Un bot¨ªn de 400.000 euros en joyas enterrado en mitad de un pinar de C¨¢diz

Mar¨ªa, nombre ficticio, se inclina sobre la mesa del bodeg¨®n de joyas de la comisar¨ªa de C¨¢diz con ese pellizco en el est¨®mago que le aflige desde que, el pasado 4 de agosto, su vecina le avis¨® de que le hab¨ªan reventado la puerta de su casa para robarle. ¡°Faltan los pendientes de luto de mi abuela¡±, explica la mujer, mientras inspecciona decenas de alhajas. Agrupadas y etiquetadas como ¡°bolsa n¨²mero 6¡å brillan ...

Mar¨ªa, nombre ficticio, se inclina sobre la mesa del bodeg¨®n de joyas de la comisar¨ªa de C¨¢diz con ese pellizco en el est¨®mago que le aflige desde que, el pasado 4 de agosto, su vecina le avis¨® de que le hab¨ªan reventado la puerta de su casa para robarle. ¡°Faltan los pendientes de luto de mi abuela¡±, explica la mujer, mientras inspecciona decenas de alhajas. Agrupadas y etiquetadas como ¡°bolsa n¨²mero 6¡å brillan sortijas, colgantes, camafeos o collares cuajados de esmeraldas, brillantes, zafiros y tanzanitas valorados en m¨¢s de 300.000 euros. Pero Mar¨ªa se alegra cuando encuentra un anillo de tipo lanzadera, quiz¨¢s no tan espectacular como el resto pero con un valor m¨¢s all¨¢ de lo material: ¡°Es a lo que m¨¢s cari?o le tengo porque era de mi madre¡±. La ¡°bolsa n¨²mero 6¡å es parte del bot¨ªn incautado por la polic¨ªa a una banda formada por tres ciudadanos croatas, de entre 23 y 29 a?os, que est¨¢n ya en prisi¨®n acusados de 19 robos como este por toda Espa?a. Enterraban las joyas, metidas en calcetines, en mitad de un pinar de Conil de la Frontera (C¨¢diz).

La gaditana se ha reencontrado la ma?ana de este mi¨¦rcoles con ese tesoro, compuesto a base de herencia familiar y su gusto personal por la joyer¨ªa, cuando crey¨® ¡°que nunca m¨¢s lo volver¨ªa a ver¡±. No le faltaba raz¨®n a la mujer porque los investigadores de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de C¨¢diz tuvieron que lanzar una petici¨®n de auxilio al Grupo Operativo de Intervenciones T¨¦cnicas (GOIT) de la Polic¨ªa ¡ªespecializado en localizar cad¨¢veres, dinero o droga en lugares de dif¨ªcil acceso¡ª para dar con un bot¨ªn en joyas de m¨¢s de 400.000 euros que sab¨ªan enterrado en alg¨²n punto por determinar de una superficie de pinar de casi una hect¨¢rea. ¡°Eso es una barbaridad. Ha sido una investigaci¨®n de pico y pala¡±, resume el jefe de la Secci¨®n de Operaciones T¨¦cnicas del GOIT, que elude dar su nombre.

Al final, tras muchas batidas con el detector de metales consiguieron dar con una bolsa enterrada a los pies de un pino. Dentro estaban las joyas, en los calcetines blancos y anudados que d¨ªas antes la banda hab¨ªa usado para cometer sus robos sin dejar huellas. Gracias a la vigilancia a la que sometieron a los sospechosos durante d¨ªas, los investigadores sab¨ªan que ese pinar, ubicado en la urbanizaci¨®n conile?a de Roche, era un punto caliente que podr¨ªa depararles sobresaltos. Tampoco les resultaba extra?o el modus operandi de los croatas: ya en 2017 la polic¨ªa de C¨¢diz esclareci¨® otro robo en el que ladrones de la misma nacionalidad enterraron su bot¨ªn en el parque Genov¨¦s de la capital. ¡°Lo hacen para asegurar el bot¨ªn. Lo esconden ah¨ª para que no sea detectado, hasta que ya lo sacan y se lo llevan fuera del pa¨ªs¡±, ha explicado uno de los inspectores jefes que ha presentado este mi¨¦rcoles la denominada Operaci¨®n Split.

La ma?ana del pasado 4 de agosto, Mar¨ªa y su marido dejaron su casa en la Alameda Apodaca para viajar hasta Santiago de Compostela. Los ladrones lo sab¨ªan, aunque la Polic¨ªa a¨²n no ha atado cabos de c¨®mo seleccionaban a sus v¨ªctimas. Forzaron la puerta con destornilladores para hacer palanca. ¡°Lo revolvieron todo y se llevaron mis joyas en un cubo de basura¡±, cuenta Mar¨ªa. No fue el ¨²nico palo: en el mismo d¨ªa, la polic¨ªa recibi¨® otra llamada alertando de otra sustracci¨®n en un domicilio de la calle Rosario. Pero los delincuentes no contaban con una vecina que les vio en el primer domicilio. ¡°Supimos que eran unos croatas ya conocidos¡±, apunta el investigador. Resultaron ser Daniel J. (29 a?os), su pareja Vera S. (26 a?os) y un compinche, David V. (23 a?os). El primero era el cerebro de la c¨¦lula; ella ¡ªsu pareja¡ª, la experta en forzar las puertas; y el tercero, una suerte de becario que estaba aprendido el oficio y el ¨²nico que no ten¨ªa antecedentes. Los detenidos viajaban en un coche azul y una caravana, acompa?ados por los hijos de Vera S., de siete y ocho a?os.

Tras dar con el grupo en un hostal de C¨¢diz, los polic¨ªas iniciaron un seguimiento sobre ellos que les llev¨® hasta Algeciras, pasando por el pinar de Conil. Les descubrieron en la ciudad algecire?a el pasado 9 de agosto, mientras daban un palo en dos ¨¢ticos contiguos. En la caravana ¡ªestacionada en Palmones (Los Barrios)¡ª, encontraron 7.000 euros en efectivo y joyas que estaban identificadas como desaparecidas, desde un robo perpetrado en A Coru?a en 2016. El coche result¨® estar implicado en otro delito en Portugal y la autocaravana estaba puesta a nombre de la abuela de los ni?os ¡ªbajo cuya custodia est¨¢n ahora¡ª, tambi¨¦n con antecedentes penales por los mismos hechos.

El Juzgado de Instrucci¨®n N¨²mero 4 de C¨¢diz ha decretado el ingreso en prisi¨®n de los tres presuntos ladrones. La Polic¨ªa les imputa m¨¢s de 19 robos en C¨¢diz, Jerez, Puerto Real, M¨¢laga, Velez-M¨¢laga o Huelva. Con todo, los investigadores son conscientes de que son solo una c¨¦lula que responde a una mafia mayor que, cada verano, les recluta para perpetrar robos itinerantes por toda Espa?a. ¡°Vuelven cada a?o. Estos, en concreto, estaban asentados en Italia. Con lo robado, parte del dinero lo mandaban a sus familias y otra al l¨ªder de la mafia, que seguimos sin saber qui¨¦n es¡±, apunta el investigador de la UEDV. Con el bot¨ªn de Mar¨ªa no les dio tiempo, algunos anillos y pendientes los ha recuperado a medio machacar o sin las piedras. Adem¨¢s, la gaditana asegura que le faltan todas las piezas de plata de su joyero. Pero aun as¨ª est¨¢ contenta y agradecida. ¡°Cre¨ªa que no iba a recuperar nada, as¨ª que lo que he sentido al localizar esto es mucha satisfacci¨®n¡±, explica la mujer, emocionada.