El suicidio anunciado de Marcel en la celda 7
La justicia indaga si una prisi¨®n catalana fue negligente por no activar el protocolo antisuicidios en un preso en aislamiento
En su ¨²ltima noche con vida, Marcel Garc¨ªa Mart¨ªn se levant¨® de la cama para dar las buenas noches al funcionario encargado del recuento. Despu¨¦s, en la oscuridad y el silencio de su celda, se quit¨® los cordones de las zapatillas deportivas, los at¨® a los barrotes de la ventana y se ahorc¨®. A las 7.30 del 25 de julio de 2019, otro funcionario lo encontr¨® muerto. Ten¨ªa 19 a?os. Tres d¨ªas antes, Marcel hab¨ªa verbalizado su intenci¨®n de quitarse la vida a una psic¨®loga de la c¨¢rcel de J¨®venes de Quatre Camins. Pese a la llamada de alerta, el centro penitenciario no activ¨® el protocolo de prevenci¨®n de suicidios.
Una jueza de Granollers (Barcelona) investiga si la muerte de Marcel pudo haberse evitado y si la Administraci¨®n actu¨® con negligencia. El joven llevaba tres meses en la celda de aislamiento n¨²mero 7 del Departamento Especial de R¨¦gimen Cerrado (DERT, por sus siglas en catal¨¢n) por peleas con otros internos. All¨ª, solo en una celda de diez metros cuadrados, pasaba 23 horas al d¨ªa. Deb¨ªa abandonar el primer grado en cuesti¨®n de d¨ªas. Pero un incidente con otro preso en la sala de comunicaciones, el fin de semana anterior a su muerte (ocurrida un jueves) hab¨ªa prolongado el castigo una semana.
¡°Para m¨ª, esa semana extra fue el detonante que le acab¨® de romper¡±, explica Esther Mart¨ªn, la madre de un chico diagnosticado con trastorno por d¨¦ficit de atenci¨®n e hiperactividad (TDAH) y a quien el consumo temprano de todo tipo de drogas ¡ªespecialmente cannabis¡ª hab¨ªa causado da?os cerebrales. Estuvo ingresado en un centro psiqui¨¢trico a?o y medio, hasta que cumpli¨® los 18. Esther y Vicen? Garc¨ªa, el padre, cuentan que Marcel se hab¨ªa metido en l¨ªos desde adolescente. En una ocasi¨®n fue detenido y luego puesto en libertad por robos en coches. Ignoran si hubo m¨¢s episodios. Pero era la primera vez que estaba preso.
Marcel fue detenido por una agresi¨®n a un joven en abril de 2018 e ingres¨® de inmediato en Quatre Camins como preso preventivo. Estaba a la espera de juicio por lesiones, amenazas y hurto. Sus peleas con otros internos lo llevaron a ser clasificado en primer grado, lo que significa entrar en una de las celdas del DERT, el r¨¦gimen penitenciario m¨¢s duro. ¡°Mi hijo estaba muy mal y no estaba para que lo metieran en un DERT, sino en una unidad psiqui¨¢trica¡±, lamenta Esther. ¡°Quiz¨¢ no tienen otro sistema de castigo para la gente que da problemas¡±, concede Vicen?, que asegura que solo pudo ponerse en la piel de su hijo cuando lleg¨® el confinamiento domiciliario con la pandemia.
El domingo anterior al suicidio, Esther y Vicen? visitaron a su hijo. Mantuvieron, a trav¨¦s de la mampara, una conversaci¨®n m¨¢s o menos normal, aunque la madre sospecha que Marcel ¡°estaba haciendo el papel¡±. Especularon con c¨®mo ser¨ªa su vida de vuelta al m¨®dulo, hablaron de un futuro en libertad una vez cumplida la condena... Nada les hizo pensar que quer¨ªa suicidarse. Pero al d¨ªa siguiente, lunes 22 ¡ªtras conocer que seguir¨ªa en el DERT unos d¨ªas m¨¢s¡ª, Marcel estall¨® en una entrevista con la psic¨®loga. Como consta en los informes a los que ha accedido EL PA?S, el interno le cont¨® que quer¨ªa ¡°acabar con todo¡± y que ya hab¨ªa encontrado ¡°la forma de hacerlo¡±. ¡°Manifiesta que no le importa su vida ni volver a estar en primer grado, ni su familia. Al contrario, cree que ser¨¢ mejor si ¨¦l no est¨¢¡±, escribi¨® la trabajadora, que le pregunt¨® si hab¨ªa pensado en suicidarse. ?l contest¨® que s¨ª.
Riesgo ¡°bajo¡±
La psic¨®loga traslad¨® su informe a los responsables del centro para que decidieran si hab¨ªa que activar el protocolo de prevenci¨®n del suicidio. El psiquiatra que examin¨® a Marcel decidi¨® que no era necesario y, por defecto, el ordenador marc¨® que el grado de riesgo de suicidio era ¡°bajo¡±. No se activ¨®, en coherencia con ese planteamiento, ninguna de las medidas de seguridad previstas: acompa?amiento permanente o para dormir, interno ¡°sombra¡±, retirada de objetos peligrosos, visualizaci¨®n por c¨¢mara o un registro integral.
Los padres de Marcel, vecinos de Badalona, est¨¢n convencidos de que alguien no hizo bien su trabajo y de que la Administraci¨®n, que tiene a los presos bajo su custodia, es responsable. ¡°No actuaron cuando las alarmas estaban encendidas¡±, lamenta el abogado de la familia, Cristian Carci. Los padres pelean por que el caso siga vivo en el Juzgado de Instrucci¨®n N¨²mero 1 de Granollers, que lo archiv¨® dos veces y fue obligado a reabrirlo, otras tantas, por la Audiencia de Barcelona. El tribunal cree que hay indicios para pensar que quiz¨¢s no se actu¨® ¡°debidamente¡± para ¡°prever¡± el suicidio y, en su caso, ¡°evitarlo con alguna actuaci¨®n¡±. Y ha ordenado a la Administraci¨®n que entregue el expediente con la asistencia m¨¦dica recibida por Marcel y que explique qu¨¦ supone activar el protocolo antisuicidios, sobre todo ¡°teniendo en cuenta la situaci¨®n del interno y el periodo de tiempo¡± que llevaba en aislamiento.
El Departamento de Justicia de la Generalitat afirma, a preguntas de este diario, que no puede comentar el caso concreto de Marcel, pero que siempre que se produce un suicidio se abre una investigaci¨®n por el servicio de inspecci¨®n y se analiza el caso para implementar ¡°elementos de mejora¡±. El programa marco de prevenci¨®n de suicidios entr¨® en vigor el 1 de junio de 2019 (un mes antes del suicidio de Marcel) y da al criterio cl¨ªnico prioridad sobre otro tipo de exploraciones. ¡°Las intervenciones y su duraci¨®n las determina el tipo de riesgo evaluado, la patolog¨ªa mental subyacente y el estado psicopatol¨®gico¡±, seg¨²n Justicia.
Una portavoz se?ala que ¡°la prevenci¨®n del suicidio es un tema prioritario¡± para el departamento y que se acaba de firmar una colaboraci¨®n con Salud que incide en prevenir el suicidio entre la poblaci¨®n reclusa: la tasa de suicidios entre los presos penados (Marcel era preventivo) es seis veces mayor a la poblaci¨®n general en Catalu?a, seg¨²n datos oficiales.
Investigados dos trabajadores
Dos trabajadores de Quatre Camins permanecen investigados por suicidio de Marcel. Una es la psic¨®loga que le atendi¨® el d¨ªa 22 y que ratific¨® ante la jueza que el joven le hab¨ªa dicho que quer¨ªa acabar con su vida. El otro es el psiquiatra que rechaz¨® activar el protocolo, quien afirm¨® que cuando fue requerido para visitar al preso este estaba ¡°contento y motivado¡±, y que incluso le habl¨® de planes de futuro: dejar las drogas, apuntarse a la escuela de la c¨¢rcel, qui¨¦n sabe si tener hijos. No se pod¨ªa prever, declar¨®, que el chico ¡°tuviera intenci¨®n de suicidarse¡±. El psiquiatra agreg¨® que Marcel era peligroso para los dem¨¢s, pero no para s¨ª mismo.
La noche del 23 al 24 de julio, Marcel rompi¨® el cristal de la ventana de su celda y sufri¨® algunas lesiones. No era la primera vez: seg¨²n consta en un informe, hab¨ªa tenido ¡°conductas parasuicidas¡±, pero eran siempre ¡°autolesiones superficiales¡± cuya finalidad era calmar la ansiedad. La ma?ana del 24, el psiquiatra volvi¨® a la celda 7. Pero Marcel ya no quiso ser visitado ni recibir la medicaci¨®n que se le ofrec¨ªa. Empez¨® a dar golpes en la celda. El psiquiatra admiti¨® que escuch¨® los ruidos, pero no le dio m¨¢s importancia porque en el aislamiento del DERT es algo frecuente. ¡°Siempre escucho gritos, gente que da pu?etazos¡±.
Para Vicen?, el padre, esa actitud no es aceptable: ¡°?C¨®mo es posible que escuches a una persona que sabes que tiene problemas dar golpes y te vayas?¡±, se pregunta. ¡°Nos dijeron que Marcel era peligroso para los dem¨¢s, pero no para s¨ª mismo. Se equivocaron. Solo quiero que reconozcan que cometieron un error¡±.
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