El racismo, el cinismo y Buch
Interior promete mano dura con las actitudes policiales racistas, pero desoye la petici¨®n del Parlament para adoptar sanciones contra los agentes presuntamente implicados en la agresi¨®n a Wubi
Solo son 45 segundos. Merece la pena prestarles atenci¨®n. En ellos, entre gritos de dolor, se puede escuchar: ¡°Negro de mierda, hijo de puta¡±. ¡°He fallado, ?eh? Si no, te reventaba las costillas de un balazo¡±. ¡°La pr¨®xima vez que veas a la polic¨ªa, corre; vete m¨¢s lejos de ?frica¡±. Mientras el detenido dice: ¡°Por favor, dejadme en paz, que soy un humano como vosotros¡±, a lo que un agente responde: ¡°?No eres humano, eres un mono! ?Negro de mierda!¡±.
Los hechos ocurrieron en Sant Feliu Sasserra (Bages) en enero de 2019. Fue tras el desalojo de una vivienda por los mossos. El detenido fue el joven Wubi, de 20 a?os de edad. Los polic¨ªas se lo llevaron esposado hasta un aparcamiento donde se produjo la presunta agresi¨®n. Hasta hace unas semanas ninguna autoridad hab¨ªa abierto la boca al respecto. Pero a las 24 horas de que el audio del arresto fuera colgado en las redes sociales por SOS Racisme, los responsables del Departamento de Interior y del Govern pasaron de ignorar los hechos a considerarlos intolerables. El mism¨ªsimo Quim Torra asegur¨® que tomar¨ªa las ¡°medidas m¨¢s radicales y extremas¡± por esta agresi¨®n. El jefe de los Mossos, Eduard Sallent, dirigi¨® una carta a todos los agentes en la que afirmaba que se trataba de un ¡°caso aislado¡± que ¡°genera recelo de la ciudadan¨ªa hacia la polic¨ªa¡±. ¡°S¨¦ que cuando o¨ªsteis la grabaci¨®n sentisteis tambi¨¦n verg¨¹enza e indignaci¨®n por una conducta que no nos representa¡±, conclu¨ªa Sallent.
El consejero de Interior, Miquel Buch, indic¨® ¡ªtras su protocolaria condena verbal¡ª que esperar¨ªa a la sentencia para proceder a tomar medidas disciplinarias. De momento la ejemplaridad ha consistido ¡ªdespu¨¦s de que la grabaci¨®n trascendiera a la opini¨®n p¨²blica¡ª en enviar a los seis agentes investigados judicialmente a hacer trabajo de oficina en dependencias distintas de las que estaban destinados como integrantes de los ARRO. Contrariamente a lo dicho por Buch, la ley de polic¨ªa no impide que con la apertura de un procedimiento penal se puedan tomar medidas disciplinarias por los mismos hechos, tal como se encarg¨® de recordar ante el esc¨¢ndalo el nada sospechoso s¨ªndic de greuges, Rafael Rib¨®. Quiz¨¢s el problema reside en que este Gobierno tiene una visi¨®n tan cr¨ªtica de las leyes que instintivamente se resiste a aplicarlas. O tal vez el contorsionismo pol¨ªtico de este Ejecutivo le permite sentir verg¨¹enza y al tiempo no hacer nada para superarla.
Tal vez el contorsionismo pol¨ªtico de este Ejecutivo le permite sentir verg¨¹enza y no hacer nada para superarla
De momento los mossos imputados ¡ªexplica Eldiario.es¡ª se han negado a hacer la rueda de reconocimiento para que el agredido pueda identificar a los autores y as¨ª separar las manzanas podridas del resto. El juez hace un a?o que lo intenta infructuosamente. Los mandos policiales aseguran, por su parte, ser incapaces de identificar las voces de los protagonistas de la agresi¨®n como les ha requerido la justicia. La defensa de los seis polic¨ªas pide al juzgado de Manresa el archivo de la causa al haberse superado los seis meses de instrucci¨®n del caso.
Toda esa exhibici¨®n de cinismo se produce mientras a¨²n dura la resaca propagand¨ªstica de ¡°la auditoria m¨¢s grande en la historia de los mossos¡±, con la que las autoridades de Interior trataron de mostrar arteramente c¨®mo depuraban responsabilidades por los supuestos excesos policiales en las cargas contra manifestaciones de protesta a la sentencia de los l¨ªdere
s independentistas.
Este Gobierno tiene a la ciudadan¨ªa acostumbrada al trampantojo. Por eso mientras asegura que habr¨¢ mano dura contra el racismo hace o¨ªdos sordos a la petici¨®n del Parlament ¡ªaprobada con los votos de Esquerra, comunes y CUP¡ª para que se suspenda de empleo y sueldo a los mossos presuntamente implicados en la agresi¨®n a Wubi. Para acallar cr¨ªticas, JuntsxCat es capaz unos d¨ªas despu¨¦s de apoyar la creaci¨®n de una comisi¨®n de investigaci¨®n sobre racismo institucional y estructural, aunque haciendo ¨¦nfasis en escrutar a la seguridad privada.
La agresi¨®n ocurri¨® en 2019 pero ninguna autoridad abri¨® la boca hasta que SOS Racismo colg¨® el audio del arresto
El trato dado por Interior al caso de Wubi supone un triunfo del esprit de corps que la derecha y los poderes han practicado y reivindicado. Es un corporativismo defensivo que a veces guarda un enorme parecido con la meridional omert¨¤ siciliana. El problema es que cuando se hace bandera de la democracia, la transparencia y los derechos humanos, un caso como el del joven de Sant Feliu Sasserra es capaz de arruinar un buen eslogan. Por mucho que el conseller Buch y sus colaboradores levanten cortinas de humo con la propaganda de ¡°la auditoria m ¡°la auditoria m¨¢s grande en la historia de los mossos¡±.
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