Puigdemont y Turull imponen un cambio de poderes en Junts para desplazar a Laura Borr¨¤s de la toma de decisiones
La presidenta del partido es apartada del proceso negociador con el PSOE, tras su condena por fraccionar contratos y con un debate interno para renovar el cuadro de mandos
El cambio de rumbo estrat¨¦gico que ha impuesto Carles Puigdemont en Junts per Catalunya ha tendido la mano a nuevos aliados, impensables hasta hace bien poco, a la vez que ha relegado de los procesos de toma de decisi¨®n a casi todos los mandos del partido, incluso a aquellos que ten¨ªan peso espec¨ªfico a la hora de trazar la hoja de ruta. El caso m¨¢s vistoso es el de Laura Borr¨¤s, a quien Puigdemont y Jordi Turull, secretario ...
El cambio de rumbo estrat¨¦gico que ha impuesto Carles Puigdemont en Junts per Catalunya ha tendido la mano a nuevos aliados, impensables hasta hace bien poco, a la vez que ha relegado de los procesos de toma de decisi¨®n a casi todos los mandos del partido, incluso a aquellos que ten¨ªan peso espec¨ªfico a la hora de trazar la hoja de ruta. El caso m¨¢s vistoso es el de Laura Borr¨¤s, a quien Puigdemont y Jordi Turull, secretario de la formacion, han apeado del control ejecutivo del partido, pese a que sigue ocupando el cargo de presidenta de Junts. Borr¨¤s qued¨® fuera de la negociaci¨®n con el PSOE para la investidura y tampoco acudi¨® la semana pasada a Ginebra (Suiza) para consensuar la figura del verificador. ¡°La pelea interna existe, pero si Laura Borr¨¤s se va dando un portazo se lleva con ella al 50% de la militancia¡±, analiza una persona del c¨ªrculo de confianza de Borr¨¤s.
La p¨¦rdida de influencia de la presidenta de Junts aflora tras su condena judicial a 4 a?os y medio de c¨¢rcel por trocear contratos p¨²blicos y coincide con el inter¨¦s que anida dentro de la formaci¨®n para que Puigdemont ocupe alguna posici¨®n org¨¢nica. El expresident pilota el rumbo pactista que ahora abraza el partido, pero no representa ning¨²n cargo en el organigrama, lo que le evita acudir a las reuniones ejecutivas y dar explicaciones a la militancia.
Tras el 23-J, Puigdemont le argument¨® a Borr¨¤s que su condici¨®n de condenada judicial aconsejaba mantenerla apartada de la negociaci¨®n con los socialistas, atendiendo a que una de las claves del trato ten¨ªa que ser definir los t¨¦rminos de la amnist¨ªa judicial para las causas derivadas del proc¨¦s. El expresidente se apoy¨® en Jordi Turull y M¨ªriam Nogueras, portavoz de Junts en el Congreso. ¡°El equipo negociador siempre fueron el president, el secretario general y la portavoz en el Congreso¡±, manifiestan fuentes cercanas a Puigdemont. Cerrando el c¨ªrculo de colaboradores, el expresident persegu¨ªa resguardar con hermetismo los t¨¦rminos de la negociaci¨®n, incluso a costa de incomodar a Borr¨¤s o a otros altos cargos de Junts, como el presidente del grupo parlamentario, Albert Batet.
La composici¨®n se mantiene cuando Junts ya da por superada la pantalla de la amnist¨ªa y trata de lograr tratos de otro calado con los socialistas. El pasado fin de semana, en Ginebra (Suiza), Puigdemont solo cit¨® a Nogueras y a Turull para consensuar con el n¨²mero tres del PSOE, Santos Cerd¨¢n, el nombre del verificador internacional. ¡°No se hace nada a espaldas de la presidenta¡±, matizan desde el entorno de Borr¨¤s.
Ella misma ha discrepado de que su condici¨®n de condenada judicial pudiera interferir en ninguna negociaci¨®n, y es categ¨®rica cuando desmiente que su sentencia por corrupci¨®n pueda ser una carga para el partido. De momento, ha optado por mantener el tono bajo en p¨²blico, pero en compa?¨ªa de colegas de la formaci¨®n, Borr¨¤s saca a relucir a menudo una conversaci¨®n que tuvo con Jordi Pujol, santo y se?a para un sector del nacionalismo catal¨¢n. Pujol, que ha confesado que su familia tuvo en el extranjero una fortuna sin declarar, le ha reconocido a Borr¨¤s la capacidad de no verse salpicada por la ¡°mancha¡± que suele dejar la corrupci¨®n.
Borr¨¤s, 53 a?os, tiene la afici¨®n de devorar libros uno tras otro y, luego, aprovecha sus profundos conocimientos literarios para trufar de intelectualidad las citas, en forma de indirecta o recado, que cuelga en su otra gran pasi¨®n: las redes sociales. El buen redactado que exhibe, lo mismo que el tono meloso que acostumbra a dar a su voz, no esconde un car¨¢cter volc¨¢nico y en Junts se observa con especial atenci¨®n c¨®mo valora la presidenta los pactos cerrados por el t¨¢ndem Puigdemont-Turull con el PSOE, anta?o considerado una especie de bestia negra para el independentismo catal¨¢n. ¡°El partido es consciente de que si Laura Borr¨¤s dice que el pacto es bueno, la parte m¨¢s exaltada de la militancia lo considerar¨¢ bueno¡±, reconocen desde Junts.
La l¨ªder se apoya en sus buenas dotes de comunicadora para conectar con el sector m¨¢s excitado del independentismo, aquel que reniega de los m¨¦todos de la pol¨ªtica tradicional y que defiende la necesidad de que Catalu?a quiebre toda relaci¨®n con Espa?a. Borr¨¤s ha llegado a escribir un libro donde se define como ¡°Hija del 1 de octubre¡±, en alusi¨®n al refer¨¦ndum ilegal de 2017. Al ser cesada de su cargo de presidenta del Parlament, le reclam¨® al partido un sueldo y un coche oficial.
En Junts, las reacciones de la presidenta cobran trascendencia para evaluar el equilibrio de fuerzas en el partido, toda vez que ella ha sido apartada del proceso negociador y se le supone libertad para valorar unos tratos que no la involucran directamente. ¡°La presidenta ha avisado de que hay muchas posibilidades de que esto no salga bien¡±, admite una fuente cercana a Borr¨¤s.
Despu¨¦s de las elecciones, Puigdemont contact¨® con Turull y Borr¨¤s para pedir que dejaran en sus manos las condiciones que iban a poner al PSOE para apoyar la reelecci¨®n de Pedro S¨¢nchez. Puigdemont, que en 2017 se march¨® a B¨¦lgica para evitar ser juzgado, argument¨® que se estaba ante una oportunidad hist¨®rica de forzar la negociaci¨®n. Borr¨¤s hab¨ªa presumido durante la campa?a de que ella siempre le cerr¨® la puerta al PSOE, y record¨® que cuando fue diputada en el Congreso ni siquiera le aprob¨® nunca las cuentas al Ejecutivo socialista. ¡°Durante el mandato del PSOE, el Estado no ha parado de criminalizar el independentismo catal¨¢n¡±, sentenci¨® Borr¨¤s en un mitin, una semana antes de las elecciones. En marzo, la presidenta de Junts fue condenada a 4 a?os y medio de c¨¢rcel de prisi¨®n y a 13 de inhabilitaci¨®n por trocear contratos p¨²blicos para beneficiar a un conocido suyo. El Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) la conden¨® por falsedad en documento oficial y prevaricaci¨®n administrativa a ra¨ªz de un caso que, seg¨²n ella, es un ejemplo de lawfare, uso interesado de la justicia con finalidades pol¨ªticas.