La intrahistoria de la ausencia de Feij¨®o en la toma de posesi¨®n de Ma?ueco

El pasado martes, durante una de las reuniones que Alberto N¨²?ez Feij¨®o manten¨ªa con los l¨ªderes de los sindicatos en su despacho, le llam¨® Alfonso Fern¨¢ndez Ma?ueco. ¡°?Te importa que coja el tel¨¦fono?¡±, pregunt¨® el l¨ªder del PP a su interlocutor. El presidente de Castilla y Le¨®n llamaba despu¨¦s de que Feij¨®o hubiera dejado la silla vac¨ªa en el acto solemne en el que acababa de convertirse en presidente regional tras un pacto con la extrema derecha. ¡°No te preocupes, montamos esa visita pronto¡±, le prometi¨® el l¨ªder del PP, y colg¨® el tel¨¦fono. Feij¨®o acord¨® con Ma?ueco que ir¨¢ a Castilla y Le¨®n para respaldarle p¨²blicamente. El bar¨®n se ha llevado un desaire porque el l¨ªder quiso evitar la foto con Santiago Abascal a cinco d¨ªas de las elecciones francesas, en las que los ultras de Marine Le Pen llaman a las puertas del El¨ªseo. La ausencia de Feij¨®o en Valladolid junto a Vox fue deliberada, pero no fue f¨¢cil sacar adelante el juego ambiguo del s¨ª, pero no, con la extrema derecha.

El lunes de la semana anterior a la toma de posesi¨®n de Ma?ueco, el coordinador general del PP, El¨ªas Bendodo, dijo que Feij¨®o hab¨ªa transmitido al comit¨¦ de direcci¨®n ¡°su inter¨¦s en asistir¡± a la toma de posesi¨®n en Valladolid ¡°siempre que la agenda se lo permita¡±. En la frase estaba la trampa, porque el l¨ªder gallego se reservaba el comod¨ªn de la agenda, como si la agenda, y no ¨¦l, liderara el PP. La direcci¨®n empez¨® a buscar opciones para sortear una imagen que algunos de sus miembros ten¨ªan claro que no era el camino, a pesar de que Feij¨®o no hab¨ªa tratado de impedir el Gobierno de coalici¨®n con Vox en Castilla y Le¨®n y dej¨® que sucediera. ¡°Se barajaron muchos escenarios. Busc¨¢bamos una f¨®rmula para no ofender a Ma?ueco y demostrar que no buscamos esa coalici¨®n de Gobierno¡±, cuenta un dirigente.

Dejar la silla vac¨ªa en Castilla y Le¨®n presentaba varios problemas. Para empezar, con el propio Ma?ueco ¨Dque ha aceptado la soluci¨®n de una visita a posteriori¨D y, despu¨¦s, con la derecha espa?ola, que ha normalizado a Vox de manera bastante mayoritaria. ¡°Lo m¨¢s c¨®modo era ir a Valladolid¡±, sostienen en el equipo del l¨ªder. En la c¨²pula del PP admiten que sienten la presi¨®n de la derecha medi¨¢tica por los intentos de Feij¨®o de distanciarse del partido de Abascal y de recomponer la relaci¨®n con el presidente del Gobierno. En Francia, la ultra Marine Le Pen ha posado con seis gatos para dulcificar su imagen, la llamada desdiabolizaci¨®n. En Espa?a, al l¨ªder de Vox no le ha hecho falta: la estrategia del PP en la etapa de Pablo Casado ya le hab¨ªa hecho gran parte del trabajo. A estas alturas, marcar distancias con los extremistas a su derecha es mucho m¨¢s costoso para los populares.

La soluci¨®n que se encontr¨® para evitar la foto con Abascal en Valladolid fue encajar ese mismo martes la cita con los l¨ªderes sindicales y de la patronal, que Feij¨®o ya hab¨ªa promovido, en la sede nacional del PP, en la calle G¨¦nova de Madrid. Hab¨ªa que conseguir cuadrarlo todo. Alguno de los convocados puso problemas para que la reuni¨®n se celebrara el lunes, y Feij¨®o se movi¨® con habilidad para reunirles a todos el martes y matar dos p¨¢jaros de un tiro. A unos les dijeron que los dem¨¢s quer¨ªan el martes, a otros que todos los dem¨¢s estaban de acuerdo en acudir a G¨¦nova... ¡°Ten¨ªamos clar¨ªsimo que era una coartada¡±, cuenta uno de los asistentes a la sede del PP. Pero aceptaron, y el resultado fue un win-win para Feij¨®o, dicen los populares. ¡°Ha cambiado la foto con Abascal, que todo el mundo esperaba, por la foto con el l¨ªder de UGT, con la que est¨¢ lanzando un mensaje de centralidad y moderaci¨®n¡±, exponen en el n¨²cleo del l¨ªder.

No obstante, en la reuni¨®n con el l¨ªder de UGT, Pepe ?lvarez, y con el de CC OO, Unai Sordo, Feij¨®o escuch¨® reproches de los sindicalistas. Sordo le transmiti¨® su preocupaci¨®n porque el PP normalizara a Vox y ?lvarez se quej¨® de que en la etapa de Pablo Casado el PP se arrimara a las posiciones antisindicales de Abascal. Con ambos habl¨® de la extrema derecha, pero en privado el l¨ªder del PP dice lo mismo que en p¨²blico: que ¨¦l quiere que gobierne la lista m¨¢s votada, y que el PSOE no se abstiene para dejar gobernar al PP.

Los l¨ªderes sindicales piden a Feij¨®o que demuestre su giro respecto a Casado respaldando ahora la reforma laboral pactada con la patronal, y que sali¨® adelante gracias a que un diputado del PP se equivoc¨® votando a favor frente a la consigna del partido de hacerlo en contra. ¡°Es muy importante que el PP est¨¦ en los grandes acuerdos de Estado. No haber dado soporte a la reforma laboral, a la de pensiones o la Ley rider es una anomal¨ªa que va en contra del conjunto de los intereses de los espa?oles¡±, opina ?lvarez. ¡°Feij¨®o est¨¢ queriendo plantear un cambio de registro en el lenguaje y el tono, pero tiene que confirmar que de verdad hay un cambio en la pol¨ªtica de tierra quemada del PP. Una prueba del algod¨®n ser¨ªa que revisara su posici¨®n sobre la reforma laboral¡±, remacha Sordo.

Mientras los sindicalistas entraban en G¨¦nova, 13, en Valladolid, el l¨ªder de la extrema derecha se apropiaba simb¨®licamente del Gobierno de Castilla y Le¨®n flanqueando a Ma?ueco. ¡°No hab¨ªa ning¨²n sitio en Espa?a m¨¢s importante para nosotros que estar en esta toma de posesi¨®n para apoyar a este Gobierno¡±, se ufan¨® Abascal. Ante la ausencia del bar¨®n gallego, el mensaje principal del PP en Valladolid lo transmiti¨® Isabel D¨ªaz Ayuso, que se felicit¨® de que Castilla y Le¨®n inaugurara una etapa de ¡°socialismo free¡±. La eurodiputada de Ciudadanos y exdirigente socialista Soraya Rodr¨ªguez, de origen vallisoletano, lament¨® en Twitter esas palabras de la presidenta madrile?a. ¡°Recuerda las zonas libres de ideolog¨ªa LGTBQ de Polonia que combatimos los dem¨®cratas desde la UE. ?Despu¨¦s que viene? ?feminismo free? ?inmigraci¨®n free? ?prensa libre free?¡±, se pregunt¨®. El debate sobre la extrema derecha en el PP est¨¢ atravesado por el contexto europeo. En el PP creen que han salvado el primer asalto con Vox, pero tambi¨¦n miran a Francia este domingo. El resultado de Le Pen en las elecciones francesas puede tener repercusiones en sus pr¨®ximos pasos y ausencias.