TMB y FGC rechazan las cuentas de la concesionaria de la T-Mobilitat
Los operadores p¨²blicos, con el 4% del capital, votan en contra por las dudas del auditor
Ni Transporte Metropolitano de Barcelona (TMB)elpais socmobilitat, operador de la red de metro y autobuses p¨²blicos de la capital catalana, ni Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) dieron su visto bueno a las cuentas econ¨®micas de 2020 presentadas por SocMobilitat, la sociedad responsable de la implantaci¨®n de la nueva tarjeta de transporte T-Mobilitat, que...
Ni Transporte Metropolitano de Barcelona (TMB)elpais socmobilitat, operador de la red de metro y autobuses p¨²blicos de la capital catalana, ni Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) dieron su visto bueno a las cuentas econ¨®micas de 2020 presentadas por SocMobilitat, la sociedad responsable de la implantaci¨®n de la nueva tarjeta de transporte T-Mobilitat, que ha sufrido esta semana su en¨¦simo contratiempo al detectarse un fallo de seguridad en la p¨¢gina web donde los usuarios pod¨ªan registrarse. El director financiero de FGC, Llu¨ªs Huguet, rechaz¨® firmar los n¨²meros en mayo despu¨¦s de que el auditor apuntara ¡°dudas significativas sobre la capacidad de la adjudicataria para continuar como empresa en funcionamiento¡±.
FGC, TMB y Metro de Barcelona tienen, en total, un 4% de las acciones de Societat Catalana per a la Mobilitat (SocMobilitat), una uni¨®n empresarial controlada por CaixaBank, Indra, Fujitsu y Moventia que maneja una adjudicaci¨®n p¨²blica de 94,5 millones de euros. Los operadores de transporte esperan de la compa?¨ªa el desarrollo de su nuevo sistema de pago, embri¨®n tambi¨¦n de un nuevo modelo tarifario para el conjunto del transporte p¨²blico colectivo catal¨¢n. La T-Mobilitat acarrea seis a?os de retraso, un sobrecoste que dobla el presupuesto inicial y una crisis de reputaci¨®n agravada la semana pasada por el cierre de su p¨¢gina web 24 horas despu¨¦s de su lanzamiento por un fallo de seguridad que aflor¨® datos personales.
El director financiero de FGC desconfi¨® de las cuentas de SocMobilitat ¡°atendiendo a las salvedades¡± que consign¨® la auditora KPMG, tal y como sucedi¨® un a?o antes, y se neg¨® incluso a firmarlas. El representante de TMB, pese a ese voto en contra, s¨ª firm¨®, dejando de manifiesto que lo hac¨ªa al entender que era su obligaci¨®n, pero evidenciando su rechazo al contenido de las mismas.
En un informe con fecha del pasado 19 de mayo, el auditor expone que SocMobilitat present¨® sus cuentas de 2020 con irregularidades. Concretamente, seg¨²n el texto, la adjudicataria apunt¨® como deudas a largo plazo unos importes (61,4 millones en 2020 y 34,8 en 2019) que deber¨ªan haberse clasificado como deudas a corto plazo. Esto es as¨ª en virtud de que CaixaBank (que adem¨¢s de formar parte de la uni¨®n de empresas, es tambi¨¦n la entidad financiera que financia sus operaciones) notific¨® a SocMobilitat que, debido a los retrasos se hab¨ªan incumplido algunas obligaciones del contrato y existe una causa objetiva para hacer vencer la deuda antes de lo establecido en el contrato original. Este vencimiento todav¨ªa no se ha ejecutado, pero del contrato se desprende que la situaci¨®n de incumplimientos hace que la entidad corte el grifo para cualquier financiaci¨®n adicional que sea necesaria.
La deuda de SocMobilitat incluye todo el capital p¨²blico comprometido, un 63% superior al valor pactado en 2014 tras dos renegociaciones de contrato. Hasta que la compa?¨ªa no empiece a generar ingresos con la puesta en marcha de la T-Mobilitat (cobrar¨¢ por cada validaci¨®n de tarjeta hasta 2033) no podr¨¢ empezar a devolver el cr¨¦dito.
KPMG indica que la sociedad no ha aportado documentaci¨®n suficiente que permita evaluar los posibles efectos de los retrasos que acumula el proyecto desde hace seis a?os y, por lo tanto, no se puede estimar el efecto de las demoras. La fecha para la puesta en marcha del proyecto es una de las inc¨®gnitas que rodean a la T-Mobilitat. El exconsejero de Territorio, Dami¨¤ Calvet, afirm¨® que ser¨ªa el 1 de enero de 2022, pero su sucesor en el ¨¢rea, el actual vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigner¨®, matiz¨® hace unos meses que el estreno ser¨ªa ¡°esta legislatura¡±. Lo cierto es que la fecha est¨¢ fijada en el contrato: seg¨²n la ¨²ltima modificaci¨®n del mismo, acometida en febrero de 2020, la implementaci¨®n de la tarjeta tiene que estar lista en el a?o 2021.
P¨¦rdidas a la espera de renegociar el contrato
Las cuentas auditadas arrojan unas p¨¦rdidas de 253.570 euros en 2019, y de 203.346 euros en 2020, pese a un significativo aumento del 44% en de la facturaci¨®n, que se situ¨® en los 8,3 millones de euros. Ese aumento se explicar¨ªa por el inicio de la instalaci¨®n de infraestructura en estaciones y operadores de los validadores para activar la T-Mobilitat por parte de los usuarios.
Tras dos modificaciones del contrato (una en marzo de 2017 y otra en febrero de 2020, ambas solicitadas por la ATM y en las que se reevaluaron los costes a?adiendo m¨¢s inversi¨®n por parte del ente p¨²blico), las dos partes negocian ahora un nuevo reequilibrio econ¨®mico para determinar la compensaci¨®n a la empresa por los retrasos derivados de la pandemia. SocMobilitat lo solicit¨® formalmente el 1 de febrero de 2021 y la ATM ten¨ªa 90 d¨ªas, hasta el 1 de mayo, para resolver el procedimiento. El plazo ha vencido y sigue en negociaci¨®n, como admiten los responsables del proyecto.