S¨¢nchez se lanza contra Feij¨®o en una larga enmienda a la totalidad al l¨ªder del PP por su ¡°insolvencia¡±
El dirigente popular pide al presidente que deje a sus socios y se apoye en el PP, pero el ¡®cara a cara¡¯ se convierte r¨¢pidamente en una especie de debate del estado de la oposici¨®n pensado para debilitar la alternativa
El Senado ha vivido este martes un debate in¨¦dito casi desde cualquier punto de vista. Todo estaba al rev¨¦s en este encuentro. Es el Gobierno el que lo promovi¨®, mientras la oposici¨®n parec¨ªa enfrentarse a ¨¦l a rega?adientes y con quejas en todo momento de su formato. Y el encuentro, pensado en teor¨ªa para analizar la crisis energ¨¦tica y sus consecuencias, se convirti¨® r¨¢pidamente en una especie de debate del estado de la oposici¨®n, porque Pedro S¨¢nchez decidi¨® aprovech...
El Senado ha vivido este martes un debate in¨¦dito casi desde cualquier punto de vista. Todo estaba al rev¨¦s en este encuentro. Es el Gobierno el que lo promovi¨®, mientras la oposici¨®n parec¨ªa enfrentarse a ¨¦l a rega?adientes y con quejas en todo momento de su formato. Y el encuentro, pensado en teor¨ªa para analizar la crisis energ¨¦tica y sus consecuencias, se convirti¨® r¨¢pidamente en una especie de debate del estado de la oposici¨®n, porque Pedro S¨¢nchez decidi¨® aprovechar el momento para hacer una larga y detallada deconstrucci¨®n de Alberto N¨²?ez Feij¨®o, de sus errores, de sus propuestas fallidas, de sus posiciones del pasado, de sus ataques al presidente, hasta convertir la r¨¦plica en una especie de enmienda a la totalidad en la que tras cada fallo del l¨ªder de la oposici¨®n terminaba con una pregunta: ¡°?Esto es insolvencia o mala fe?¡±.
Durante casi una hora, aprovechando que no ten¨ªa ning¨²n l¨ªmite de tiempo, mientras que el l¨ªder del PP dispon¨ªa de 15 minutos de discurso y cinco de r¨¦plica, S¨¢nchez fue desgranando una por una las posiciones de Feij¨®o para tratar de destruir su imagen de pol¨ªtico moderado y gestor despu¨¦s de 13 a?os al frente de la Xunta de Galicia, y presentarlo como un insolvente que no est¨¢ preparado para ser presidente del Gobierno.
La lista de errores de Feij¨®o que desgran¨® S¨¢nchez, incluida la an¨¦cdota de proponer al presidente que se traslade en Canarias en Jet Foil, un barco que dej¨® de usarse hace casi 20 a?os, fue muy larga: ¡°Como l¨ªder del PP a nivel nacional las cosas que dice no avalan la imagen de buen gestor. Le voy a poner algunos ejemplos. En marzo, dijo que el Gobierno de Espa?a se estaba forrando, cuando el grueso de los ingresos de esos impuestos iban a las comunidades aut¨®nomas. ?Eso es insolvencia o es mala fe? En abril propuso deducci¨®n para inversiones que ya se hab¨ªa aprobado. ?Insolvencia o mala fe? Dijo que en Galicia en lo rural no se pagan impuestos. Es falso y una falta de respeto. Su conocimiento en impuestos es justito. Luego confundi¨® la prima de riesgo y los tipos de inter¨¦s. ?Esto es insolvencia o mala fe? Ha dicho que el Gobierno est¨¢ haciendo un pufo. Hace poco dijo que el Gobierno no puede subir las pensiones por la regla de gasto. Deber¨ªa saber que las pensiones no entran en la regla de gasto. ?Insolvencia o mala fe? Dice que el Gobierno cambia votos por cheques y en la misma entrevista propone cheques. Pide aumentar la gratuidad de los libros de texto y la primera medida que tom¨® en Galicia es quitar las ayudas a los libros de texto. Me permito recomendarle que se rodee de buenos asesores¡±, remat¨® S¨¢nchez en su momento de cr¨ªtica m¨¢s dura.
Y adem¨¢s trat¨® de asimilar a Feij¨®o con los intereses de las grandes empresas energ¨¦ticas o la banca, ahora muy cr¨ªticas con S¨¢nchez tras anunciar impuestos espec¨ªficos para ellas. ¡°El PP intent¨® boicotear en Europa la excepci¨®n ib¨¦rica, que va a permitir ahorrar a los espa?oles 2.000 millones de euros. Tambi¨¦n lo hicieron algunas grandes compa?¨ªas energ¨¦ticas. Pero ellas defend¨ªan sus intereses. ?Ustedes qu¨¦ defend¨ªan?¡±, le espet¨®. ¡°Se?or Feij¨®o, usted va a fracasar como fracas¨® el se?or Casado¡±, lanz¨® un S¨¢nchez cada vez m¨¢s duro, a ratos se?alando con el dedo al l¨ªder de la oposici¨®n, que apenas le miraba y segu¨ªa revisando sus papeles.
El ¡®casting¡¯ de La Moncloa
Poco antes, Feij¨®o tambi¨¦n atac¨® al presidente y le reproch¨®, por ejemplo, que el lunes hubiera llevado a La Moncloa a cinco ciudadanos escogidos entre los 250.000 que han enviado cartas al presidente en estos a?os. ¡°Mire, se?or S¨¢nchez, ayer fui a una feria agropecuaria en Salamanca. Atr¨¦vase a hablar con los ciudadanos sin un casting previo¡±, le lanz¨® el l¨ªder del PP.
¡°Puede que usted act¨²e con insolvencia o mala fe, pero usted no olvida qui¨¦n le puso, las grandes corporaciones energ¨¦ticas¡±, termin¨® S¨¢nchez su enmienda a la totalidad, la m¨¢s dura que se ha escuchado en esta C¨¢mara sobre un l¨ªder de la oposici¨®n. Feij¨®o se revolc¨®: ¡°Decir que a m¨ª me han puesto las empresas es un insulto a la democracia espa?ola y a los militantes y simpatizantes del PP. Me llama usted insolvente. He le¨ªdo los curr¨ªculums de algunos ministros. Me ha llevado algunos segundos hacerlo. Y he visto que usted, antes de ser presidente, fue concejal de la oposici¨®n en Madrid. ?Menuda experiencia!¡±.
En el duelo, S¨¢nchez dijo que Feij¨®o le hab¨ªa insultado por citar El oto?o del patriarca, una novela de Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez sobre un anciano dictador latinoamericano. ¡°?Esto es insolvencia cultural o mala fe?¡±, remat¨® el presidente. Feij¨®o se neg¨® a aceptar que le hubiera insultado. ¡°?Usted se cree que por utilizar a Garc¨ªa M¨¢rquez yo le he insultado? Usted es un presidente democr¨¢tico que gan¨® unas elecciones. Usted no es dictador porque usted no manda ni siquiera en su Gobierno. Simplemente dije que es un mal presidente en sus ¨²ltimos momentos. Eso no es insulto, es una cr¨®nica¡±. ¡°Ya le vamos conociendo. Usted es un se?or que sin despeinarse puede mentir, insultar y quejarse de que le insultan. Si un asesor me pone en mi discurso una cita de una obra de Garc¨ªa M¨¢rquez que evoca a dictadores sangrientos, yo hubiera tachado esa cita¡±, remat¨® S¨¢nchez. ¡°Su intervenci¨®n no es propia de un presidente. Para hacer oposici¨®n solo tiene que esperar a las pr¨®ximas elecciones¡±, se quej¨® Feij¨®o.
El debate s¨ª hab¨ªa comenzado centrado en la cuesti¨®n energ¨¦tica, con S¨¢nchez reivindicando todas sus medidas y pidiendo al Senado el apoyo frente al ¡°chantaje de Putin¡±. El presidente anunci¨® adem¨¢s lo que varias industrias alimentadas por cogeneraci¨®n llevaban meses esperando. ¡°Vamos a aprobar una excepci¨®n para las instalaciones de cogeneraci¨®n de las industrias con gran consumo de gas, permitiendo que de manera temporal queden cubiertas por el mecanismo ib¨¦rico¡±, asegur¨® el presidente. Un total de 400 de las 600 que hay en Espa?a ya estaban parando su producci¨®n. S¨¢nchez tambi¨¦n intent¨® en todo momento contestar el ¡°catastrofismo¡± de la oposici¨®n. ¡°Las medidas no van a ser dram¨¢ticas, no va a haber apagones de electricidad ni acumulaci¨®n de bombonas de gas ni escenas apocal¨ªpticas como las que plantea la derecha pol¨ªtica y medi¨¢tica de nuestro pa¨ªs estos d¨ªas. Lo que s¨ª vamos a hacer es emitir recomendaciones de ahorro¡±, resumi¨®.
Pero a medida que avanzaba el encuentro deriv¨® en un cruce personal entre los dos l¨ªderes, en el que el verdadero examinado parec¨ªa Feij¨®o. La cuesti¨®n no es menor desde el punto de vista pol¨ªtico, porque en La Moncloa est¨¢n convencidos de que este cruce deb¨ªa servir para que los ciudadanos conozcan m¨¢s la l¨ªnea pol¨ªtica del l¨ªder del principal partido de la oposici¨®n.
Romper la estrategia
En el Gobierno est¨¢n intentando romper la estrategia de Feij¨®o, que seg¨²n la ven ellos pasa por no mojarse demasiado, evitar muchas posiciones pol¨¦micas ¡ªal contrario de lo que hac¨ªa Pablo Casado¡ª y dejar que la crisis econ¨®mica haga el trabajo de desgaste del Gobierno y, sobre todo, evitar movilizar a la izquierda contra el PP. Por eso, S¨¢nchez dedic¨® casi una hora a destripar todas las posiciones de Feij¨®o y le acus¨® de ser el ¨²nico responsable de que no haya pactos entre los dos grandes partidos en cuestiones de Estado, al contrario, record¨®, de lo que hizo ¨¦l con Mariano Rajoy cuando era l¨ªder de la oposici¨®n y apoy¨® la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n frente al desaf¨ªo independentista catal¨¢n.
El PP recibi¨® con sorpresa el largo ataque de S¨¢nchez, pero en el partido la mayor¨ªa de las fuentes consultadas dudaban de que esa estrategia del presidente fuera a surtir efecto. ¡°S¨¢nchez ha debutado como l¨ªder de la oposici¨®n¡±, dec¨ªan con iron¨ªa en el equipo de Feij¨®o. ¡°Parece que se examina Feij¨®o¡±, comentaba un senador resumiendo el sentir en la bancada de los populares. ¡°Esos ataques a Feij¨®o le ayudan m¨¢s que le hacen da?o¡±. En el partido vieron al l¨ªder del PP ¡°al principio un poco nervioso¡±, pero ¡°sin salirse del guion, todo econom¨ªa y colocando las propuestas¡±, apunta un dirigente. Adem¨¢s, en el PP se felicitaron de que S¨¢nchez asumiera otra de sus propuestas, la de extender la compensaci¨®n del tope de gas a algunas empresas, aunque eso significara arrebatarles otra bandera. En el entorno de Feij¨®o parec¨ªan muy satisfechos, convencidos de que un debate como este demuestra que el l¨ªder del PP es la alternativa. ?l le dijo a los suyos medio en broma medio en serio que ¡°durante una hora se sinti¨® presidente del Gobierno¡±, por el trato que le dispens¨® S?nchez, y que se hab¨ªa ¡°divertido¡±. En el entorno de S¨¢nchez estaban satisfechos pero por el motivo contrario: ¡°misi¨®n cumplida, el presidente ha expuesto sus medidas y ha demostrado que Feij¨®o no est¨¢ preparado y no tiene alternativa¡±. Tanto en el PP como en el PSOE se?alaban que esta estrategia est¨¢ pensada para movilizar a los votantes socialistas e identificar a Feij¨®o como un l¨ªder insolvente y falt¨®n para cambiar la imagen que se estaba instalando en la opini¨®n p¨²blica sobre el gallego.
Feij¨®o hab¨ªa preparado un discurso muy duro con el Gobierno conteniendo el tono. Atac¨® por el alza de la energ¨ªa, de los precios, por la divisi¨®n del Ejecutivo y sus alianzas. Solo se sali¨® del tono moderado cuando habl¨® de ¡°racionamiento energ¨¦tico¡± por el decreto de verano, algo que luego le reproch¨® S¨¢nchez. El l¨ªder del PP quer¨ªa adem¨¢s sorprender con un movimiento que marcara la agenda al Gobierno, pero este, sin embargo, cay¨® en saco roto, y el presidente no lo atendi¨®. Feij¨®o ofert¨® a S¨¢nchez que rompa con Podemos y se apoye en el PP para gobernar, pero esa propuesta quedaba desinflada por falta de todo acuerdo entre el Gobierno y el PP hasta la fecha. En los cinco meses desde que lleg¨® a la presidencia del PP ni siquiera ha sido posible el m¨ªnimo pacto para desbloquear el Poder Judicial. De hecho S¨¢nchez, por primera vez, le dijo a Feij¨®o a la cara que est¨¢ mintiendo cuando dice que no conoc¨ªa el acuerdo entre la anterior direcci¨®n del PP y el Gobierno para renovar el Constitucional, que se hizo por escrito, porque el presidente se lo coment¨® cuando se vieron en abril.
El debate ha dejado muy claro que la relaci¨®n entre el Gobierno y el PP atraviesa uno de los peores momentos de los ¨²ltimos a?os y nada parece indicar que pueda resolverse ahora que empieza un largo periodo electoral. El PP ha decidido alentar incluso un bloqueo en el intento de renovaci¨®n del Tribunal Constitucional que est¨¢ promoviendo un conservador como el presidente del CGPJ, Carlos Lesmes. Ni siquiera ah¨ª parece haber posibilidades de acercamiento. Mucho menos en la pol¨ªtica econ¨®mica. La pol¨ªtica espa?ola sube decibelios a medida que se acercan las elecciones y la cuesti¨®n de la solvencia del l¨ªder de la oposici¨®n ¡ªa la que ¨¦l opone sus dudas sobre la solvencia del presidente¡ª ser¨¢ uno de los asuntos determinantes del debate en los pr¨®ximos meses.