. En Espa?a, sobre todo en el campo, falta gente¡±.

Las huellas del 15-M

Diez a?os despu¨¦s de la acampada en la Puerta del Sol, el esp¨ªritu del 15-M sigue presente entre asociaciones de barrios y colectivos que asumieron la estafeta desde que el movimiento se descentraliz¨®. Al menos una quincena se re¨²ne mensualmente en Madrid. Cristina Monge, polit¨®loga de la Universidad de Zaragoza, se?ala que la trayectoria de estos es desigual. ¡°En Espa?a los movimientos sociales tienen momentos de pico, luego caen de forma r¨¢pida y raras veces cristalizan fortaleciendo organizaciones o estructuras¡±, dice. Sin embargo, advierte que su mensaje cal¨® en la sociedad. ¡°Su ¨¦xito se da porque la movilizaci¨®n y la gente trascienden a las organizaciones tradicionales que los lideran¡±, afirma.

Con la crisis del coronavirus y la inestabilidad pol¨ªtica, muchas de las luchas que empezaron hace un decenio rebrotan en las calles. Una de estas se encuentra en Carabanchel. A las 13.00 de un mi¨¦rcoles de mayo, Jorge Aranda, funcionario en el Hospital Ram¨®n y Cajal, se junta con unas 50 personas en una calle del barrio madrile?o de Opa?el. Algunos son miembros de la Asamblea popular de Carabanchel 15M. Esperan la llegada de la comisi¨®n judicial, que viene a desalojar a una vecina y a sus tres hijos menores, para intentar impedir el desahucio. Esta es una de las principales actividades que realiza la agrupaci¨®n, que naci¨® en verano de 2011.

Su lucha m¨¢s importante es la mejora de la plantilla del centro de salud Abrantes, en el mismo barrio, que sufre la falta de m¨¦dicos desde el verano de 2020. ¡°Juntamos m¨¢s de 700 quejas, las llevamos a la consejer¨ªa de Sanidad. Nos han respondido con un correo tipo corta y pega. En marzo nos encerramos en la gerencia de atenci¨®n primaria, vinieron decenas de polic¨ªas, pero ninguna soluci¨®n real para los vecinos¡±, lamenta Aranda.

El debate sobre los temas que se plantearon en Sol hace diez a?os se celebra cada mes. EspacioCom¨²n15M naci¨® en 2015, en el cuarto aniversario de la gran manifestaci¨®n. En este tiempo ha agrupado a unos 20 colectivos y asambleas que surgieron a ra¨ªz de la acampada y que se mantienen en pie. Mar¨ªa Salas es una de las integrantes y fundadoras de esta coordinadora que se re¨²ne habitualmente en el barrio de la Concepci¨®n.

¡°Todo iba cambiando deprisa. Se iban creando nuevas asociaciones y movimientos, y lo que quer¨ªamos era un espacio para conectar con otros colectivos, trabajar en red¡±, explica Salas. Desde entonces, EspacioCom¨²n15M es una red neur¨¢lgica que ha coordinado el debate de propuestas y de ideas que intentan dar soluciones a problemas locales y nacionales.

La v¨ªa asturiana, una propuesta para que las Iniciativas Legislativas Populares y los referendos sean vinculantes, surgi¨® del 15-M. ¡°Algo que caracteriz¨® el movimiento es la exigencia de tener participaci¨®n democr¨¢tica directa de las personas¡±, cuenta Salas. Lorenzo Higueras, uno de los miembros del colectivo, explica que esta propuesta de reforma constitucional fue elevada al Congreso de los Diputados por el Parlamento asturiano. ¡°No tenemos otra cosa que pedirle a los parlamentarios que liberen las herramientas para que hagamos las cosas nosotros¡±, afirma.

Este s¨¢bado, EspacioCom¨²n15M ha convocado un acto simb¨®lico para conmemorar el d¨¦cimo aniversario del nacimiento del movimiento en la Puerta del Sol. Unas calles m¨¢s al sur, en el local donde se almacena el archivo, en unas de las cajas de ¡°pol¨ªtica¡± sobrevive un mensaje escrito con bol¨ªgrafo negro: ¡°Ten¨¦is que ser la mosca cojonera que est¨¦ zumbando hasta cambiar el sistema¡±, se lee. Lo firma ¡°un viejo al que hab¨¦is vuelto a ilusionar¡±.