An¨¢lisis visual | C¨®mo eran las dos plantas de Fonda Milagros, la discoteca incendiada en Murcia
Las im¨¢genes y v¨ªdeos difundidos por el propio local, donde murieron 13 personas, permiten recrear su interior e identificar las zonas m¨¢s alejadas de la ¨²nica v¨ªa de salida
La discoteca Fonda Milagros es parte de un complejo de cuatro naves industriales convertidas en tres locales de ocio. Seg¨²n los datos del catastro, se construyeron en 1987 y est¨¢n en la misma parcela en Atalayas, zona del noreste de Murcia.
En 2008 se inaugur¨® Teatre, con licencia para discoteca con cocina. En junio de 2019 se solicit¨® una modificaci¨®n para dividir el local en dos: Teatre y Fonda Milagros. Las redes sociales del nuevo club llevaban entonces ya tres meses anunciando fiestas y conciertos en la discoteca, que sigui¨® operando hasta el domingo. A continuaci¨®n mostramos c¨®mo era por dentro seg¨²n lo que se puede reconstruir a partir de las decenas de v¨ªdeos e im¨¢genes publicadas en redes sociales.
La divisi¨®n en dos plantas y su disposici¨®n, con una sola escalera para poder acceder a la superior, ha sido clave para el desenlace del incendio que se detect¨® sobre las seis de la ma?ana del domingo. La mayor¨ªa de los 13 fallecidos quedaron atrapados en el lado opuesto a esta v¨ªa de salida.
Dos de los cuerpos de las v¨ªctimas fueron encontrados en la planta baja, pero los bomberos creen que cayeron all¨ª de la primera tras el colapso de la estructura. Esto hace pensar que se encontraban en los reservados, peque?os palcos organizados con dos sof¨¢s enfrentados y pegados a una barandilla que daba a la planta baja, separados entre s¨ª por una cortina y una pared fina. Estaban dispuestos a modo de herradura encima de la planta baja, donde hab¨ªa un escenario, barra y mesas.
Para acceder a los palcos solo hab¨ªa una v¨ªa: la escalera que sub¨ªa desde un extremo de la herradura y daba acceso a la primera planta, donde un pasillo recorr¨ªa, por detr¨¢s, todos los palcos. Los m¨¢s lejanos de la escalera estaban al lado opuesto del local y no ten¨ªan otras v¨ªas de salida.
En el local, profusamente decorado con productos y objetos de inspiraci¨®n colombiana, abundaban elementos de f¨¢cil combusti¨®n: desde mobiliario de madera hasta plantas artificiales, pasando por sacos de yute, banderas, sombreros, bufandas y carteles de tela que colgaban de un entramado de postes de bamb¨².

Los investigadores no pueden asegurar todav¨ªa d¨®nde se origin¨® el incendio. Que se tratara de edificios pensados como naves industriales es relevante, como han explicado los bomberos, porque tienen estructuras tubulares que colapsan cuando se alcanzan temperaturas muy altas.
El fuego, adem¨¢s, se propag¨® a todos los locales que fueron parte de la nave industrial. Sobre el papel, la legislaci¨®n vigente ordena que existan unas franjas cortafuegos precisamente para evitar esta r¨¢pida propagaci¨®n.
La divisi¨®n del local original en dos no hab¨ªa sido autorizada por el Ayuntamiento de Murcia. Como consta en la documentaci¨®n difundida por el Consistorio, Teatre solicit¨® en junio de 2019 una ¡°modificaci¨®n no sustancial¡± con la que pretend¨ªa partir el local entre Teatre y Fonda Milagros. Dos a?os y medio despu¨¦s, en enero de 2022, el Ayuntamiento emiti¨® una orden de cese de actividad del local, al considerar que la modificaci¨®n s¨ª era de car¨¢cter ¡°sustancial¡±. A pesar de ello, el local ha seguido funcionando y promocionando su contenido en redes sociales. Durante la tarde del lunes, la Fonda limit¨® el acceso a sus contenidos en Instagram.
Puntos clave que no se conocen
A dos d¨ªas del incendio, siguen sin respuesta algunas de las preguntas clave para explicar la tragedia. Con los portavoces de ambos locales intercambiando acusaciones sobre el origen de las llamas, depende del avance de la investigaci¨®n determinar d¨®nde comenz¨® el incendio y con qu¨¦ sistemas de prevenci¨®n contaba cada establecimiento.
Aunque desde el Ayuntamiento apuntaron a una inspecci¨®n posterior a la orden del cese de la actividad, no se conocen los resultados de esta ni si efectivamente lleg¨® a practicarse. En las fotos de la Fonda se aprecian se?ales de extintores, pulsadores de alarma, algunos carteles que indican la direcci¨®n de la salida y consta al menos una se?alizaci¨®n de una supuesta salida de emergencia en la pared de la planta de los palcos. Por el momento, las autoridades no han podido confirmar si despu¨¦s de la partici¨®n, la nave de Fonda Milagros mantuvo alguna de estas v¨ªas de evacuaci¨®n.