El rey em¨¦rito sopesa visitar Espa?a tras descartar la Fiscal¨ªa su imputaci¨®n pero no trasladar su residencia por ahora
Juan Carlos I decidir¨¢ sobre su vuelta tras leer el texto del decreto de archivo de las diligencias
El archivo de las diligencias de investigaci¨®n a Juan Carlos I por parte de la Fiscal¨ªa puede abrir la puerta al regreso del rey em¨¦rito a Espa?a 14 meses despu¨¦s de que abandonara el pa¨ªs.
Fuentes del entorno de Juan Carlos I consultadas por EL PA?S no se han mostrado sorprendidas de que la Fiscal¨ªa del Tribunal Supremo planee archivar las tres investigaciones prejudiciales abiertas sobre su patrimonio en el extranjero. De hecho, es ...
El archivo de las diligencias de investigaci¨®n a Juan Carlos I por parte de la Fiscal¨ªa puede abrir la puerta al regreso del rey em¨¦rito a Espa?a 14 meses despu¨¦s de que abandonara el pa¨ªs.
Fuentes del entorno de Juan Carlos I consultadas por EL PA?S no se han mostrado sorprendidas de que la Fiscal¨ªa del Tribunal Supremo planee archivar las tres investigaciones prejudiciales abiertas sobre su patrimonio en el extranjero. De hecho, es una decisi¨®n que esperaban desde hace ya bastantes meses.
Estas mismas fuentes s¨ª han expresado su preocupaci¨®n ante la posibilidad de que el escrito de archivo contenga una dura censura hacia su conducta y d¨¦ por hecho que cometi¨® delitos de los que solo resultar¨ªa exonerado por la inmunidad de la que gozaba como jefe del Estado, por estar prescritos o haber regularizado su situaci¨®n fiscal, lo que da?ar¨ªa a¨²n m¨¢s la imagen de Juan Carlos I.
El escrito que prepara la Fiscal¨ªa del Supremo ser¨¢ muy exhaustivo respecto a todas las diligencias efectuadas durante casi dos a?os de investigaci¨®n, y las pruebas recabadas sobre los supuestos delitos del anterior rey.
El decreto de archivo detallar¨¢ c¨®mo la legislaci¨®n vigente impide actuar contra Juan Carlos I, bien por la aplicaci¨®n del art¨ªculo 56.3 de la Constituci¨®n sobre la inviolabilidad del Rey, o bien porque la regularizaci¨®n fiscal, seg¨²n el art¨ªculo 305.4 del C¨®digo Penal, impide su imputaci¨®n. Ese art¨ªculo se?ala que la regularizaci¨®n neutraliza la acci¨®n penal siempre y cuando ¡°se haya procedido al completo reconocimiento y pago de la deuda tributaria antes de que el ministerio fiscal ¡°interponga querella o denuncia¡± o ¡°realice actuaciones que le permitan tener [al presunto defraudador] conocimiento formal de la iniciaci¨®n de diligencias¡±.
El escrito de archivo del Fiscal no es recurrible, por lo que el letrado del rey em¨¦rito no podr¨ªa rebatir sus argumentos.
Respecto a un pronto regreso de Juan Carlos I, de 83 a?os, las mismas fuentes pr¨®ximas al exmonarca recuerdan que este ha expresado repetidamente su deseo de volver a Espa?a y si no lo hace es para no perjudicar a la Corona. El archivo de las investigaciones abiertas por la Fiscal¨ªa ¡°despeja el camino¡± para su retorno, admiten, pero eso no quiere decir que lo haga con car¨¢cter inmediato. Lo m¨¢s probable, agregan, es que no se produzca un retorno definitivo, sino m¨¢s bien alguna visita que muestre que no hay obst¨¢culos para que entre y salga del pa¨ªs cuando quiera y se vaya normalizando su presencia en Espa?a.
Nuevo libro en Francia
La noticia del archivo de la investigaci¨®n de la Fiscal¨ªa sobre Juan Carlos I coincide con la publicaci¨®n en Francia de un libro sobre su figura, Mon roi d¨¦chu (¡±Mi rey ca¨ªdo¡±). La autora, la historiadora franco-venezolana Laurence Debray, relata sus di¨¢logos durante una d¨¦cada con el rey em¨¦rito y concluye con la visita que le hizo en la pasada primavera a Abu Dabi.
Debray, autora tambi¨¦n de una biograf¨ªa de Juan Carlos I y de un documental basado en decenas de horas de entrevistas realizadas en 2014, explica que, al llegar al emirato, lo encontr¨® no en un palacio suntuoso sino ¡°en un lugar discreto, alejado¡±. Describe a un rey pegado a una tableta con la que sigue a distancia la misa de la Zarzuela. No iba vestido de rey, se?ala: llevaba zapatillas deportivas y un polo blanco que le iba ancho. ¡°He perdido doce kilos¡±, dijo el rey em¨¦rito.
No se trata de un libro de entrevistas, ni de revelaciones, sino de un relato autobiogr¨¢fico de alguien que admir¨® a Juan Carlos desde la infancia, que despu¨¦s sigui¨® su trayectoria investigando y escribiendo sobre ¨¦l, y que lo ha tratado hasta en la ¨²ltima etapa de su vida. ¡°Ha llegado el momento¡±, escribe Debray, ¡°de preguntarme por esta relaci¨®n que mantengo con ¨¦l y que tanto ha durado y me ha estructurado, este apego tan plat¨®nico como fiel¡±.
?Regresar a Espa?a? ¡°Me bastar¨ªa coger un avi¨®n¡±, responde el antiguo jefe de Estado a la autora durante una conversaci¨®n telef¨®nica antes del encuentro en Abu Dabi. ?Y por qu¨¦ no se qued¨®? ¡°Los periodistas me habr¨ªan perseguido por todos los sitios. Aqu¨ª no molesto a la Corona¡±. En otro momento afirma, sin precisar a qui¨¦n se refiere: ¡°Algunos est¨¢n muy contentos de que me haya marchado (...). Me enfrentaba a muchas presiones¡±.
La bi¨®grafa cuenta que, unos d¨ªas despu¨¦s del encuentro en su residencia de Abu Dabi, llam¨® a Juan Carlos I por tel¨¦fono y lo encontr¨® conmocionado a¨²n por el entierro de Felipe de Edimburgo. ¡°Fue soberbio, realmente emocionante y elegante¡±, dice el rey em¨¦rito. Debray le comenta: ¡°En Espa?a tambi¨¦n se entierra bien¡±. A lo que Juan Carlos replica: ¡°El entierro de mi padre fue muy bonito. Ahora debo pensar en el m¨ªo¡±. Y la autora concluye con una pregunta: ¡°?Le organizar¨¢ Espa?a unos funerales a su medida? ?Qui¨¦n vendr¨¢?¡±.