Las pensiones dan ox¨ªgeno a la coalici¨®n y presionan al PP
Mientras en Francia puede caer el Ejecutivo por los recortes en las prestaciones, en Espa?a se pacta una reforma sin ajustes
Dos escenas casi simult¨¢neas este jueves en Par¨ªs y Madrid dan idea de lo distinta que se ve la pol¨ªtica espa?ola desde dentro y desde fuera y el momento tan diferente que vive Pedro S¨¢nchez, con tres Presupuestos aprobados y una mayor¨ªa estable pese a los desaf¨ªos que le plantean de forma constante sus socios de Podemos o ERC, y otros l¨ªderes europeos.
Casi a la misma hora en la que el Consejo de Ministros aplaud¨ªa en pleno al titul...
Dos escenas casi simult¨¢neas este jueves en Par¨ªs y Madrid dan idea de lo distinta que se ve la pol¨ªtica espa?ola desde dentro y desde fuera y el momento tan diferente que vive Pedro S¨¢nchez, con tres Presupuestos aprobados y una mayor¨ªa estable pese a los desaf¨ªos que le plantean de forma constante sus socios de Podemos o ERC, y otros l¨ªderes europeos.
Casi a la misma hora en la que el Consejo de Ministros aplaud¨ªa en pleno al titular de Seguridad Social, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, por haber logrado el aparente milagro de pactar con Bruselas, con Podemos y con los sindicatos una reforma de las pensiones sin ajustes, Emmanuel Macron recib¨ªa la noticia de que no iba a tener votos suficientes para aprobar su recorte a las pensiones francesas, que tiene a los sindicatos en guerra, la calle incendiada y amenaza con cobrarse a la primera ministra, ?lisabeth Borne.
Mientras Escriv¨¢ comparec¨ªa euf¨®rico en La Moncloa, Macron estaba convocando en Par¨ªs una reuni¨®n extraordinaria de sus ministros para aprobar la reforma por decreto sin votaci¨®n, algo inviable en Espa?a y que puede hacer caer al Ejecutivo galo tras una moci¨®n de censura que ya se est¨¢ preparando.
Francia ajusta las pensiones, Espa?a las mejora. Esto es posible, explica Escriv¨¢, porque Espa?a hizo los deberes con reformas de pensiones anteriores ¡ªen 2011 se aprob¨® la edad de jubilaci¨®n a los 67 a?os y Francia est¨¢ en guerra por subirla a 64¡ª pero tambi¨¦n porque el Gobierno espa?ol ha logrado negociar con Bruselas esta reforma sin ajustes.
Y esta ¨²ltima parte es la m¨¢s sorprendente y la que m¨¢s reivindica el Gobierno como ¨¦xito pol¨ªtico que, en su opini¨®n, anula las cr¨ªticas de la oposici¨®n. Si est¨¢ avalado por Bruselas, no puede ser un parche, se?alan en La Moncloa. De hecho, el hombre clave de las negociaciones con la Comisi¨®n es Declan Costello, un dur¨ªsimo funcionario de la comisar¨ªa de Econom¨ªa que se hizo famoso en 2015 porque fue el jefe de los hombres de negro que se instalaron en Atenas en plena crisis y forzaron al Gobierno de Alexis Tsipras a hacer dur¨ªsimos ajustes que hundieron a¨²n m¨¢s la econom¨ªa griega.
Despu¨¦s de dos meses de negociaciones con Escriv¨¢ y eternas discusiones sobre unos n¨²meros que a Bruselas no acababan de cuadrarles, Costello y sobre todo su jefe pol¨ªtico, el sociadem¨®crata italiano Paolo Gentiloni, aceptaron que Espa?a reforme sus pensiones en positivo y sin ajustes, ni siquiera una ampliaci¨®n obligatoria del periodo de c¨®mputo, que Podemos rechaz¨® de plano hasta el final.
Pedro S¨¢nchez suele repetir que cuando viaja a Bruselas, lejos de preguntarle por Podemos o las tensiones internas del Ejecutivo ¡ªcomo es habitual en Espa?a¡ª, los dem¨¢s l¨ªderes le comentan c¨®mo es posible que Espa?a, con un Parlamento tan fraccionado como los dem¨¢s socios y un Gobierno de coalici¨®n en minor¨ªa ¡ªle faltan 22 esca?os para la absoluta¡ª haya sido capaz de sacar adelante tres Presupuestos y decenas de reformas de gran calado, como la laboral ¡ªque sali¨® por la m¨ªnima y de rebote, pero pas¨®¡ª o, ahora, esta de pensiones, que ya parece contar con una s¨®lida mayor¨ªa para ser aprobada, pese al rechazo del PP. En estos momentos hay varios pa¨ªses europeos que tienen comprometidas reformas de pensiones con la Comisi¨®n Europea, dentro del plan de recuperaci¨®n para recibir los fondos europeos. Y la mayor¨ªa sufre graves dificultades para lograr apoyos en sus parlamentos a los planes que manejan los gobiernos, seg¨²n coinciden fuentes del Ejecutivo acostumbradas a tratar con Bruselas.
La reforma de pensiones ha supuesto as¨ª esta semana un bal¨®n de ox¨ªgeno para la coalici¨®n, no solo porque ha logrado pactarla despu¨¦s de m¨¢s de un a?o de intensas negociaciones, sino por el mensaje pol¨ªtico que lanza y que el Gobierno aprovechar¨¢ con toda probabilidad en todos los foros posibles, incluido el de la moci¨®n de censura que empieza el martes en el Congreso.
Asociar a Feij¨®o con recortes
Pedro S¨¢nchez y Yolanda D¨ªaz quieren centrar la campa?a electoral en una idea fuerte: la izquierda gobierna mejor, ayuda a crear empleo, sube el salario m¨ªnimo, mejora las condiciones con la reforma laboral, sube las pensiones (sobre todo, las m¨ªnimas) y evita los ajustes que dominaron la anterior crisis, con el PP de Mariano Rajoy, gran referente de Alberto N¨²?ez Feij¨®o, en La Moncloa.
El Gobierno progresista suele obviar que tambi¨¦n el PSOE hizo recortes duros en el final del segundo Ejecutivo de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, algo que llev¨® a los socialistas a la debacle electoral de 2011.
Pero la clave de esta campa?a est¨¢ en asociar a Feij¨®o con posibles ajustes, privatizaciones y recortes del Estado del bienestar frente a un gobierno progresista que lo ampl¨ªa. Y ah¨ª, la reforma de las pensiones es decisiva, seg¨²n entienden en los dos sectores del Gobierno.
En La Moncloa est¨¢n siguiendo con mucha atenci¨®n los movimientos de Feij¨®o. Y quieren forzarle a definirse, porque creen que si lo hiciera dejar¨ªa claro que su apuesta es un ajuste en l¨ªnea con el que hizo Rajoy en 2013, y que el PSOE y Unidas Podemos han derogado: el que establec¨ªa una subida del 0,25% de las pensiones si el Estado ten¨ªa mucho d¨¦ficit, algo que habr¨ªa sido demoledor con la inflaci¨®n actual.
El jueves, Escriv¨¢, que no suele meterse en asuntos pol¨ªticos, se lanz¨® contra el l¨ªder del PP por su ¡°falta de respeto¡± al criticar la reforma sin ofrecer una alternativa. Una discusi¨®n pol¨ªtica sobre pensiones ser¨ªa un sue?o para un Gobierno que acaba de subirlas un 8,5%. Un espacio ideal para contrastar los ¡°dos modelos¡± de los que habla S¨¢nchez. Pero, precisamente por eso, es casi seguro que Feij¨®o evitar¨¢, todo lo que pueda, entrar en ese delicado campo de juego.