La candidatura de Yolanda D¨ªaz agita el tablero pol¨ªtico
El PP reconoce que la vicepresidenta puede movilizar a la izquierda, pero cree que sobre todo restar¨¢ voto al PSOE, mientras los socialistas tratan de remar para que alcance un acuerdo con Podemos
La candidatura de Yolanda D¨ªaz a la presidencia del Gobierno bajo la nueva marca de Sumar ha agitado el tablero pol¨ªtico, y la onda expansiva de la propuesta electoral de la pol¨ªtica mejor valorada de Espa?a, seg¨²n el CIS, alcanza m¨¢s all¨¢ del espacio electoral de la izquierda. El resto de los partidos han analizado las posibles consecuencias del lanzamiento el domingo de la vicepresidenta segunda del Gobierno a la carrera por La Moncloa, conscientes de que cualquier movimiento de piezas en la competici¨®n electoral tiene potenciales efectos en el resto. El PP, que va en cabeza en la mayor¨ªa de los sondeos de intenci¨®n de voto, reconoce que D¨ªaz puede movilizar a la izquierda, que aparec¨ªa en los estudios de opini¨®n desmotivada, aunque cree que la vicepresidenta restar¨¢ sobre todo voto al PSOE; mientras los socialistas tratan de remar para que alcance un acuerdo con Podemos.
La apuesta de D¨ªaz presenta todav¨ªa importantes inc¨®gnitas ¨Dla principal, si llegar¨¢ o no a un entendimiento con Podemos¨D como para calibrar su impacto en el tablero, pero en las centrales de mando de los partidos ya han tomado nota de algunos rasgos novedosos de su proyecto pol¨ªtico. Sobre todo, el cambio de estilo que D¨ªaz presenta con respecto a Podemos, como una izquierda m¨¢s amable y dialogante, lo que abre la puerta a que tenga capacidad de penetrar en un electorado m¨¢s transversal que el exclusivo del espacio a la izquierda del PSOE.
Los socialistas son los principales concernidos por la transformaci¨®n de sus adversarios en el espacio progresista y saludan que haya echado a andar el proyecto de la ministra de Trabajo, con el argumento de que la organizaci¨®n de todas las marcas a su izquierda permite que sumen y pueda revalidarse la coalici¨®n de Gobierno progresista. La preocupaci¨®n en La Moncloa es que al final no sea posible un acuerdo entre D¨ªaz y Podemos y la divisi¨®n penalice sus opciones electorales, de ah¨ª que el sector socialista en el Gobierno est¨¦ tratando de remar para que pacten. ¡°Es una muy buena noticia para Espa?a, para nuestro pa¨ªs y para todos los votantes progresistas que todas esas fuerzas pol¨ªticas variadas que est¨¢n a la izquierda del PSOE se organicen y vayan unidas a las elecciones¡±, defendi¨® el lunes el ministro de la Presidencia, F¨¦lix Bola?os. ¡°Ser¨ªa todav¨ªa mejor noticia que fueran unidas todas las fuerzas pol¨ªticas sin excepci¨®n. Ese ser¨ªa nuestro deseo¡±, reconoci¨® al mismo tiempo que intentaba presionar a Podemos para que se aviniera a un acuerdo.
Los socialistas celebran la apuesta de la ministra de Trabajo porque creen que as¨ª tendr¨¢n m¨¢s opciones de reeditar el Gobierno de coalici¨®n, seg¨²n los mensajes que han aducido tras el acto de lanzamiento de D¨ªaz. ¡°Ayer [por el domingo]¡±, celebr¨® el lunes Bola?os, ¡°fue un d¨ªa para que los votantes progresistas tengan la ilusi¨®n de que va a haber una legislatura m¨¢s de avances sociales en Espa?a y que la va a haber de la mano de Pedro S¨¢nchez¡±. En ese an¨¢lisis se encuadra el espacio que La Moncloa cedi¨® a D¨ªaz en la moci¨®n de censura de Vox.
No obstante, en el PSOE tambi¨¦n hay dudas sobre el impacto del proyecto de la vicepresidenta en su propio electorado, que podr¨ªa verse atra¨ªdo por una figura con la que presenta muchos m¨¢s puntos en com¨²n que sus predecesores en Podemos, como Pablo Iglesias, Irene Montero y Ione Belarra. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garc¨ªa Page, puso voz a esas dudas al reconocer, el domingo en una entrevista en La Raz¨®n, que podr¨ªa ocurrir que D¨ªaz robara tambi¨¦n votantes a los socialistas. ¡°Conozco gente que ahora mismo est¨¢ dudando entre votar al PSOE o a Yolanda D¨ªaz a nivel nacional¡±, advert¨ªa el bar¨®n.
Esa es la tesis principal del PP, la de que D¨ªaz puede terminar siendo un problema para el PSOE, porque su propuesta menos escorada compite tambi¨¦n por el electorado m¨¢s centrado en la izquierda. Los populares niegan estar preocupados por el hecho de que la vicepresidenta segunda pueda ser una rival m¨¢s competitiva que su predecesor, Pablo Iglesias. ¡°Una candidata que es vicepresidenta de S¨¢nchez y que es militante del Partido Comunista al PP no le preocupa nada, como usted entender¨¢. A quien le deber¨ªa preocupar el roto que le pueda hacer es a Pedro S¨¢nchez. Ojo con las marcas blancas. Y a Pablo Iglesias, que fue su padre pol¨ªtico y hoy tiene su semana de pasi¨®n¡±, subray¨® el lunes el portavoz de campa?a del PP, Borja S¨¦mper, que tambi¨¦n incidi¨® en la divisi¨®n entre D¨ªaz y Podemos para desgastar al Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez. ¡°Es un Gobierno que lleg¨® a este fin de semana siendo bipartito y ha salido siendo tripartito¡±, apunt¨® S¨¦mper.
Pero en la direcci¨®n del PP tambi¨¦n reconocen que la candidatura de D¨ªaz puede actuar como un revulsivo y movilizar a la izquierda, que hasta ahora aparec¨ªa desmotivada en las encuestas, lo que podr¨ªa suponer un problema para las expectativas electorales de Alberto N¨²?ez Feij¨®o. Aunque sostienen que la propuesta amable de la pol¨ªtica gallega tambi¨¦n corre el riesgo de dejarse por el camino al electorado m¨¢s escorado a la izquierda. ¡°?La izquierda rupturista del 15-M, el anticapitalismo, va a movilizarse con la izquierda chuli de Yolanda D¨ªaz?¡±, inquieren fuentes de G¨¦nova, que tambi¨¦n llaman la atenci¨®n sobre que Sumar est¨¦ ¡°devaluando la marca de Podemos¡± con la disputa sobre su integraci¨®n, cuando es Podemos ¨Dy no Sumar¨D, quien se va a presentar en las elecciones auton¨®micas y municipales de mayo.
El PP se frota las manos ante la posibilidad de que un pinchazo de Podemos en mayo pueda granjearle a la derecha m¨¢s gobiernos auton¨®micos y locales. ¡°Lo que nos va bien es que D¨ªaz y Podemos se peleen¡±, admiten en el cuartel general del PP, precisamente el escenario que tratan de evitar a toda costa los socios que integran la coalici¨®n progresista en La Moncloa.
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