El acusado de intentar quemar viva a su pareja en Lleida: ¡°Ahora s¨ª que vas a morir, ahora voy a quemarlo todo¡±
El juez ordena el ingreso en prisi¨®n provisional del hombre por un delito de asesinato en grado de tentativa
El juez ha ordenado el ingreso en prisi¨®n comunicada y sin fianza para el hombre acusado de intentar quemar viva a su pareja mientras dorm¨ªa en Artesa de Segre (Lleida) y provocar un incendio en el edificio. La mujer cont¨® a los Mossos que adem¨¢s trat¨® de estrangularla. El Juzgado de Instrucci¨®n y Primera Instancia n¨²mero 1 de Balaguer, exclusivo sobre la violencia contra la mujer, investiga lo ocurrido en el domicilio como un asesinato en grado de tentativa y un delito de incendio. La v¨ªctima sigue ingresada en el hospital, con quemaduras en el 18% de su cuerpo, motivo por el que no se le ha podido tomar declaraci¨®n en sede judicial. El acusado ha negado haberle prendido fuego.
El auto de prisi¨®n detalla que aquella noche la mujer, de 48 a?os, se hab¨ªa acostado sobre las 11 de la noche. Seg¨²n el relato de la v¨ªctima a los Mossos, poco despu¨¦s su pareja, de 38, regres¨® al piso, rebusc¨® en su bolso algo de dinero para drogas y se march¨®. M¨¢s tarde le oy¨® volver, colocar una nevera detr¨¢s de la puerta y notar c¨®mo le echaba ¡°por encima algo en la cara¡± mientras le dec¨ªa: ¡°Esto no se enciende, hija de puta, te voy a matar¡±. Ella sospecha que en ese momento le pudo tirar el alcohol con romero que guarda para el dolor de piernas.
Acto seguido, la mujer se levant¨® de la cama, asustada, y le vio coger acetona, que le tir¨® de nuevo en la cara. ¡°Ahora s¨ª que vas a morir, ahora voy a quemarlo todo¡±, cont¨® la v¨ªctima a la polic¨ªa catalana que le dijo. Ella se quit¨® entonces el jersey y ¨¦l la cogi¨® por el cuello para estrangularla. Despu¨¦s ya no recordaba mucho m¨¢s: que baj¨® por las escaleras, sin saber muy bien c¨®mo, despu¨¦s de que ¨¦l la ¡°estirase¡±, y le dijese: ¡°V¨¢monos que yo tambi¨¦n me estoy quemando¡±.
El fuego en el piso afect¨® al edificio de tres plantas, que fue desalojado, momento en el que la polic¨ªa, los sanitarios y los bomberos fueron avisados. Una vecina explic¨® a los agentes que las peleas de la pareja, que viv¨ªa all¨ª desde el mes de abril, eran habituales. Que ella le hab¨ªa explicado los problemas que ten¨ªa con su novio, aunque nunca le relat¨® ninguna agresi¨®n f¨ªsica. Aquella noche, la mujer les oy¨® discutir de nuevo, pero pens¨® que parar¨ªan. La v¨ªctima le cont¨® horas antes que le hab¨ªa quitado las llaves del piso y que esperaba dormir ya tranquila sin ¨¦l. Pero poco despu¨¦s, acudi¨® de nuevo a su vecina para ense?arle que la puerta se hab¨ªa quedado bloqueada y no pod¨ªa cerrarla.
De madrugada, la vecina sali¨® al balc¨®n y escuch¨® a la mujer gritar: ¡°No me mates, no me mates, por favor no me mates¡±. Y poco despu¨¦s pedir ayuda y gritar que le hab¨ªa prendido fuego. Cuando baj¨® a la calle, vio que ten¨ªa el pelo y la cara quemados. ?l se limit¨® a repetir que no hab¨ªa sido y se march¨®. Otra vecina cont¨® a la polic¨ªa que ya con el fuego desatado, le pidi¨® al hombre que le acercase una escalera para salir del inmueble, y este se limit¨® a responder: ¡°Qu¨¦ me importa, no es mi problema¡±, y no la ayud¨®.
En el momento del fuego, la pareja de la v¨ªctima se encontraba en la puerta de la vivienda, de donde se fue a casa de un conocido. Este avis¨® a los Mossos de que hab¨ªa ido a dormir all¨ª, despu¨¦s de que le dijese que su piso se hab¨ªa quemado, sin darle m¨¢s detalles. Le detuvieron a las ocho de la ma?ana, cuatro horas despu¨¦s del incendio. En sede judicial, el hombre ha negado los hechos y ha asegurado que aquella noche hab¨ªan discutido, que al regresar, se encontr¨® el fuego ya iniciado y que intent¨® ayudar a su pareja sofocando las llamas de la cara. Y que se march¨® del lugar porque la oy¨® acusarle, temi¨® que la gente pensase que hab¨ªa sido ¨¦l y decidi¨® que ya la visitar¨ªa al d¨ªa siguiente en el hospital, ya m¨¢s tranquilo.
El juzgado, sin embargo, considera que su declaraci¨®n ha sido ¡°muy imprecisa¡± y con ¡°contradicciones en diferentes puntos¡±. Sab¨ªa d¨®nde estaban la acetona y el alcohol y, adem¨¢s, ten¨ªa un mechero en el momento de su detenci¨®n porque es fumador, sostiene el auto. Preguntado por qu¨¦ su pareja le acusa de haberla quemado, ¨¦l se ha limitado a responder: ¡°Cuando est¨¢ rabiosa no sabe lo que dice, cuando se cabrea intenta hacer da?o a la gente¡±.
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