La Fiscal¨ªa insta al Gobierno a facilitar que los refugiados puedan pedir asilo en embajadas y fronteras sin tener que arriesgar la vida
El ministerio p¨²blico se?ala, en el decreto en el que archiva las diligencias por la tragedia de Melilla, las fallas del sistema
La Fiscal¨ªa archiv¨® este viernes la investigaci¨®n sobre la tragedia de Melilla del pasado 24 de junio porque no apreci¨® indicios de delito en la actuaci¨®n de las fuerzas de seguridad espa?olas. La fiscal descarta el delito de homicidio imprudente al no poder concluir que la actuaci¨®n de los agentes contribuyese en alguna medida a la muerte de al menos 23 migrantes y refugiados; y tampoco aprecia un delito de omisi¨®n del deber d...
La Fiscal¨ªa archiv¨® este viernes la investigaci¨®n sobre la tragedia de Melilla del pasado 24 de junio porque no apreci¨® indicios de delito en la actuaci¨®n de las fuerzas de seguridad espa?olas. La fiscal descarta el delito de homicidio imprudente al no poder concluir que la actuaci¨®n de los agentes contribuyese en alguna medida a la muerte de al menos 23 migrantes y refugiados; y tampoco aprecia un delito de omisi¨®n del deber de auxilio porque considera que los guardias civiles no fueron conscientes de la situaci¨®n de riesgo en la que se encontraban los migrantes. El decreto, sin embargo, se detiene a lo largo de varias p¨¢ginas en las ¡°posibles fallas de un sistema¡± que permite que personas merecedoras de protecci¨®n internacional pongan en riesgo su vida. Mantiene que faltan mecanismos reales para pedir asilo, y pide soluciones.
La fiscal, Beatriz S¨¢nchez, reflexiona sobre este aspecto al referirse a las 470 devoluciones de personas en la frontera que se realizaron aquel 24 de junio. A diferencia del Defensor del Pueblo, el ministerio p¨²blico s¨ª respalda la legalidad de esa actuaci¨®n, pero recuerda que las dos sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y del Tribunal Constitucional que juzgaron este procedimiento no avalan su ¡°uso indiscriminado¡±, y advierte de que deben observarse ¡°una serie de exigencias¡± aplicables al Estado espa?ol y a los ministerios implicados en la pol¨ªtica migratoria. Entre ellas, las sentencias asumen que Espa?a debe tener mecanismos adecuados para garantizar que los refugiados tengan ¡°posibilidades reales de solicitar visado, protecci¨®n internacional o asilo en las oficinas diplom¨¢ticas o consulares espa?olas en los pa¨ªses de origen o de tr¨¢nsito o, incluso, en Marruecos, as¨ª como en los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla¡±. En su escrito, la fiscal se?ala las dificultades que los migrantes, especialmente los subsaharianos, tienen para acceder a esas v¨ªas. ¡°Si se promoviesen medidas que mejorasen el acceso a estos canales [...] podr¨ªan reducirse estos saltos o el n¨²mero de participantes en los mismos¡±, subraya.
Pedir asilo en un puesto fronterizo, sea en Ceuta o en Melilla, es casi una misi¨®n imposible y as¨ª lo refleja la Fiscal¨ªa. ¡°Son notorias las dificultades que tienen las personas migrantes, especialmente si son subsaharianas, para acceder a la parte espa?ola de Beni Enzar [Melilla], pues ello implica traspasar previamente el control migratorio de la polic¨ªa marroqu¨ª que de facto mantiene a estas personas alejadas de la frontera, muchas de las cuales carecen de documentaci¨®n que las permita acceder a territorio espa?ol¡±. La ley de asilo, aprobada en 2009, tambi¨¦n contempla la posibilidad de solicitar asilo ante las representaciones diplom¨¢ticas, pero las autoridades se han estado parapetando todos estos a?os en que no existe un reglamento en el que se desarrollen los tr¨¢mites que deben seguirse.
La v¨ªa de las embajadas, sin embargo, puede aplicarse si hay voluntad pol¨ªtica, como est¨¢ sucediendo (aun con muchas limitaciones) con centenares de afganos que est¨¢n acudiendo a esta f¨®rmula en las misiones diplom¨¢ticas espa?olas en Pakist¨¢n o Ir¨¢n. En 2009 una circular enviada a todas las embajadas daba instrucciones para que el embajador eval¨²e los casos y el riesgo que corre la persona interesada y apruebe o no la emisi¨®n de un salvoconducto para que pueda viajar a Espa?a y formalizar aqu¨ª el proceso. Tambi¨¦n la jurisprudencia del Tribunal Supremo estableci¨® que la ley tiene elementos suficientes para poder trasladar a un solicitante de asilo a territorio nacional, independientemente de que haya o no reglamento.
La imposibilidad pr¨¢ctica de usar los mecanismos para pedir asilo, una cuesti¨®n enterrada en el debate p¨²blico, resurgi¨® tras la tragedia de Melilla en junio. De hecho, ha sido el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien ha repetido en varias ocasiones que existen v¨ªas legales para pedir asilo en Espa?a sin tener que saltar una valla. En su ¨²ltima comparecencia en el Congreso, el ministro dijo: ¡°Espa?a es un pa¨ªs de acogida para cualquier solicitante de asilo que llama a nuestras puertas, pero no puede permitir que nadie intente derribarlas por la fuerza¡±.
Casi seis meses despu¨¦s de la tragedia, Espa?a se ha encontrado ahora con un caso que pone a prueba el cumplimiento de la ley por parte de las autoridades y la veracidad de ese discurso pol¨ªtico. Un refugiado sudan¨¦s de 24 a?os, que sobrevivi¨® precisamente a la tragedia de Melilla y que fue expulsado ese d¨ªa por la Guardia Civil desde territorio nacional, acudi¨® a la embajada espa?ola de Rabat para pedir asilo el pasado 13 de diciembre. Alega persecuci¨®n religiosa en su pa¨ªs y temor por su vida en Marruecos. La embajada acept¨® y sell¨® su documentaci¨®n pero, desde entonces, silencio.
La diputada del PP Ana V¨¢zquez pregunt¨® espec¨ªficamente por este caso a Grande-Marlaska el pasado mi¨¦rcoles en el Congreso: ¡°Hoy, se?or ministro, su vida [la de este refugiado] en Marruecos corre peligro, por razones que a nadie se le escapan, y usted, se?or Marlaska, todav¨ªa no le ha abierto la puerta espa?ola, a la que ¨¦l con urgencia y desesperaci¨®n est¨¢ tocando. Haga algo, porque si no le habremos dado dos veces con la puerta en las narices. ?Va usted a garantizar el derecho de asilo? ?Qu¨¦ va a pasar con este caso, se?or Marlaska?¡±. El ministro evit¨® la cuesti¨®n en sus r¨¦plicas hasta dar, finalmente, una respuesta gen¨¦rica: ¡°Todas las peticiones de protecci¨®n internacional se estudian y tenemos una Oficina de Asilo y Refugio que desde luego no tiene nada que ver con la que ten¨ªan ustedes en junio de 2018¡å.
El equipo jur¨ªdico que asiste al joven de forma gratuita, Demos, Estudio Legal de Derechos Humanos, ha alertado del peligro que corre en Marruecos despu¨¦s de haber dado el paso de pedir protecci¨®n. Teme represalias de las autoridades marroqu¨ªes al haber denunciado ser v¨ªctima de tortura y tratos inhumanos. Desde que acudi¨® a la embajada, este joven permanece semiescondido y alerta ante las consecuencias que pueda tener su decisi¨®n.
Para concluir su escrito, la fiscal afirma que debe tenerse en cuenta que ¡°la crisis migratoria¡± es ¡°un problema global¡± que ¡°previsiblemente se ver¨¢ incrementado como consecuencia de conflictos b¨¦licos, pandemias y cat¨¢strofes derivadas del cambio clim¨¢tico¡±. Y a?ade: ¡°El drama que sufren miles de personas en situaci¨®n de pobreza y riesgo en sus pa¨ªses de origen, especialmente en el ?frica subsahariana, conlleva inevitablemente su huida hacia Europa en busca de un proyecto de vida pr¨®spero para ellos y los suyos, lo que hace necesario habilitar pol¨ªticas migratorias p¨²blicas flexibles y coherentes con la situaci¨®n de cada momento, acordes con el respeto a los derechos humanos de los migrantes y de los tratados y convenios internacionales¡±.