El Govern retira a Eulen la gesti¨®n de dos residencias p¨²blicas por irregularidades
El Departamento de Asuntos Sociales suspende cautelarmente los servicios de la compa?¨ªa en estos dos centros hasta que se resuelva el expediente sancionador por ¡°infracciones muy graves¡±
La Generalitat de Catalu?a ha retirado a la empresa Eulen la gesti¨®n de dos residencias de ancianos en Barcelona tras detectar graves irregularidades en la gesti¨®n y atenci¨®n de los usuarios. Se trata de los centros p¨²blicos Bertran Oriola i Moss¨¨n Vidal i Aun¨°s, dos de las 13 residencias intervenidas por la Generalitat durante la crisis sanitaria provocada por la pandemia de covid-19. En su caso, el Departamento de Asuntos Sociales d...
La Generalitat de Catalu?a ha retirado a la empresa Eulen la gesti¨®n de dos residencias de ancianos en Barcelona tras detectar graves irregularidades en la gesti¨®n y atenci¨®n de los usuarios. Se trata de los centros p¨²blicos Bertran Oriola i Moss¨¨n Vidal i Aun¨°s, dos de las 13 residencias intervenidas por la Generalitat durante la crisis sanitaria provocada por la pandemia de covid-19. En su caso, el Departamento de Asuntos Sociales detect¨® infracciones ¡°graves y muy graves¡± y abri¨® un expediente sancionador a la compa?¨ªa a principios de mes que han culminado ahora con la suspensi¨®n cautelar de la gesti¨®n por parte de Eulen mientras se espera a que concluya la investigaci¨®n.
Hace un mes y medio, el Departamento de Salud intervino la residencia Moss¨¨n Vidal i Aun¨®s, de Barcelona, ante ¡°la falta de recursos¡± por parte de la entidad gestora, Eulen, para atender a los ancianos. El centro, ubicado en el barrio de La Bordeta de Barcelona, tiene una capacidad para 112 ancianos, pero estaba entonces funcionando al 52% de su ocupaci¨®n porque muchos residentes tuvieron que ser derivados a hospitales a causa de la covid-19. ¡°Ante el inminente retorno de los pacientes hospitalizados al centro y ante la falta de recursos por parte de la entidad gestora actual para atender este nuevo volumen de personas, sobre todo a nivel de personal, se ha decidido intervenir y encargar la gesti¨®n a la Fundaci¨®n Vella Terra¡±, inform¨® entonces Salud.
Esta residencia, adem¨¢s, ya estaba bajo la lupa de la Inspecci¨®n de Asuntos Sociales: el ¨®rgano fiscalizador del Departamento hab¨ªa abierto el pasado marzo un expediente a la direcci¨®n del centro y a la gestora tras conocer el presunto abuso sexual y las agresiones f¨ªsicas que sufri¨® una anciana con alzheimer por parte de tres cuidadores.
La intervenci¨®n del Departamento de Salud ¡ªque supuestamente deleg¨® la gesti¨®n en la Fundaci¨®n Vella Terra desde mayo, aunque las familias lo niegan y aseguran que Eulen sigue al frente¡ª ha culminado con una retirada cautelar de la gesti¨®n a Eulen ¡°ante las irregularidades constatadas en el funcionamiento y organizaci¨®n del servicio y que llevaron a la residencia a una situaci¨®n de afectaci¨®n generalizada por la covid-19¡å, ha explicado Asuntos Sociales en un comunicado. Aunque el Departamento no ha querido concretar qu¨¦ tipo de situaciones se han registrado en el centro, s¨ª ha admitido que la causa del expediente es ¡°una presunta infracci¨®n muy grave, que puede ser sancionada con una multa de 7.000 euros y la suspensi¨®n total de la prestaci¨®n de servicios por un per¨ªodo de cuatro a?os¡±.
¡°Llevamos 29 fallecidos y pr¨¢cticamente la totalidad de los 112 residentes que hab¨ªa han dado positivo. Esta residencia est¨¢ de desgracia en desgracia desde 2016¡å, explica Mar¨ªa Jos¨¦ Carcel¨¦n, portavoz de la Coordinadora de Residencias 5-1. No se f¨ªa de la decisi¨®n del Govern y acusa a Asuntos Sociales de mentir sobre los actuales gestores del centro Moss¨¨n Vidal i Aun¨®s. ¡°En las reuniones del Consejo de Participaci¨®n [un ¨®rgano de reuni¨®n entre la Generalitat, Ayuntamiento, familias, usuarios y trabajadores] nunca hemos visto a la Fundaci¨®n Vella Terra. La directora ha seguido siendo la de Eulen y los representantes que acud¨ªan a esas reuniones eran los de Eulen. No nos fiamos del Govern. Ahora le retiran la gesti¨®n cautelarmente pero el resultado final puede ser solo una multa y que vuelvan¡±, protesta.
Asuntos Sociales niega la mayor. ¡°Hasta ahora, con la intervenci¨®n de Salud, con las competencias que tienen, lo que ocurr¨ªa era que hab¨ªa un funcionario p¨²blico que ejerc¨ªa la direcci¨®n y una entidad (la Fundaci¨®n Vella Terra) que ejerc¨ªa la direcci¨®n operativa, pero Eulen segu¨ªa siendo el titular de la gesti¨®n del centro. Ahora lo que hacemos es suspender este concierto con Eulen y ya no llevar¨¢ la gesti¨®n, sino que lo har¨¢ una nueva entidad¡±, apunta una portavoz del Departamento. A partir de este lunes, asegura, Asuntos Sociales abrir¨¢ un proceso para encargar la gesti¨®n de estos dos centros a otra entidad.
Por otra parte, en la residencia Bertran i Oriola, situada en el barrio de la Barceloneta y que dispone de 92 plazas y otras 32 en su centro de d¨ªa, la Generalitat tambi¨¦n ha encontrado irregularidades ¡°en el funcionamiento y organizaci¨®n del servicio¡±.
Salud intervino el centro el pasado 26 de abril para ¡°reconducir la situaci¨®n en la que se encontraba el centro por la afectaci¨®n de la covid-19¡å, admite Asuntos Sociales, aunque no especifica cu¨¢ntos afectados y fallecidos por la pandemia ha registrado la residencia. El centro ya est¨¢ calificado como residencia verde, es decir, que no hay casos de covid-19 activos en sus dependencias, pero el Govern ha decidido no retornar la gesti¨®n a Eulen.
La Generalitat tambi¨¦n hab¨ªa abierto un expediente sancionador a este centro por una presunta infracci¨®n grave y cinco muy graves. Las multas previstas oscilar¨ªa entre 4.000 euros por la irregularidad grave y 7.900 por cada una de las notificadas como muy graves. Asuntos Sociales ha rechazado explicar qu¨¦ clase de situaciones se detectaron en este centro. ¡°En el Bertran Oriola todo fue un desastre. No hubo gente para trabajar. Se contagiaron el 95% de los residentes y calculan que han fallecido unos 40. Cuando entraron en la residencia, la gente estaba desnutrida y deshidratada¡±, tercia Carcel¨¦n.
No es la primera vez que estos centros est¨¢n en el punto de mira. Ya sea por el ajuste de plantillas, que aboca al caos a unos cuidadores desbordados que no dan abasto para atender a todos los usuarios, o por la falta de recursos y atenci¨®n a los ancianos en los peores momento de la pandemia. Josep Maria Clevill¨¦, de 67 a?os, explicaba hace unas semanas a EL PA?S los ¨²ltimos d¨ªas de su madre, Pilar Riera, en la residencia Bertran i Oriola: ¡°Mi madre ha pasado por una guerra, una postguerra, el franquismo y ha trabajado toda su vida. Ten¨ªa un seguro m¨¦dico privado y estaban informados de que en caso de enfermedad deb¨ªan contactar con la mutua. Ha acabado muriendo por desatenci¨®n por una insuficiencia respiratoria. Han sido verdaderos asesinatos¡±.
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