Intento de rebeli¨®n de los directores de primaria de Catalu?a por los nuevos horarios de septiembre

Los directores de las escuelas de primaria p¨²blicas est¨¢n que trinan con la hora de ocio educativo que se implanta en septiembre para compensar la jornada intensiva. Esta hora complementaria la cubrir¨¢n monitores y las direcciones son las encargadas de firmar el contrato, pero consideran que no re¨²ne las condiciones de calidad ni de transparencia. Por ello, muchos directores han intentado emprender un movimiento de boicot, no firmando los contratos, aunque finalmente muchos lo har¨¢n por ¡°responsabilidad¡±, admiten.

La Generalitat sorprendi¨® en febrero anunciando por sorpresa que el pr¨®xi...

Los directores de las escuelas de primaria p¨²blicas est¨¢n que trinan con la hora de ocio educativo que se implanta en septiembre para compensar la jornada intensiva. Esta hora complementaria la cubrir¨¢n monitores y las direcciones son las encargadas de firmar el contrato, pero consideran que no re¨²ne las condiciones de calidad ni de transparencia. Por ello, muchos directores han intentado emprender un movimiento de boicot, no firmando los contratos, aunque finalmente muchos lo har¨¢n por ¡°responsabilidad¡±, admiten.

La Generalitat sorprendi¨® en febrero anunciando por sorpresa que el pr¨®ximo curso escolar empezar¨ªa una semana antes: el 5 de septiembre en primaria y el 7, en secundaria. Para compensar los d¨ªas lectivos adicionales, Educaci¨®n decidi¨® implantar la jornada intensiva, con una hora de ocio educativo (de 15.30 a 16.30 h) que cubrir¨ªa el resto de horario escolar y que ser¨ªa gratuito para las familias. Para ello, Educaci¨®n anunci¨® una partida de 12 millones. El Departamento decidi¨® que esta hora la gestionaran los monitores del comedor escolar (porque supon¨ªa simplemente alargar una hora su jornada). Educaci¨®n se ha encargado de contactar con estas empresas (en Barcelona ciudad lo hacen directamente los directores), pero administrativamente son las direcciones de cada centro las encargadas de firmar un contrato menor con su empresa de comedor y pagar el servicio con la partida enviada por el Departamento.

Hace meses que las direcciones critican la forma en que se est¨¢ gestionando esta hora de ocio educativo y este final de curso muchas han encontrado una forma de protestar: no firmar el contrato. La iniciativa surge de las escuelas de Girona, que han replicado en otros territorios. ¡°Yo no he firmado el contrato todav¨ªa. He solicitado a la empresa una serie de informaci¨®n sobre las condiciones del servicio, en cuanto a material, titulaci¨®n de los monitores o el proyecto. Cuando llegue el momento, si no firmo es porque la empresa no responde a mis preguntas¡±, explica un director, miembro de la junta de directores de Girona. Este docente asegura que aunque el sentimiento de rechazo es mayoritario, la mayor¨ªa de direcciones han rubricado el contrato por ¡°presiones¡± del Departamento.

En Castellar del Vall¨¨s, las ocho escuelas de primaria hab¨ªan acordado no firmar. Educaci¨®n hab¨ªa fijado de plazo m¨¢ximo el 30 de junio, pero lo dilat¨® hasta este lunes. ¡°Al final todas hemos ido firmando, yo lo hice el viernes. El Departamento nos dijo que si no firm¨¢bamos nos enviar¨ªa un requerimiento y entonces no podr¨ªamos ofrecer esta hora de ocio. Pero sabemos que hay familias que la necesitan y por responsabilidad decidimos firmar. Pero la pataleta ya la hemos hecho¡±, tercia una directora, en representaci¨®n de las escuelas de este municipio vallesano.

Durante estos meses, muchas direcciones han expresado sus quejas al Departamento, pero a la hora de que este malestar se manifieste en una acci¨®n de protesta concreta, llega la ¡°impotencia¡±. ¡°No nos podemos permitir el lujo de no firmar. Por las consecuencias que ello puede comportarnos, pero tambi¨¦n por sentido de la responsabilidad, porque somos un servicio p¨²blico y tenemos que pensar en las familias y los ni?os¡±, resume un director de la junta central permanente.

La junta de directores de escuelas p¨²blicas de primaria de Girona ha decidido poner en evidencia su malestar a trav¨¦s de un comunicado en que, aunque consideran ¡°acertada¡± la decisi¨®n de avanzar el inicio de curso, aseguran que la hora de ocio educativo para compensar la jornada intensiva ¡°no es una soluci¨®n adecuada y el resultado de una improvisaci¨®n¡±. Los directores lo justifican en una larga lista de dificultades e inconvenientes.

Por un lado, las direcciones se quejan de que el material de estas actividades correr¨¢ a su cargo porque la aportaci¨®n de Educaci¨®n solo cubre los monitores. ¡°El gasto que hagamos no est¨¢ presupuestado, as¨ª que habr¨¢ que crear una partida extraordinaria nueva, y ello supondr¨¢ recortar el gasto de otros sitios porque los presupuestos de este a?o ya est¨¢n cerrados¡±, se queja el director de Girona. Asimismo, califican de ¡°desorbitado¡± el gasto que supondr¨¢ para Educaci¨®n y lamentan que no se destinen esos 12 millones en temas m¨¢s prioritarios. ¡°El Departamento nos enviar¨¢ unos 4.000 euros para pagar a los monitores una hora durante un mes, cuando recibimos poco m¨¢s de 6.000 euros para gastos de mantenimiento anual. Es alucinante, estamos muy enfadados¡±, expresa este director. Igualmente, muchas direcciones se quejan de los escasos requisitos para ser monitor (solo ser mayor de edad y poseer un certificado negativo de delitos sexuales), alertan de los problemas para encontrar monitores, dudan de que las actividades tengan un car¨¢cter educativo y consideran que esa hora se convertir¨¢ ¡°en un aparcamiento de ni?os¡±.

Con todo ello, las direcciones de Girona aseguran que se reunieron dos veces con el consejero Josep Gonz¨¤lez-Cambray para proponerle que solo se hiciera la jornada intensiva durante la primera semana de curso y el resto, recuperar el horario habitual. M¨¢s all¨¢, incluso propusieron al Departamento de Educaci¨®n que la jornada intensiva sea opcional, como en junio, y que sean los consejos escolares de cada centro los que decidan. Los directores no entienden por qu¨¦ se ha hecho una excepci¨®n con los centros de educaci¨®n especial y las escuelas rurales, y no se puede hacer lo mismo con el resto de colegios. ¡°Hemos constatado su poca capacidad de negociaci¨®n [en referencia al Departamento], el desconocimiento de las dificultades y de la realidad de las escuelas del territorio¡±, espetan los directores en su comunicado.

Por su parte, el Departamento asegura que ¡°se han valorado las diferentes propuestas y la que ten¨ªa mayor consenso entre las direcciones es la actual. No todo el mundo est¨¢ de acuerdo con Girona y lo que ped¨ªan las direcciones es que el modelo fuera igual para todos¡±.

Monitores profesionales

Los sindicatos del ocio educativo tambi¨¦n lamentan la forma en que se est¨¢ gestionando la jornada intensiva de septiembre y lamentan la falta de requisitos para ser monitor, aunque recuerdan que es lo habitual. ¡°La normativa fija que a partir de 24 ni?os, el 60% deben tener el t¨ªtulo de monitor, pero no todos¡±, apunta Cristina Broto, responsable de ocio educativo de CC OO. Desde el sindicato piden una normativa que profesionalice el sector y mejore las condiciones laborales. ¡°Pensar que el ocio puede funcionar como un aparcamiento de ni?os y no como algo educativo no nos beneficia. Lo que se est¨¢ haciendo va en direcci¨®n contraria a la profesionalizaci¨®n: buscar gente sin t¨ªtulo ni formaci¨®n. Se nos trata como vigilantes¡±, lamente Broto.

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