Un enjambre de hilos y piedras de Chiharu Shiota para Balaguer

In the beginning was¡­, en el principio era¡­, las palabras que dan inicio al Evangelio sirven de t¨ªtulo para la gran instalaci¨®n que la artista japonesa Chiharu Shiota ha realizado para Planta, el at¨ªpico espacio expositivo de la Fundaci¨®n Sorigu¨¦ en la gigantesca y lunar cantera de la empresa en Balaguer. Un edificio de siete metros de alto, dise?ado por la propia artista acoge el enjambre de piedras e hilos negros, formando un universo tr...

In the beginning was¡­, en el principio era¡­, las palabras que dan inicio al Evangelio sirven de t¨ªtulo para la gran instalaci¨®n que la artista japonesa Chiharu Shiota ha realizado para Planta, el at¨ªpico espacio expositivo de la Fundaci¨®n Sorigu¨¦ en la gigantesca y lunar cantera de la empresa en Balaguer. Un edificio de siete metros de alto, dise?ado por la propia artista acoge el enjambre de piedras e hilos negros, formando un universo transitable, una especie de Big Bang congelado, que los visitantes recorren susurrando como si estuvieran en una catedral. Seg¨²n el sentir de cada uno el espacio creado por Shiota puede proteger y cobijar como un nido o atrapar y confundir como un laberinto. Sin embargo, ella no ha pensado en nada de eso al crearlo. ¡°Me interesaba explicar la relaci¨®n entre la piedra y el ser humano. Si miras en un microscopio, entre una piedra y una c¨¦lula no hay mucha diferencia, son materiales. He querido crear un universo que refleje el milagro de la vida¡±, explica Shiota que para realizar la pieza trabaj¨® dos semanas con varios ayudantes. ¡°Esta vez no fueron estudiantes, sino personas de la cantera que conocen las piedras. Fueron 15 d¨ªas de montaje, pero seis a?os de trabajo¡±, a?ade la artista, que no utiliza simulaciones por ordenador ni esbozos o maquetas, solo un sistema de tri¨¢ngulos, que le permite materializar formas curvas y desplegar sus mundos.

En 2015 ya present¨® una especie de aperitivo de esta pieza en el Museo que la Fundaci¨®n Sorigu¨¦ tiene en Lleida. Era la primera vez que trabajaba con piedras, pero el mundo ya se hab¨ªa enamorado de sus enjambres de objetos encontrados, vestigios de memoria y vidas pasadas como llaves, antiguas puertas y sillas, atrapadas en una red inextricable, pero no ca¨®tica. En aquel mismo a?o represent¨® Jap¨®n en la Bienal de Venecia consagrando una carrera que ya iba disparada. Sin embargo, se acercaban tiempos dif¨ªciles para Shiota: le fue diagnosticado un c¨¢ncer, tuvo que ser operada y tratada con quimioterapia, una experiencia traum¨¢tica que le hizo pensar mucho y replantearse la posibilidad de crear alguna instalaci¨®n permanente, que hasta entonces siempre hab¨ªan sido ef¨ªmeras.

¡°Empec¨¦ a pensar donde terminar¨ªan mis ideas y emociones si hubiese muerto, porque es mi vida la que expongo a trav¨¦s de mi arte, es mi energ¨ªa la que queda concentrada en mis obras¡±, indica Shiota, que acept¨® la propuesta de realizar una instalaci¨®n monumental para Planta. ¡°Chiharu tiene obras en los principales museos, pero esta es la primera instalaci¨®n permanente que deja en Europa y la segunda en el mundo, la otra est¨¢ en Tasmania¡±, cuenta orgullosa Anna Vall¨¦s

, presidenta del grupo Sorigu¨¦ y alma mater del proyecto Planta, que ha contado con la colaboraci¨®n de Nerea Fern¨¢ndez, la galerista madrile?a di Shiota. ¡°Todas las piezas que tenemos aqu¨ª reflejan la sinergia entre arte, paisaje y conocimiento, pero esta es la que m¨¢s dialoga con el entorno, la que se nutre del mismo alimento, piedras y gravas, que el grupo empresarial que financia Planta¡±, a?ade Vall¨¦s.

Por eso el edificio de Shiota es una especie de prolongaci¨®n del Edificio de la Mineralog¨ªa, donde se explican los procesos que permiten la extracci¨®n de los materiales, as¨ª como la regeneraci¨®n peri¨®dica de los terrenos. La pieza de Shiota no es la ¨²nica novedad de Planta, que tambi¨¦n estrena la obra del surafricano William Kentridge, More Sweetly Play the Dance, una procesi¨®n que mezcla el car¨¢cter reivindicativo, celebrativo e ir¨®nico de las procesiones post-apartheid s¨ªmbolo de libertad, resistencia y esperanza. La espectacular proyecci¨®n sobre ocho pantallas se pudo ver hace unos meses en el CCCB, pero la enorme nave de Planta rodeada por las monta?as de gravas de la cantera, multiplica su impacto visual.

Una obra, un edificio

Desde 2011 Ana Vall¨¦s ha reunido una serie del proyecto Planta, que ha contado con la colaboraci¨®n de Nerea Fern¨¢ndez, la galerista madrile?a di Shiota. ¡°Todas las piezas que tenemos aqu¨ª reflejan la sinergia entre arte, paisaje y conocimiento, pero esta es la que m¨¢s dialoga con el entorno, la que se nutre del mismo alimento, piedras y gravas, que el grupo empresarial que financia Planta¡±, a?ade Vall¨¦s.DRAFTJS_BLOCK_KEY:5lu33tros para que evocara la Sala de Turbinas de la Tate Modern de Londres, donde se estren¨®. El dep¨®sito de la obra termina dentro de un a?o, pero lo m¨¢s probable es que ser¨¢ renovado. Cristina Iglesias, viuda del artista, quiere que la pieza se exhiba y no hay muchos sitios en Europa que la puedan acoger permanentemente. Las visitas a Planta se reanudaron el 12 de junio (reservas https://plantaproject.com/).